Comienza la Sesión de Sala número 83, que abre el presidente de la Corporación, José Miguel Castro.
El acta de la sesión 74 queda a disposición de las señoras y los señores diputados.
El señor Prosecretario dará lectura a la Cuenta.
Gracias, señor Presidente. Se ha recibido:
- Mensaje de Su Excelencia el Presidente de la República, por el cual da inicio a la tramitación del proyecto que establece beneficios para las personas mayores respecto del impuesto territorial y modifica los aportes del Fondo Común Municipal.
- Oficio de Su Excelencia el Presidente de la República, mediante el cual hace presente la urgencia calificada de discusión inmediata para el despacho del proyecto que establece beneficios para las personas mayores respecto del impuesto territorial y modifica los aportes al Fondo Común Municipal.
- Oficio de Su Excelencia el Presidente de la República, mediante el cual hace presente la urgencia suma para el despacho del proyecto que modifica el Código del Trabajo para extender el permiso laboral a los trabajadores en caso de muerte de una mascota o animal de compañía.
Se da cuenta para el despacho de los siguientes proyectos. El que modifica la Ley N° 21.040 y otros cuerpos legales, fortaleciendo la gestión educativa y mejorando las normas sobre administración e instalación del Sistema de Educación Pública. El que introduce beneficios tributarios a la clase media, compensados mediante la tributación que indica, reduce exenciones y modifica otras disposiciones. Oficio del Senado por el cual comunica que ha aprobado las enmiendas introducidas por esta Cámara al proyecto iniciado en moción sobre protección de las rompientes de las olas para la práctica del surf. Proyecto iniciado en moción que modifica diversos cuerpos legales para sancionar administrativamente la emisión, obtención o uso indebido de licencia médica. Proyecto iniciado en moción que modifica la Ley General de Pesca y Acuicultura para prohibir la crianza y comercialización de pulpos. Proyecto iniciado en moción que regula el derecho y deber preferente de los padres de educar a sus hijos. Proyecto iniciado en moción que modifica la Ley N° 20.880, sobre probidad en la función pública y prevención de los conflictos de intereses, para incorporar a funcionarios que cumplan labores directas en depósitos de armas del Estado. Finalmente, señor Presidente, un proyecto iniciado en moción que modifica el Decreto Ley N° 2.306 de 1978, que dicta normas sobre reclutamiento y movilización de las Fuerzas Armadas, para exigir el cumplimiento efectivo del servicio militar a las personas que indica.
Es toda la Cuenta para esta sesión, señor Presidente.
Gracias, señor prosecretario. Preguntas sobre la Cuenta. Diputados, primero Sánchez, Manucheri, Araya y después Moreno. Diputado Sánchez.
Muchas gracias, señor Presidente. Saludar a todos los colegas y a los funcionarios que nos acompañan en la Sala, y pedir que el proyecto de ley número 7, el de los pulpos, en vez de ir a la Comisión de Pesca vaya primero a la Comisión de Economía y después a la Comisión de Pesca. Muchas gracias.
Número 7: que vaya primero a Economía y después a Pesca. ¿Habría acuerdo? No hay acuerdo; entonces, va a ir en votación. En votación la solicitud del diputado Sánchez. Han votado todas las señoras y señores diputados. Fueron todos los llamados. Resultado de la votación: 38 votos por la afirmativa, 32 en contra y 3 abstenciones. Aprobado.
Diputado señor Manucheri, usted tiene la palabra.
Gracias, Presidente. Quería solicitar que el proyecto número 8, que está en la tabla, pase, con posterioridad de Educación, a la Comisión de Constitución; y que el proyecto número 10, luego de la Comisión de Defensa, también pase a la Comisión de Constitución.
Primero, el número 8. ¿Habría acuerdo? No hay acuerdo; entonces, en votación. Un minuto, un minuto. Proyecto número 8: la moción que regula el derecho y deber preferente de los padres de educar a sus hijos.
Comisión de Constitución. En votación. Han votado todas las señoras y los señores diputados. Resultado de la votación: 49 votos por la afirmativa, 26 en contra y 5 abstenciones. Aprobado.
Vamos: el segundo es el número 10, después de la Comisión de Defensa. El proyecto número 10 pase a la Comisión de Constitución. ¿Habría acuerdo para esto? No hay acuerdo. Entonces, en votación que el proyecto número 10 de la Cuenta...
