Consejero, para optimizar el tiempo y dando la bienvenida a nuestra ministra, veremos primero el punto número 6; lo vamos a adelantar. Luego, tenemos un tema con el Museo Arqueológico y la persona de la comuna de San Pedro necesita retirarse, por lo tanto veremos el punto 10 B. Después, como está el MOP presente, abordaremos los puntos relativos al MOP: la urgencia y el punto 7. ¿Les parece? Bien.
Siendo las 9:11 horas, damos inicio a la septingentésima octogésima séptima sesión ordinaria del Consejo Regional. Tenemos catorce puntos en tabla y comenzaremos con un tema muy relevante para la capital mundial de la minería, que tiene que ver precisamente con la pequeña minería. Trataremos el punto de exposición y votación para sancionar el convenio de programación del Gobierno Regional de Antofagasta con ENAMI. Exponen la División de Fomento e Industria, el Ministerio de Minería y la Empresa Nacional de Minería. Damos la bienvenida al vicepresidente ejecutivo de ENAMI, don Iván Mlynarz, y a la ministra de Minería, señora Aurora Williams. Informa la Comisión de Sustentabilidad y Relaciones Internacionales. Adelante, presidente.
Bienvenida, ministra. Tiene la palabra para un saludo.
Gracias, presidente. Presidente, buenos días. Por su intermedio, saludamos a los consejeros y consejeras y a los profesionales de apoyo. Traemos a consideración un convenio de programación que aborda temas estructurales de la pequeña minería. Cuando se habla de minería, normalmente en el imaginario social se piensa en un camión CAEX muy gigante. Pero la minería es diversa: existe la gran minería, la mediana y la pequeña minería.
Presidente, en esta región, que es la capital minera, están los dos distritos mineros más importantes del mundo y también está presente la pequeña minería. Tanto es así que la comuna de Taltal es la que tiene la mayor cantidad de pertenencias de pequeña minería en Chile. Aun cuando el mayor número de pequeños mineros está en Atacama, esta región tiene el sello de la pequeña minería, así como también lo tiene la comuna de Tocopilla.
El convenio de programación que traemos para su consideración contempla, por parte de ENAMI, un aporte significativo. Esto forma parte del proceso de fortalecimiento de la Empresa Nacional de Minería. Hoy estamos en condiciones de hacer esta propuesta que hace unos meses o un año atrás quizás no habríamos podido realizar, gracias a una empresa que se ha consolidado financieramente y que nos permite abordar temas estructurales que en nuestra región no hemos podido resolver por muchos años. El convenio también reconoce los distintos niveles de desarrollo de la pequeña minería.
En la provincia de El Loa tenemos una pequeña minería mucho más incipiente, que contó hace muchos años con un poder comprador que dejó de funcionar. Por lo tanto, hoy no tenemos una solución como región para los pequeños mineros de dicha provincia.
Abordamos también la situación de la provincia de Tocopilla, regularizando la operación de una planta que ha tenido ciertas irregularidades y que han impedido el desarrollo de la pequeña minería, manteniendo a muchos mineros en una lógica de sobrevivencia más que de crecimiento. Desde ese punto de vista, traemos una propuesta tanto para Tocopilla como para la provincia de Antofagasta, en particular para Taltal, que constituye el proyecto más robusto de este convenio de programación.
Buscamos resolver el traslado de la planta de Taltal con un programa financiero y con proyectos que se encuentran aprobados en las instancias correspondientes, además de contar con resoluciones de calificación ambiental tanto para el lugar de destino de la planta como para la extensión de vida útil en el sitio de origen. Queremos señalar que los pequeños mineros son sumamente relevantes en un sector de nuestra economía que, si bien no aporta decisivamente a la producción, sí contribuye al desarrollo territorial y al tejido social de aquellas localidades donde existe pequeña minería.