Un minuto, un minuto. Un minuto, por favor. En votación. Primer llamado. Han votado todas las señoras y los señores diputados. Segundo llamado. Han votado todas las señoras y los señores diputados. Resultado de la votación: 38 votos por la afirmativa, 46 en contra y una abstención. No aprobado, o rechazado.
Ahora, el diputado Araya... Teníamos primero al diputado Moreno; diputado Moreno y, después, la diputada Marlene. ¿Está listo lo suyo? Bien, entonces le vamos a dar la palabra a la diputada Marlene. No, no, no; sí, ya lo arreglamos. ¿Está arreglado? Ah, era eso, no quería hablar. Perfecto. Muy bien.
No habiendo más palabras sobre la Cuenta, se cierra la Cuenta.
A solicitud del diputado don Héctor Barría, y por acuerdo de los comités parlamentarios, la Sala de la Corporación guardará un minuto de silencio por el sensible fallecimiento de don Pedro Núñez Gutiérrez, destacado servidor público, asistente social, vecino y concejal de la comuna de Puerto Octay, quien dejó una huella imborrable de compromiso y dedicación por el bienestar de sus habitantes y el desarrollo de dicho territorio. Solicito ponerse de pie a las señoras y los señores diputados, y también a quienes están presentes en las tribunas. Muchas gracias; se pueden sentar.
Entrando a la tabla de Fácil Despacho, corresponde tratar el proyecto de ley, iniciado en moción, que modifica el Decreto con Fuerza de Ley N° 1, de 2006, del Ministerio de Salud, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del Decreto Ley N° 2.763, de 1979, y de las Leyes N° 18.933 y N° 18.469, con el objeto de modificar la denominación del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota, correspondiente al Boletín 17.197-11. Para la discusión de este proyecto se otorgarán dos minutos a un máximo de cinco diputados o diputadas de distintas bancadas. Rinde el informe de la Comisión de Salud la diputada...
María Luisa Cordero. Lo va a hacer desde su pupitre. No hay ningún problema.
—Señor Presidente, gracias por permitirme hablar sentada.
—No, por favor, no hay ningún problema.
Antes de darle la palabra, saludamos al Colegio Charles Darwin de Villa Alemana, niveles kínder y primero básico, invitados por la diputada Carolina Marzán, que están junto a la señora María Angélica Flores. Les damos la bienvenida. ¿Dónde están? Ahí están los niños. ¿Cómo están? Un gusto saludarlos. Luego les pediremos que, si desean, pasen a mi oficina para que los conozcamos.
Saludamos también a la Escuela Ministro Centeno de Viña del Mar, de segundo a octavo básico, invitados por el diputado Luis Cuello, a cargo de doña Daniela Herrera. Bienvenidos a la Cámara de Diputadas y Diputados.
Diputada Cordero, tiene usted la palabra.
—Antes de leer, pido a las y los colegas guardar silencio; este no es un bar, es el Congreso Nacional. Silencio, por favor.
Honorable Cámara, en mi calidad de diputada informante de la Comisión de Salud, paso a informar respecto del proyecto de ley del epígrafe, sin urgencia, originado en moción de los senadores Juan Luis Castro, Francisco Chahuán, Sergio Gahona y Javier Macaya, en segundo trámite constitucional y primero reglamentario.
La idea matriz o fundamental del proyecto de ley consiste en sustituir la expresión “Viña del Mar-Quillota” por “Viña del Mar-Quillota y Petorca” en el decreto con fuerza de ley N° 1, de 2006, del Ministerio de Salud, con el objeto de que los habitantes de la provincia de Petorca estén plenamente representados.
El proyecto de ley se ingresó a tramitación en el Honorable Senado en el mes de octubre de 2024, remitiéndose a su respectiva Comisión de Salud, la que lo despachó en enero de 2025, siendo aprobado por la Sala de dicha corporación en junio del mismo año.
Los fundamentos de la moción señalan que el decreto con fuerza de ley N° 1, de 2006, del Ministerio de Salud, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto N° 2.763, de 1979, y de las leyes N° 18.933 y N° 18.469, establece en su artículo 16 los servicios de salud de cada región, y se agrega que en el numeral 6 del citado artículo 16 se contempla la existencia de tres servicios de salud para la Región de Valparaíso, a saber: Valparaíso-San Antonio, Viña del Mar-Quillota y Aconcagua.
Con anterioridad, de acuerdo con lo dispuesto en el decreto N° 2.763, de 1979, ya se contemplaba el Sistema Nacional de Servicios de Salud, el que incluía el de Viña del Mar-Quillota, lo que se mantuvo luego de la reforma del Ministerio de Salud del año 2005, dependiendo actualmente de la Subsecretaría de Redes Asistenciales.
Se indica también que la jurisdicción de este servicio cubre 18 comunas y mantiene bajo su gestión 11 hospitales, que son los siguientes: Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar; Hospital de Quilpué; Hospital San Martín de Quillota; Hospital Juana Ross de Edwards de Peñablanca; Hospital Santo Tomás de Limache; Hospital Geriátrico La Paz de la Tarde de Limache; Hospital Doctor Mario Sánchez de La Calera; Hospital San Agustín de La Ligua; Hospital Doctor Víctor Hugo Moll de Cabildo; Hospital de Petorca; y Hospital Adriana Cousiño de Quintero. A ellos debe agregarse la construcción de los nuevos hospitales de Marga Marga, que cubre la atención de esa provincia, y del biprovincial Quillota-Petorca, que atiende a la población de esas provincias.
...las provincias, cuyos usuarios de salud suman aproximadamente 270.000 y que ya se encuentra en funcionamiento. Por esta razón, y con el objeto de que queden plenamente representados los habitantes de la provincia de Petorca, los autores de la moción estiman que se debe incluir dicha provincia en la denominación del actual Servicio de Salud Viña del Mar–Quillota, agregando que las referencias que hagan las leyes, reglamentos, actos administrativos y contratos al Servicio de Salud Viña del Mar–Quillota deberán entenderse efectuadas también al Servicio de Salud Viña del Mar–Quillota–Petorca.
Para escuchar antecedentes del proyecto, se recibió al director subrogante del Servicio de Salud Viña del Mar–Quillota, Haroldo Faundes. Solicito silencio en la Sala, por favor. Quien remarcó la importancia de incluir en la denominación de este servicio a la provincia de Petorca.
Así, el contenido del proyecto consta de dos artículos permanentes: el primero cambia el nombre del servicio de salud, y el segundo establece que las referencias al nombre antiguo del servicio deben entenderse realizadas al Servicio de Salud Viña del Mar–Quillota–Petorca. Por último, el artículo transitorio del proyecto señala el plazo de entrada en vigencia de esta ley.
La iniciativa legal en informe no posee normas de quórum especial; no se formularon reservas de constitucionalidad en este trámite y tampoco fue conocida por la Comisión de Hacienda. Realizada la votación en comisión, el proyecto fue aprobado en general y en particular, en los mismos términos que lo hiciera el Honorable Senado, por la unanimidad de sus integrantes (6-0). Votaron a favor, entre otros, los diputados Andrés Celis, Tomás Lagomarsino, Hernán Palma, Agustín Romero y Patricio Rosas.
De esta manera, la Comisión de Salud recomienda a esta Honorable Sala aprobar este proyecto de ley en los mismos términos que lo hiciera el Honorable Senado en el primer trámite constitucional. Es cuanto puedo informar, conforme a lo acordado en la Comisión de Salud.
Muchas gracias, diputada María Luisa Cordero. Saludamos a la delegación del Colegio Villa Sentinela de San Fernando, presente en nuestras tribunas; se encuentra el curso de cuarto básico, invitados por el diputado Eduardo Cornejo, junto a Jacqueline Gómez. Los saludamos muy cordialmente. Esperamos que tengan una grata jornada en esta Cámara de Diputadas y Diputados.
A continuación, tiene la palabra el diputado Andrés Celis. Gracias, presidente. El proyecto en cuestión constituye una iniciativa simple, pero de gran importancia, fundamentalmente para reconocer a la provincia de Petorca como una de las zonas geográficas más gravitantes de la Región de Valparaíso, a partir de sus cualidades económicas y poblacionales. Así las cosas, el proyecto aprobado por la unanimidad de la Comisión de Salud responde al hecho de que el servicio de salud llamado hasta hoy Viña del Mar–Quillota es geográficamente uno de los servicios de salud más grandes a nivel nacional, agrupando varias provincias, a saber, Viña del Mar, Quillota y Petorca, siendo esta última la provincia más grande geográficamente. Por lo mismo, este cambio de nombre del servicio de salud no es solo un hecho semántico o de nomenclatura, sino que responde a la realidad social y demográfica de la zona norte de la Región de Valparaíso. Y por ello, es de toda justicia el cambio en la denominación y, por consiguiente, entregar a los habitantes de la provincia de Petorca la relevancia que amerita su posición e importancia a nivel regional. Todo lo anterior constituye elemento más que suficiente para aprobar este proyecto.