Presidente, por su intermedio a los consejeros y consejeras, me acompañan don Iván Mlynarz, vicepresidente de la Empresa Nacional de Minería; don Custodio Araya, subgerente de Planificación y Desarrollo Minero de ENAMI; y doña Silvia Soto, jefa de la División de Fomento del Ministerio de Minería. Saludamos también al alcalde de Taltal, porque, como ustedes saben, esa comuna pervive a través de la pequeña minería, y don Mario nos ha planteado reiteradamente la necesidad de fortalecer la planta de ENAMI; eso fue lo que conversamos con la ministra y donde se negoció este convenio.
Gracias, presidente. En primer lugar, de manera breve, quiero relevar que la ministra Aurora Williams haya estado presente en la Comisión de Sustentabilidad y Relaciones Internacionales; ello da cuenta del compromiso que tiene con la región, con la minería y especialmente con los pequeños mineros. Nos sentimos muy complacidos de su visita junto con los profesionales que la acompañaron; nuestro reconocimiento, ministra, por la grata sorpresa de visitar la Comisión de Sustentabilidad. Ojalá esto se reitere con otros ministros de carteras que inciden en el desarrollo regional. Don Iván, bienvenido también. Tuvimos la oportunidad de conversar por teléfono en alguna ocasión. Soy Patricio Tapia, de Tocopilla.
Dicho eso, la Comisión de Sustentabilidad y Relaciones Internacionales conoció la propuesta del convenio de programación entre el Gobierno Regional de Antofagasta y la Empresa Nacional de Minería, ENAMI, presentada por la ministra de Minería, doña Aurora Williams, junto a la jefa de la División de Fomento del Ministerio de Minería, el subgerente de Planificación de ENAMI y la jefa de la División de Fomento de Industria del Gobierno Regional, doña Mercedes Álvarez. Durante la exposición se informó que el convenio...
Se informa que su ejecución será entre los años 2026 y 2030, con un costo total de 59.444.000 pesos, financiado por el Gobierno Regional y ENAMI, y que se compone de tres iniciativas principales orientadas a fortalecer la pequeña minería regional. Se encuentra presente la ministra de Minería, junto a los equipos técnicos del ministerio y de ENAMI, quienes realizarán una presentación detallada del contenido y los alcances de este convenio.
Buenos días a todas y todos. Mi nombre es Custodio Araya, soy gerente de Planificación de la Gerencia de Fomento y Minería de ENAMI. Hoy vamos a exponer tres proyectos que abordan realidades distintas, como señaló la ministra, respecto de la situación de negocio de la pequeña minería. Antes de ello, daremos cuenta de los chancadores que se aprobaron hace un tiempo y que hoy están listos para ser embarcados. En la lámina se aprecia la fotografía del chancador primario y del chancador secundario. La idea es contar con estos equipos en nuestras manos en el mes de diciembre, para continuar con la etapa de los proyectos planteados en ese entonces.
Ayer se abordó que estamos cumpliendo un hito distinto: a través de la glosa presupuestaria no podíamos presentar proyectos a los gobiernos regionales como Empresa Nacional de Minería. Eso se revirtió y hoy estamos culminando un primer proyecto y presentando estos otros tres, cuyo objetivo es hacer más grande a la pequeña minería, algo muy relevante no solo para esta región, sino para todas donde se desarrolla.
El convenio de programación entre el Gobierno Regional de Antofagasta y ENAMI aborda tres proyectos. Los presentamos en función de la realidad de cada zona. Para el sector de Calama proponemos realizar un estudio para determinar el potencial geológico del distrito y, en función de ese potencial, tomar decisiones respecto de qué proyectos o inversiones debemos realizar a futuro en la minería de la zona. No se trata de la minería particular de un productor, sino de un enfoque territorial, procurando que esto crezca paso a paso. Este proyecto tiene un valor de 192 millones de pesos, aproximadamente 200 mil dólares, con un plazo de ejecución de 12 meses.
¿De dónde surge esto? Presentamos un esquema de la operatividad del negocio de la pequeña minería. En el lado derecho se aprecia el fomento directo que realizamos a través de ENAMI y del Ministerio con los pequeños productores mineros. Lo fundamental es determinar el recurso geológico: si no sabemos qué tenemos bajo nuestros pies, en cuanto a calidad, cantidad y disposición, no podremos definir un proyecto y afirmar que será exitoso y rentable para la pequeña minería. Por ello, es esencial conocer el recurso geológico.