Espero, por cierto, que pronto constituya una ley de la República. He dicho, señor Presidente, muchas gracias.
Gracias, señor Secretario. Don Nelson Venegas, usted tiene la palabra.
Muchas gracias, señor Presidente. Mire, la provincia de Petorca debe ser una de las más empobrecidas, una de las más dejadas de lado por las políticas públicas en la región de Valparaíso. Lamentablemente, la propia gente señala constantemente que se siente en el patio trasero de la región. Tienen una escasez hídrica abrumadora. No hay agua. Tienen problemas de salud, tienen problemas de vialidad, tienen problemas de locomoción, tienen problemas de seguridad. Por lo tanto, el cambiar el nombre no es un hecho porque sí, sino que además da la importancia, porque visibiliza un territorio que, lamentablemente, siempre ha quedado de lado. Ahora bien, esta visibilización debe servir para otras cosas y finalidades más profundas, como por ejemplo mejorar el hospital de La Ligua, transformándolo y aumentando su complejidad. El estado de ese hospital está muy atrasado respecto de otros hospitales que existen en la zona. También debemos darle continuidad al proyecto del hospital comunitario de Cabildo. Debemos aumentar la red de APS también en esa provincia. Debemos mejorar las condiciones de los medicamentos y mejorar también las listas de espera. Que sirva este cambio de nombre para darle la importancia que merece este lugar que históricamente, lamentablemente, ha sido tan postergado. La salud es prioritaria y esperamos que con esta nominación nueva le demos la importancia a estas falencias que, lamentablemente, se han desarrollado por mucho tiempo. La salud es demasiado importante; el hospital de La Ligua, el hospital de Cabildo y las APS son fundamentales para dicha provincia. He dicho, señor Presidente.
Muchas gracias, diputado. Tiene la palabra el diputado don Jorge Brito.
Muchas gracias, Presidente. Como representante de comunas que dependen del Servicio de Salud Viña del Mar, Quillota y Petorca, es que aprobaremos este proyecto de ley. Y si bien es una adecuación de nombre, es importante para mí poder destacar algo que ocurre en el Servicio de Salud Viña del Mar, Quillota y Petorca y que lo distingue de otros servicios de salud como el de Valparaíso-San Antonio, estando tan solo a unos metros. Mientras en el Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota se construyen nuevos hospitales, como el Hospital de Marga Marga; se tienen hospitales del más alto estándar en la región, como el Biprovincial Quillota-Petorca; se sacan adelante proyectos como el SAR, el Servicio de Alta Resolutividad de Miraflores en Viña del Mar, que va a atender a 100.000 personas al año descongestionando el Hospital Gustavo Fricke de la misma comuna; a tan solo metros de Viña del Mar, el Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio tiene 21 licitaciones desiertas del año 2019 a la fecha. Tiene centros de salud familiar desde el año 2014 que no es capaz de adjudicar en obras. Tiene el CESFAM Manuel Bustos de San Antonio, que ya la comunidad considera que es el cuento de Pedrito y el Lobo: “ya viene, ya viene”, pero nunca llega. Es la capacidad de gestión y el liderazgo de quienes están a cargo de los servicios lo que marca la diferencia entre personas que se agrupan en una lista de espera, esperando una atención especializada en salud, o personas que ven cómo en su barrio se construyen siete nuevos dispositivos de salud, como está ocurriendo en estos momentos en la comuna de Viña del Mar, en gestiones entre el municipio de Viña del Mar y el Servicio de Salud. Quiero poner acá en relieve esto, porque gracias a esas capacidades de gestión es que estamos saliendo adelante, pero vemos con mucha frustración que el Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio sigue siendo de lo peor de la región, y nuestras vecinas y vecinos siguen sin capacidad de poder ser atendidos.
Gracias, diputado. El diputado Tomás Lagomarsino tiene la palabra.
Muchas gracias, Presidente. El Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota, que ahora buscamos modificar su nombre para incluir la provincia de Petorca, es uno de los servicios de salud más grandes de nuestro país, que abarca una cantidad de territorio considerable, no solamente parte...
...no solo en las provincias de Valparaíso, Marga Marga y Quillota, sino también en la provincia de Petorca. Y esta es una modificación legal que viene a hacer justicia en un servicio de salud que, durante este periodo legislativo y de gobierno, ha podido retomar proyectos de inversión de larga data que lamentablemente estaban ampliamente estancados. Es el caso del Servicio de Alta Resolutividad (SAR) Miraflores, que hoy día está licitado y en construcción, en avenida Alberto Hurtado con Eduardo Frei. Es el caso del CESFAM y SAR Nueva Aurora, cuyas instalaciones provisorias están en construcción, y esperamos que prontamente otras iniciativas de inversión altamente postergadas, como el CESFAM Chorrillos, el CESFAM Santa Julia y el CESFAM Las Torres, puedan retomar el trabajo y finalmente destrabarse.
Tenemos en Chile un problema que es la articulación de nuestro sistema de salud, tarea de los servicios de salud. Por ello, así como aprobaremos este proyecto de ley porque hace justicia a una provincia excluida, también necesitamos una discusión más profunda sobre cómo se articula nuestro sistema de salud en los territorios, en la red asistencial, y cómo destrabamos proyectos que por largo tiempo terminan estancados. Muchas gracias, Presidente.
—Muchas gracias, diputado. No hay más palabras. Se cierra el debate. Pasamos al Orden del Día.
Iniciando el Orden del Día, corresponde tratar las enmiendas del Senado al proyecto de ley, iniciado en mensaje, que exime el trámite y reduce los plazos para la habilitación y construcción de nuevos establecimientos penitenciarios, correspondiente al Boletín N° 17.312-07. Para la discusión de este proyecto se otorgarán tres minutos a cada diputada o diputado que se inscriba para hacer uso de la palabra.
Antes de eso, me ha pedido, por reglamento, la palabra la diputada Yovana Ahumada.
—Muchas gracias, Presidente. Quisiera hacer una solicitud respecto de la tabla, en el punto número 5. Está el proyecto llamado Ley Duque. Quisiera saber si se puede solicitar el acuerdo para que esta ley se vote sin discusión y así poder votarla el día de hoy, Presidente.
—¿Hay acuerdo para esto? No hay acuerdo.
—Muchas gracias. Le vamos a dar la palabra ahora a don Andrés Celis. Don Andrés, usted tiene la palabra.
—Señor Presidente, la crisis de seguridad que vive nuestro país se ha tornado, para el presente gobierno, en un desafío respecto del cual ha fracasado o al menos no ha respondido a los estándares que la ciudadanía espera. Los delitos de alta connotación social se han disparado, todo lo anterior ante un contexto ideológico que mira con absoluta indiferencia el fenómeno de la delincuencia en nuestro país.
Así las cosas, el proyecto que se somete a nuestra decisión, y que ya alcanza sus etapas definitivas, orienta felizmente a la seguridad nacional, la seguridad pública interior y, en definitiva, a la efectiva protección de la sociedad frente al delito, considerando además la situación de hacinamiento que actualmente se vive en los recintos penitenciarios, por lo que desde ya manifiesto mi voto favorable.
Nuestro país atraviesa una crisis de seguridad profunda, ya que, según datos de la Fiscalía Nacional, durante el tercer trimestre del año pasado se habían registrado un total de 2.664 homicidios, lo que refleja un aumento de 254 episodios en comparación con igual período del año 2023. A lo anterior se suma que la mayoría de las cárceles del país presenta sobrepoblación y varias de ellas ya se encuentran en situación de hacinamiento. Según las estadísticas generales publicadas por Gendarmería de Chile, el uso de la capacidad de las plazas alcanza un 140,5%, con una población total de más de 59.000 internos.
El problema claramente se traduce en la agobiante permisología, que hoy hace imposible construir rápidamente cárceles en Chile. Señor Presidente, entre 14 y 16 años se demora la construcción de nuevas cárceles en nuestro país. Es una situación inaceptable que no debemos seguir tolerando. La crisis carcelaria es un asunto de interés nacional; se puede vivir en cualquier parte de nuestro territorio, aquí, en la región de Valparaíso.
Hechos como la fuga de reos desde nuestras cárceles dan cuenta de la evidente condición paupérrima que vive nuestro país en la materia. En un año, señor Presidente, se han fugado seis reos de alta peligrosidad, lo que representa una cifra vergonzosa y pone en riesgo la credibilidad del sistema penitenciario chileno, con cárceles saturadas y tecnologías obsoletas. Sencillamente, no damos el ancho en la lucha contra la delincuencia y la inseguridad que atraviesa nuestra población. Esperamos que esta iniciativa sea el comienzo para establecer las prioridades en la agenda pública —lo sustantivo por sobre lo accesorio— y que, por fin, Chile asuma con seriedad la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado. Lo dicho, señor Presidente, muchas gracias.