En el lado izquierdo, referido al acceso al mercado, ENAMI, mediante sus poderes de compra y planteles de procesamiento, acerca el mercado al productor. Quienes venden 50 o 100 toneladas al mes no comercializan su producto directamente en los mercados internacionales del cobre. ENAMI cumple el rol de acercar ese mercado al productor, traspasando eficiencias a través de una planta estándar, de modo que el productor observe un precio del cobre sin utilidad para ENAMI. No es un negocio de utilidad, sino un traspaso de eficiencia. Esta eficiencia, junto con el conocimiento del recurso geológico, permite determinar reservas, que son, en el fondo, lo que los mineros extraen para vender, ya sea a un plantel de ENAMI o a un plantel de terceros.
Ahí está todo el diseño dentro del negocio minero de cómo se aborda la sustentabilidad mediante la mejora de las condiciones de seguridad, ambientales y laborales, y de cómo se determinan con precisión los ingresos y los costos para asegurar que este sea un negocio rentable. Por eso es sumamente importante conocer con claridad los recursos, y por ello se planteó este estudio para potenciar esta zona que, si bien algunos podrían calificar como de minería incipiente, no lo es: la minería aquí es muy fuerte y ya se ha dicho que esta es la capital mundial de la minería. No obstante, nos referimos a los pequeños productores mineros.
Lo primero que queremos hacer es un análisis estadístico. Como empresa contamos con información suficiente para determinar las faenas que han vendido en algún momento y las que están vendiendo hoy. Además, haremos un análisis de la propiedad minera para suscribir convenios, sea de arriendo u otros tipos de contratos que permitan a los pequeños productores operar, considerando que ya existe cercanía con medianos y grandes, con la intención de aportar a la pequeña minería. Revisaremos los antecedentes técnicos disponibles: contamos con estudios y el Sernageomin también posee estudios respecto de la zona de Calama. Con esa base, se realizará una planificación de terreno para determinar zonas potenciales e inventariar recursos. En función de ese potencial, definiremos las líneas de negocio en la comuna y la manera de trabajar con los pequeños productores. En resumen, eso es lo que buscamos en el sector de Calama con este estudio de potencial, por 192 millones de pesos.
Tenemos un segundo proyecto en la comuna de Tocopilla. Allí existe una planta, la Planta ARSEN, que hoy tiene sus permisos actualizados, con la excepción del permiso del depósito de ripios, que está vencido y debe actualizarse. Es una planta que opera con una producción que no le ha permitido escalar como negocio; está muy ajustada y cualquier variación del mercado en costos o precios de metales la deja al borde del equilibrio. La idea es asegurar la continuidad de esta planta modular, normalizando de manera permanente la producción en 5.000 toneladas mensuales y, posteriormente, hacerla crecer para tratar 13.000 toneladas mensuales, de modo que sea sustentable en el tiempo y disponga de capacidad productiva para procesar los minerales que entregan los pequeños productores de Tocopilla.
Este proyecto asciende a 4.200 millones de pesos, donde el GORE aportaría un 77% (3.300 millones) y el aporte de ENAMI sería de 900 millones, aproximadamente un millón de dólares. El plazo estimado es de cuatro años: en una primera etapa se estabilizará la operación en 5.000 toneladas mensuales y luego se aumentará. Cuando señalamos que a 5.000 toneladas se obtienen 130 toneladas de cátodos, y que al aumentar a 13.000 se proyectan 260 toneladas de cátodos, alguien podría decir que no corresponde al doble. Sin embargo, al ganar eficiencia es posible tratar minerales de menor ley; por lo tanto, se estima que, con plantas más eficientes, los productores podrían llegar con menor ley manteniendo rentabilidad. Por ejemplo, un productor que hoy no es rentable con una ley de 1,7% podría serlo con una ley de 1,5%. Ese es el enfoque de negocio para la comuna de Tocopilla, promoviendo el crecimiento del sector en su conjunto.