Muchas gracias, diputado. Tiene la palabra el diputado don Daniel Lilayú.
Gracias, señor Presidente. Chile está viviendo una de las crisis de seguridad más graves de su historia. Según la Fiscalía Nacional, hasta septiembre de 2024 se registraron 2.664 homicidios. Esto significa un aumento del 10,5% en solo un año. Detrás de esta cifra hay familias destruidas, barrios inseguros y comunidades que viven con miedo. He recorrido mi región y he escuchado a la gente: el miedo se ha instalado en la vida cotidiana y, mientras el crimen se profesionaliza, el Estado sigue entrampado en su propia burocracia.
Solo la cárcel de Osorno tiene una sobrepoblación de más de 100 reclusos, lo que se traduce en pésimas condiciones para quienes hoy están privados de libertad; y ni hablar de lo que ocurre con los funcionarios de Gendarmería, cuya situación raya en lo inhumano. Sí, el Congreso ha hecho su parte, aprobando leyes más duras contra la delincuencia, pero la consecuencia inmediata es que hoy nuestro sistema penitenciario está colapsado. Según Gendarmería, la ocupación carcelaria llega al 140%, y en regiones como Atacama y el Maule el hacinamiento supera el 200%. Esto es inaceptable.
Más de 59.000 personas privadas de libertad viven en condiciones indignas, y eso no solo es un problema humanitario: es un riesgo directo para la seguridad nacional, porque las cárceles se están convirtiendo en centros desde donde opera el crimen organizado. Y, mientras tanto, construir una cárcel en Chile demora entre 14 y 16 años. Esa es la muestra más clara de cómo la permisología y la lentitud del Estado están venciendo la seguridad de los chilenos.
En 10 años, el índice de homicidios se duplicó; el plan Calles sin Violencia solo trasladó el delito, no lo redujo; y en 5 años los homicidios con autores desconocidos aumentaron de un 23% a un 41%. Eso muestra que el sicariato y el crimen organizado avanzan mientras el Estado reacciona tarde. Hoy el propio Gobierno, superado por los hechos, viene a pedirnos que eliminemos las trabas que ellos mismos defendieron por años. Y aunque este proyecto es un avance, sigue siendo un paso tímido. No basta con facilitar la construcción de cárceles: debemos liberar de una vez la inversión pública y privada en infraestructura crítica, en hospitales, viviendas, energía y caminos. Porque sin seguridad no hay desarrollo; sin autoridad no hay Estado; y sin decisiones firmes Chile seguirá perdiendo la batalla frente al crimen. Por eso, señor Presidente, ha llegado el momento de actuar con coraje, sin ideología y pensando solo en la seguridad de los chilenos. Anuncio mi voto a favor, señor Presidente. Muchas gracias.
Le agradezco, diputado. Tiene la palabra el diputado señor Gonzalo Winter.
Muchas gracias, señor Presidente. Creo que es sumamente importante que el Congreso Nacional y el Estado tomen medidas para enfrentar la grave crisis de hacinamiento carcelario, que redunda en un empeoramiento de las condiciones de seguridad en nuestro país. Sin embargo, hay dos temas que se deben relevar en este debate y que me parecen preocupantes, respecto de los cuales creo que todo el Congreso Nacional, o la política chilena en general, debiera tener un acuerdo.
Las condiciones de vida en la ciudad son tremendamente importantes para la felicidad de los chilenos, y la planificación urbana es fundamental para el bienestar del país. Se ha hablado de la construcción de una cárcel en la comuna de Santiago a raíz de este proyecto. El lugar propuesto se encuentra a 12 minutos del Hospital Barros Luco, a 11 del San Borja, a un minuto y medio del Parque O’Higgins, a dos cuadras de la Autopista Central y a tres minutos del Metro. Creo que deberíamos tener acuerdo en que los bienes urbanos —las plazas, los parques, las escuelas, los cines, las autopistas, el Metro— deben priorizarse para personas que pueden usarlos y no para los internos, que no pueden ni ir al parque, ni al cine, ni tomar el Metro.