La planta actualmente es modular, y, como se indicó, la idea es llevarla a 13.000 toneladas en un periodo de cuatro años. Posteriormente, ya contamos con un sector donde la pequeña minería y su procesamiento están más maduros: me refiero a la Planta El Salado; perdón, a la Planta Taltal.
La idea es reubicar la planta y sus operaciones al sector de La Brea, ubicado a aproximadamente 15 kilómetros de la ubicación actual. Este proyecto contempla su ejecución en dos etapas a desarrollarse en cinco años: primero, el traslado del poder de compra y, en forma paralela, la compatibilización con el traslado de la operación de la planta, de modo de disponer ambos en una configuración distinta a la existente hoy.
El permiso vigente de la planta cubre, si no me equivoco, 4 años y 8 meses adicionales, tras lo cual caduca sin posibilidad de prórroga. Por lo tanto, debemos enfocarnos ahora en mover este modelo de negocio y el plantel productivo para asegurar la continuidad de la pequeña minería en Taltal. Según se ha señalado, el aporte de la pequeña minería al PIB comunal bordea el 63–64%, e incluso algo más, por lo que su relevancia para nuestro territorio es incuestionable.
En el poder de compra proyectado para La Brea, la primera etapa considera una capacidad de 22 mil toneladas, y posteriormente 36 mil toneladas, con una vida útil de 20 años y un CAPEX estimado de 6,3 millones de dólares. El flujo del proceso va desde la línea de chancado a la torre de traspaso y, luego, a los conos de acumulación del mineral.
En cuanto al proyecto de planta, la capacidad total será de 36 mil toneladas, de las cuales 22 mil corresponden a mineral fresco entregado por los productores y 14 mil a ripios antiguos del proceso de la planta Taltal, actualmente ubicados en el sector operativo vigente. A medida que esos ripios se procesen, serán retirados del lugar, abordando así un pasivo ambiental existente. La vida útil del conjunto se estima en 20 años, con un BAN calculado de 13 millones de dólares. La planta de óxidos continuará operando con el mismo proceso actual, incorporando mejoras operacionales y un estándar más sustentable en relación con las comunidades y el medio ambiente.
El proyecto integral —poder de compra y planta de óxidos futura— considera un CAPEX del orden de 50 millones de dólares y un BAN de 13 millones de dólares. Esta lámina muestra el diagrama del proyecto y, en paralelo, una imagen del plantel productivo actual. Como señaló ayer el superintendente de plantas, Claudio, quizá faltó hacer un mayor acercamiento para dimensionar lo cerca que estamos del océano; efectivamente, estamos al lado del mar. En la parte superior ya se aprecian los trabajos primarios en La Brea —movimiento de tierra, construcción de caminos y otras obras—, en un sector alejado de la localización actual, a 15 kilómetros.
En cuanto a la programación financiera, se trata de un proyecto a cinco años con un costo total de 59.444 millones de pesos, con un aporte de ENAMI de 50,16% y un aporte solicitado al Gobierno Regional de 49,84%.
Consejeras, consejeros, abrimos la palabra si alguien quiere opinar. Alcalde, no sé si quiere intervenir... Con micrófono.
Buenos días, autoridades regionales, ministra. La verdad es que, como representante de la comuna de Taltal, se está cumpliendo un gran anhelo de muchos años. Esto se viene conversando desde hace aproximadamente 12 años, viendo la necesidad de cómo compatibilizar la pequeña minería, que es el alma máter de la economía social de Taltal. Es decir, si la pequeña minería desaparece, Taltal, aunque sea un territorio con muchas bondades turísticas, no tendría el efecto que tiene la pequeña minería. Por lo tanto, agradecido del CORE, del gobernador y de la ministra por haber podido llegar a este acuerdo a través de este convenio de programación.