Por lo tanto, creo que deberíamos adoptar el acuerdo que existe en todos los países desarrollados y que existía en Chile: que las cárceles deben ubicarse en la periferia de las ciudades. Es lo lógico, porque así se aprovechan mejor los bienes urbanos que nuestra ciudad y el Estado construyen al interior de ellas. De hecho, la ex Penitenciaría, donde hoy existe lo que lamentablemente se denomina el “barrio penitenciario”, se construyó ahí porque en esa época, en 1847, si no me equivoco, estaba en la periferia de la ciudad; solo que la ciudad creció.
Y hay dos elementos más que me preocupan, presidente. Primero, esta idea de que el Estado, a través del Ministerio de Obras Públicas, deba ejecutar las medidas de mitigación comprometidas con los vecinos y con la ciudad en función de si puede presupuestariamente hacerlo o no. Ojo: hoy tenemos contratos con concesionarias —por ejemplo, de autopistas— en los que hay medidas de mitigación establecidas por contrato; por lo tanto, son un derecho legal y jurídico de los vecinos, y no se pagan porque en los contratos quedó que dependen del Ministerio de Obras Públicas. El MOP dice: “Sí, te debo esto, pero no te voy a pagar porque no tengo plata”.
Lo segundo: me parece muy preocupante que se establezca que solo tengan interés directo e inmediato en el proyecto las personas que viven cerca o son colindantes. Creo que eso revierte algo que en la ley existía hace mucho tiempo de otra forma.
Muchas gracias, diputado. Tiene la palabra el diputado don Luis Sánchez. —Perfecto. Sí, por favor. Tiene la palabra don Andrés Joanet.
Gracias, presidente. Hemos ido redescubriendo un tema complejo: la construcción carcelaria. Hoy día hay varios consensos, entre ellos, que hay que construir cárceles. En su momento, cuando algunos se negaron a la concesión de cárceles, no entendieron que lo que se concesiona es la infraestructura y su mantención; naturalmente, Gendarmería no se puede concesionar.
Aquí han surgido varios temas, también cuando lo discutimos en la Comisión de Seguridad Ciudadana. Lo primero es señalar que en Chile nunca se construyó una cárcel de máxima y alta seguridad; las cárceles se adecuaron. Por eso, en algún minuto, hace un par de años, la gente del Tren de Aragua destrozó una cárcel como señal política al Estado chileno, diciéndole: “Nosotros queremos también mandar en la cárcel”. Pero eso no ocurrió. Y por eso se les puso grilletes, y bien puestos, porque no podían hacer lo que querían.
Lo segundo: es necesario construir cárceles de máxima y alta seguridad. ¿Cuántas faltan? Al menos cinco en Chile: tres de máxima y alta seguridad y dos de mediana complejidad.
Lo tercero: hay que tener cuidado con la demagogia. En estos días de campaña, no todos los presos pueden trabajar. Trabajar en la cárcel es un privilegio y hay que ganárselo. Y, además, los presos de máxima y alta seguridad simplemente no pueden trabajar; así de claro. Deben estar absolutamente segregados, aislados del resto de la población penal, y no deben tener contacto, incluso, con los gendarmes.
Cuarto: hemos aprendido que tenemos que crear una nueva Gendarmería, y eso se está desarrollando. Aquí hemos discutido y votado el proyecto de ley para crear una nueva Gendarmería, que contempla un gendarme al que solo se le reconozca por las gafas —que no puedan identificarlo— y, además, un gendarme que no esté sindicalizado. Y ahí tenemos que dar una nueva discusión, seguramente en el próximo Parlamento: cuál es el tipo de gendarme que queremos. Hoy día hay más de diez grupos de sindicalización en Gendarmería; el gendarme no es militarizado, y esa es una discusión que debemos dar. Así como en su momento se pretendió, erróneamente, que Carabineros fueran sindicalizados y no militarizados —y qué bueno que esa idea no prosperó—, lo mismo tenemos que discutir respecto de Gendarmería.
¿Que nos faltan gendarmes? Sí, al menos nos falta un 20% más de dotación. Pero el nuevo gendarme tenemos que formarlo en la lógica de un gendarme que sea, más bien, militarizado.
Por tanto, este proyecto va en esa línea. Creo que todos hemos ido aprendiendo que la cárcel es fundamental; debe ser segregada, y tenemos que construir cárceles de máxima y alta seguridad para terminar también con el crimen organizado.
Muchas gracias, presidente. —Muchas gracias, diputado. Tiene la palabra…
La diputada Marcela Riquelme; a continuación, don Andrés Longton; se prepara también doña Marta Bravo.
Muchas gracias, presidente. La realidad de nuestro país es que existe una sobrepoblación promedio de 140%, llegando en algunas cárceles a 200%. Eso hace imprescindible y necesario este proyecto, que sin duda voy a aprobar. Pero aquí hay tres cosas, subsecretario, le pido su atención un momento, por favor. Por su intermedio, presidente.
Señor ministro, por favor, le están pidiendo que tome atención a la exposición de la diputada. Gracias.
Muchas gracias, presidente. Un tema muy importante, ministro, que por su intermedio le pido que considere, es el de las concesionarias. Cuando fuimos a ver en la cárcel de Rancagua el tema de los bloqueadores de señal —que hemos pagado durante 10 años y no están en funcionamiento—, constatamos que el contrato de las concesionarias lo tiene el Ministerio de Obras Públicas, no Gendarmería ni el Ministerio de Justicia. ¿Cómo es posible eso? ¿Cómo es posible que las condiciones de estas concesiones las regule una unidad que no tiene relación con la vida carcelaria, con Gendarmería ni con Justicia? Me parece que eso no corresponde. Creo que debe ser modificado dentro de las concesiones, y que sean efectivas las condiciones que imponemos a las empresas contratistas.
En segundo lugar, no estoy de acuerdo con el criterio de la periferia que establece, por su intermedio, presidente, el diputado Winter. No voy a suscribir un acuerdo de esas características. Cada región debiera tener un recinto penitenciario, y no nos vengan de la Región Metropolitana a trasladarnos los presos a las otras regiones. No estoy de acuerdo con que, porque la Región Metropolitana tiene el metro, porque tiene esto o lo otro, haya que protegerla. No, señor. Aquí el regionalismo tiene que ser justo. Nosotros tenemos 12 presos del Tren de Aragua en la Región de O’Higgins, que no son de nuestra región ni han cometido delitos en ella, y estamos cargando con todas las consecuencias de aquello. Eso no es justo para nuestras regiones.
En tercer lugar, también relativo a las concesiones, ministro, por su intermedio: por Google Maps yo puedo ver la cárcel de Rancagua en cada uno de sus patios, y eso permite que, cuando con drones o los “peloteros” lanzan droga, sea muy fácil identificar el lugar. Usted va a ver un módulo mucho más privilegiado y bonito, un patio precioso: ese es del Tren de Aragua. El mejor módulo, y lo va a ver por Google Maps. Eso no puede ser. Se pueden bloquear las señales de celular, se pueden bloquear las de Google Maps, y le pido que eso sea incluido dentro de las concesiones futuras. Muchas gracias, presidente.
Muchas gracias a usted, diputada. Tiene la palabra don Andrés Longton.
Muchas gracias, presidente. Me parece que el proyecto quedó bien en relación con lo que habíamos aprobado en la Cámara de Diputados y con las incorporaciones del Senado. Lo decía en la Sala, por su intermedio: en Chile se demoran 15 años en construir una cárcel. Esto va a acortar ostensiblemente los plazos, particularmente en lo relativo a la reducción a la mitad de los permisos administrativos; la exención de permisos ambientales cuando se trate de reparación, mantención o alteración de cárceles ya existentes; y, por último, la aplicación del silencio administrativo. El Ministerio de Desarrollo Social tendrá 30 días para determinar la rentabilidad social y, si no resuelve, opera el silencio positivo, igual que en los recursos administrativos. Eso es fundamental para que los proyectos salgan adelante.
En la Región de Valparaíso tenemos un 175% de hacinamiento en las cárceles. ¿Qué significa eso? Que hoy las cárceles son el lugar idóneo para el crimen organizado, porque terminan conviviendo delincuentes peligrosos con primerizos, y estos últimos se convierten en soldados de aquellos, transformando los recintos en oficinas del crimen organizado. La cárcel de San Antonio, la de Petorca, la de Valparaíso y la de Limache —que tiene un 200% de hacinamiento y que fue una caballeriza— son ejemplos claros. Así, no solo no se aplica un castigo como corresponde, sino que además el proceso de rehabilitación y reinserción es nulo; terminan saliendo más peligrosos de lo que entraron. Por eso, la construcción de cárceles debe acelerarse en nuestro país. ¿Cómo puede ser que se demore tanto?
Recordemos que el proyecto, cuando ingresó a la Cámara de Diputados, venía con un listado acotado de proyectos de recintos penitenciarios para poder acelerar su construcción.