Ahora, tenemos hasta el año 2029 la extensión del plazo para que funcione lo que nosotros conocemos en Taltal como el tranque, que está a 120 metros del borde costero en esa zona. ¿Qué quiero decir con esto? Que sería interesante poder iniciar lo más pronto posible la ejecución de trabajos en el sector Breas Canchas. Porque, después de este período de tres años que estimo puede demorar la construcción de esta planta, viene todo lo que significa el cierre de faena donde está actualmente ENAMI, en la ciudad y en el tranque. Y eso va a ser, calculo yo, unos cuatro o cinco años más, porque el volumen depositado de estéril en el tranque es muchísimo. Se alcanzó una altura aproximada, creemos, de 20 metros sobre el piso, y en una extensión que calculamos debe ser de dos kilómetros de largo. Entonces, es una larga tarea, pero este es un inicio para darle solución. Reitero mi agradecimiento al gobernador, al Consejo Regional y a la ministra, con la esperanza de que los trabajos puedan iniciarse lo más pronto posible. Gracias.
Bien, ¿hay más palabras? Don Víctor.
Sí, yo quería plantear lo mismo que ha señalado don Mario, porque hemos visitado junto a la Comisión de Salud y Medio Ambiente, en varias oportunidades, los sitios a los que se refiere. Es una preocupación constante de la comunidad de Taltal; no solamente eso, sino también otros relaves que están presentes en la comuna, y creo que nos ha faltado respuesta. Entonces, claro, estamos viendo otro tipo de proyectos, pero, como tenemos pocas oportunidades de hablar con las autoridades de ENAMI, por lo menos yo, desde la Comisión de Salud, dejo planteada esa preocupación y la contaminación permanente asociada a las plantas de ENAMI. Hay algo que se ve a la vista: la contaminación en el camino, el rebalse de algunos líquidos por ahí. Y creo que se necesita una respuesta rápida por parte de ENAMI. Eso, presidente, gracias.
Andrea y después don Emilio.
Muy buenos días. Saludar a la ministra, al alcalde, al director de ENAMI, al gobernador, colegas, funcionarias y funcionarios. Solo quería decir que, de todas las veces que uno ha ido a Taltal en estos años, este sí ha sido un tema; es un tema muy sentido por la comunidad. A veces uno aprueba cosas que impactan solo a un sector de la comuna y no a toda la comunidad; esto sí.
Es una demanda muy sentida; siempre la escuché en todas las campañas que he hecho en Taltal. A la gente le importaba y, al mismo tiempo, había un temor asociado: se quería el traslado, hablo de Taltal, pero no de cualquier forma, sino de una manera que garantizara todo lo que aquí se ha señalado. Me siento segura de que este ha sido un trabajo bien evaluado, bien realizado, considerando las aristas técnicas, laborales y medioambientales. Lo único que deseo, porque es el gran problema que tiene Chile hoy, es que avancemos con urgencia en la modernización del Estado: existe una brecha enorme entre la aprobación y la voluntad de las autoridades —como se ha expresado aquí por parte del gobernador y, seguramente, del consejo— y lo que viene después, un camino muy largo, a veces incomprensible, que termina por impedir los triunfos y las demandas de la ciudadanía y de sus representantes. Recién le preguntaba al presidente de la comisión y me señala que son como 60 meses, cinco años según mis cálculos, para concretar esto. Creo que, además de este importante paso, el gran desafío es cumplir efectivamente ese plazo. Les deseo mucho éxito y gracias por el trabajo.
Emilio: Buenos días a todos, especialmente a la ministra que nos acompaña. Muchas gracias. Quería hacer una consulta y luego decir unas palabras. ¿El VAN calculado, financiero o económico? ¿Es 13, cierto? Lo vi pasar rápido. La verdad es que este proyecto me interesa y me gusta bastante que nos preocupemos del pequeño minero. No nos olvidemos de apoyar también a los pirquineros, porque en épocas pasadas cometimos un error grande con ellos. Me acuerdo del ramal de Collahuasi, donde trabajaban los pirquineros haciendo hoyitos, trabajando el oro, y después llegaron las mineras grandes y les quitaron todo el sector. El gobernador me mira con una cara extraña, pero yo conozco ese tema porque trabajé en el ferrocarril; nosotros transportábamos a los pequeños mineros. Y ahí les jugamos una muy mala pasada a los pirquineros, que para mí son los verdaderos mineros. Así que me alegra este proyecto; me alegro por el alcalde de Taltal, porque es una comuna que vive de la minería. Hagamos más proyectos como este y ayudemos a los pirquineros. Gracias.
Bien, ¿hay más palabras? Consejera Berna: Bueno, saludar a todos, en especial a la ministra por estar acá presente, también al alcalde de Taltal y a todos los asistentes. Felicito al alcalde, a quien conocí también en calidad de consejero regional, donde él siempre habló de cómo limpiar el territorio para instalar viviendas en su comuna de Taltal. Fui con el presidente de Salúa a Taltal y, efectivamente, como él ha dicho, hay que hacer algo: es muy grande. Cuando uno se propone metas, y si hoy día esto se aprueba, podrán ser 60 o 70 meses, pero creo que se va a concretar. Y con usted, alcalde, y le agradezco, ministra, que esté acá, porque, en materia de desarrollo, es cierto: somos una región minera. Usted me conoce; siempre he sido cauta con la minería: debe desarrollarse ordenadamente. En estos últimos tiempos uno ve que la minería ya no es arrasadora como en los que conocimos antes; por eso antes se le temía, pero hoy día hay que conversar. Y qué bueno que tengamos una ministra de la región de Antofagasta, que conoce el problema. Creo que es un gran paso el que da Taltal y, junto con Taltal, también Tocopilla y Calama. Usted ya lo ha dicho: no es lo mismo que Taltal, pero hay gente que hoy se siente huérfana en este aspecto. Es un gran paso.
Primero, agradecer que me hayan invitado a participar en esta instancia. Es cierto: sin ENAMI, Taltal no vive, no tiene futuro. Pero quisiera solicitar, si es posible, que se nos entregue la Carta Gantt del proyecto y el detalle de cómo se establecerá su ejecución, a fin de poder monitorear sus etapas. Tómenlo a bien: tal como señalaba la consejera Merino, el Gobierno Regional suele dar el puntapié inicial y aportar recursos de forma inmediata, pero los procesos de ejecución de obras son muy lentos. Lo pido porque, en reuniones previas —incluso antes de ser alcalde, en instancias de participación ciudadana— se nos indicó que el proyecto estaba listo y que solo faltaban los recursos para iniciar su ejecución. Por ello, quisiera contar con el proyecto y la Carta Gantt con el cronograma de avance. Muchas gracias.
Bien, le damos la última palabra a la consejera Orellana y después la ministra responderá a los consejeros.
Muy buenos días a todos los presentes. Quisiera recordar que ENAMI este año cumplió 65 años, y eso es muy relevante para Chile: contar con una empresa estatal que cumple y logra objetivos concretos. Con la pequeña minería, además, se realiza una labor social muchas veces invisibilizada. Los mineros aportan saberes de décadas, y es necesario que ese sector también se modernice; el desarrollo debe ser equitativo para todos.
En lo social, que lo conversábamos ayer con la ministra, agradezco lo señalado por el consejero Tapia respecto de su presencia, que nos permitió formular consultas que observamos desde el territorio. Desde el medio ambiente, preguntamos por la remediación de pasivos de la empresa, y existe un compromiso, lo que nos deja más tranquilas. En cuanto a los tiempos, sabemos de las dificultades burocráticas del aparato estatal. Sin embargo, como Consejo Regional hemos ido aprendiendo que el seguimiento es clave: este convenio contempla una comisión de seguimiento, y desde la Comisión de Sustentabilidad tendremos un integrante presente en ella. Eso ayudará a impulsar y a mantener la mirada sobre la ejecución, para ir informando a este pleno. Además, los proyectos irán ingresando y los evaluaremos en detalle. Muchas gracias. Estoy muy contenta de que podamos ver este proyecto o convenio que busca dar solución a una demanda histórica que lleva tantos años en Taltal.
Gracias, consejera. Ministra.
Muchas gracias, consejeros y consejeras. Quisiera señalar, como lo indicó la consejera Paula, que el modelo de pequeña minería es muy virtuoso; en realidad, es un modelo único en el mundo. Creo que a veces nuestra cotidianidad no nos permite mirar lo excepcional. Si miramos...
Hoy día, ante los problemas que pudiéramos ver en nuestro país, este modelo de pequeña minería permite que tengamos identificados a todos nuestros pequeños mineros. Nuestros pequeños mineros pagan sus contribuciones, pagan sus impuestos, contratan a sus trabajadores y trabajadoras, y se rigen por reglamentos de seguridad. Es un sector con una institucionalidad que funciona y, desde ese punto de vista, hace un aporte muy significativo. Hablamos de tejido social, pero la verdad es que esto funciona en la medida en que sus operaciones sean rentables.
Existen distintos ámbitos de colaboración desde el Estado, pero el pilar más importante es la Empresa Nacional de Minería. Desde nuestro Gobierno, entendiendo la importancia de la pequeña minería, generamos una política de fomento en la cual ustedes, este Gobierno Regional, han sido un pilar de desarrollo. Fue con este Gobierno Regional que, por primera vez, aplicamos la glosa presupuestaria y pudimos comprar chancadores. Nos demoramos porque no existía el procedimiento; mientras eso ocurría, cambió la ley, pasaron varias cosas y fuimos, digámoslo, el experimento. Quiero destacar que lo que se hizo con el Gobierno Regional de Antofagasta, con sus consejeros y consejeras, hoy día lo estamos replicando en Atacama. Ustedes acaban de aprobar, hace pocas semanas, un programa de asistencia a los pequeños mineros, donde vamos directo al pequeño minero a colaborar en ámbitos legales, productivos, etc.
Por otro lado, la Empresa Nacional de Minería está recibiendo, históricamente, una capitalización. El año pasado ENAMI se capitalizó en 25 millones de dólares. Tras 64 años de existencia —y cumpliéndose este año 65—, por primera vez el Estado de Chile capitaliza a ENAMI. Y queremos señalar que, en la propuesta presupuestaria para el año 2026, viene una nueva capitalización por 25 millones de dólares adicionales.
Cuando cerramos la fundición Hernán Videla Lira —decisión muy difícil—, en la fundición perdíamos 140 millones de pesos diarios. Por lo tanto, su cierre fue una decisión para darle viabilidad a ENAMI en su conjunto. Estamos ad portas de concluir la evaluación ambiental y dejar instalada una nueva fundición en Chile. Creo que no se dimensiona el tamaño de esto: en el mundo occidental, solamente hay dos países construyendo fundiciones, India y nosotros, mientras la capacidad de fundición se concentra en China, uno de los grandes desafíos geopolíticos. Y esto lo hacemos a través de la Empresa Nacional de Minería. El primer contrato especial de operación de litio se lo otorgamos a la Empresa Nacional de Minería. El fortalecimiento de ENAMI es fundamental para poder asumir estos desafíos.
Ustedes, con el trabajo que están realizando —haber aprobado la compra de chancadores, sortear todas las dificultades para aprobar un programa de asistencia a pequeños mineros—, y si hoy día contamos con la voluntad de cada uno de ustedes para resolver problemas estructurales, realmente estamos aportando a un modelo que podemos proyectar en el tiempo. Lo señalamos de esta manera: la minería no le pertenece a un gobierno; la minería le pertenece a Chile. Por eso debemos hablar de proyectos de esta envergadura. Los proyectos mineros no son de uno, tres o cuatro años; son proyectos de desarrollo, de largo aliento.
Quisiéramos, presidente, por su intermedio, distribuir a los consejeros y consejeras la política de fomento, que busca que los pequeños mineros no solo sobrevivan, sino que se desarrollen y crezcan; que quienes hoy son pequeños —los pirquineros— puedan pasar a volúmenes mayores de producción. Para ello establecimos una política de fomento conversada con los pequeños mineros, que dejaremos a disposición de ustedes, consejeros, consejeras, presidente.
Y respecto de la ejecución, si usted me lo permite, presidente, cedería la palabra a don Iván Milinas, que vino especialmente. Estamos hablando de El Salado porque la noche anterior tuvimos una jornada larga y extensa en El Salado; por eso no alcanzó a llegar ayer para estar con la comisión, y hoy día Iván está con nosotros. Quiero señalar que, esté Iván o esté yo como ministra, lo que queremos es defender un proyecto en el cual creemos firmemente. Chile necesita pequeña minería; desde la pequeña minería vamos a construir la mediana minería. Tiene una trascendencia que va más allá del tejido social y de la productividad que logremos. Don Iván.
Gracias, ministra; gracias, gobernador. Quiero sumarme a las palabras de agradecimiento respecto del proyecto en el que estamos trabajando y, me adelanto, ojalá sea aprobado. La Empresa Nacional de Minería viene saliendo de una situación financiera y operacional compleja; eso no se resuelve de un día para otro. Varios de los retrasos son evidentes. Solo por señalar: como empresa —haciéndome cargo también de años anteriores— abandonamos la provincia de El Loa como un espacio de trabajo. Tenemos una participación menor en Tocopilla, donde contamos con un poder de compra seco y donde mantenemos 600.000 toneladas de mineral acopiadas, no solo de la provincia de Tocopilla, sino también de la región de Tarapacá. Contamos, además, con una planta que funciona esporádicamente y no cumple con las condiciones mínimas para darle continuidad a su operación. Y nos encontramos con la planta de Taltal con los permisos prácticamente vencidos y sin el proyecto prometido en ejecución. Esa es la condición de ENAMI en esta región.
Hemos podido avanzar, y estos proyectos que serán financiados a través del Gobierno Regional son parte de lo que hace avanzar al país. La descentralización es lenta; ustedes son quienes la empujan. Hoy, por primera vez, los chancadores que vienen a mejorar la capacidad productiva de ENAMI son financiados con recursos del Gobierno Regional, han sido aprobados por ustedes y beneficiarán —por decisión de la región sobre dónde invertir— a los pequeños productores de Taltal y de Tocopilla. Lo que hacemos hoy es un paso más en esa dirección: serán ustedes quienes resuelvan contar con mayor y mejor infraestructura minera para los productores de la región.
En el caso de Taltal, que fue la consulta planteada, hoy tenemos un permiso ambiental por 4,8 años que, por razones técnicas, se computa como 5, tomando los 4,8 como base. Tenemos permiso ambiental para instalarnos en Las Breas, estamos gestionando los permisos sectoriales para las obras tempranas y la mayoría ya está cumplida. Hemos debido realizar remediaciones y otras acciones para las instalaciones de faena y el cierre perimetral, pero lo más importante es que hemos logrado un proyecto minero sustentable ambiental y económicamente. Al señalar que tiene un VAN favorable de 13 millones, garantizamos que Cochilco —la entidad que nos fiscaliza— aprobará cada una de las inversiones requeridas, tanto con cargo a los recursos de este Gobierno Regional como a los de ENAMI, por una razón simple: hemos escalado la planta al mayor tamaño que permite el permiso ambiental y hoy contamos con una capacidad de producción modular y flexible. Podemos producir 36.000 toneladas; nuestra planta actual tiene 22.000 (la que está abajo, a la que se ha hecho referencia). Esa diferencia podemos cubrirla utilizando el material de ripio que está abajo —lo que, a la vez, constituye una remediación ambiental—, pero si hay mayor producción de los pequeños productores de la zona, podemos procesarla directamente y ajustar según el ciclo de precios y su capacidad productiva, oscilando entre 20.000 y 35.000 toneladas; el resto lo suplementaremos con ripio.
Lo positivo —y esto nos lo vienen señalando en Taltal hace meses— es que hoy la capacidad productiva de Taltal es mayor que la de su planta, y estamos llevando mineral a El Salado porque no podemos estoquear: tenemos que producir. Eso es lo que viene a mejorar la planta; eso mejora nuestras cifras de manera significativa. Vamos a poder generar mayores recursos en beneficio de los pequeños productores y reducir el gasto en flete, que hoy es elevado porque no tenemos capacidad productiva en la región. Por eso, los recursos que hoy se ponen a disposición, y que vamos a suplementar en partes iguales entre ENAMI y este Gobierno Regional, son fundamentales.