Buenas tardes a todos. Ahora van a tener una cara diferente enfrente de ustedes. Voy a ejercer la presidencia y voy a presentar el informe en el que yo misma he trabajado. Vamos a hablar del efecto de las redes sociales en los jóvenes. Para empezar, me doy la palabra como ponente y, a continuación, la cederé a los ponentes en la sombra.
Me complace presentarles el proyecto de dictamen sobre el efecto de las redes sociales y de los entornos digitales en los jóvenes. Es un asunto que me toca de cerca como joven y como política. Ha sido un placer trabajar en él, porque los jóvenes están más expuestos a los efectos perjudiciales de las redes sociales: insatisfacción corporal, problemas de salud mental, ansiedad, depresión, trastornos de la conducta alimentaria, y, en particular, las niñas están más expuestas. El 58 % de las mujeres y las niñas han sufrido abuso en línea. Las nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial, conllevan riesgos adicionales. Se suele creer que lo que ocurre en línea se queda en línea, pero lo cierto es que el mundo digital y el físico están entrelazados y lo que ocurre en el entorno digital tiene consecuencias en la vida real.
Los vídeos, los algoritmos maliciosos, entre otras tecnologías, están afectando a la juventud y perpetuando la discriminación de género. Comunidades misóginas en línea están ganando terreno e influyendo en los jóvenes con narrativas extremistas; por ejemplo, me viene a la mente el nombre de Andrew Tate. Estos entornos se utilizan para difundir contenido malicioso y estereotipos que, en los debates, normalizan o alimentan la violencia de género. Las plataformas siguen sin garantizar la seguridad, evitan la rendición de cuentas y actúan basándose en un modelo de negocio que incentiva el extremismo y los comportamientos adictivos. No debemos banalizar el efecto que esto puede tener sobre los jóvenes.
En cuanto al dictamen, tengo varias prioridades:
- En primer lugar, los riesgos de la desinformación y de los estereotipos perjudiciales. La desinformación y los estereotipos moldean la mentalidad y los valores de los jóvenes y contribuyen a la discriminación dentro y fuera de línea. Para contrarrestarlos se requiere una buena reglamentación, educación y estrategias sólidas.
- En segundo lugar, la aplicación de la legislación existente. Su ejecución efectiva, con una perspectiva de género, es prioritaria. Las plataformas deben rendir cuentas por lo que ocurre en sus entornos y, al mismo tiempo, necesitamos promover la recogida de datos desagregados, salvaguardas de género y mecanismos de notificación de contenidos. Esto es esencial para luchar contra la violencia en línea y fuera de línea.
- En tercer lugar, la violencia digital contra las mujeres, que adopta diferentes formas. Con tecnologías como la inteligencia artificial surgen nuevos riesgos y amenazas. En la opinión quise subrayar casos como el chantaje, el discurso de odio, el abuso y la suplantación de identidad, entre otros.
- Por último, el foco también está puesto en la infancia. Los niños y las niñas son a menudo blanco de ataques que afectan a su salud mental, por ejemplo como víctimas de ciberacoso. Nuestras respuestas deben ser siempre intersectoriales.
Si no somos plenamente conscientes de estos fenómenos, no podremos articular respuestas eficaces. Porque agravan las desigualdades de género, dejan a las mujeres atrás y disminuyen su participación, entrañan riesgos para la salud de las niñas y alimentan la violencia de género; en casos extremos pueden desembocar en feminicidios.
Para concluir, este dictamen es un paso adelante para la salud y el bienestar de la juventud, y estoy deseando trabajar en estrecha colaboración con los ponentes en la sombra.
…a crear un dictamen constructivo y garantizar la seguridad de los jóvenes en línea. Gracias. Pasamos ahora a los ponentes, dos minutos y medio. Eva Bosena, adelante. O, en su defecto, su suplente.
Señoras y señores, en primer lugar, quiero dar las gracias a la ponente por este proyecto de opinión. Las redes sociales y los jóvenes son temas de actualidad que, además, me tocan de cerca. Son muy importantes en diferentes momentos de la vida, sobre todo durante el crecimiento de los jóvenes. Su cuerpo cambia, pero también empiezan a forjar vínculos sociales e interactuar con otros. Y estos son momentos en los que están más indefensos y son más susceptibles a la influencia de terceros.
Los y las jóvenes no siempre tienen la capacidad de valorar adecuadamente el contenido con el que se encuentran. No estoy en contra de las redes sociales: son herramientas que facilitan la comunicación con la familia, por ejemplo cuando estamos a distancia. Pero no nos equivoquemos: las plataformas muchas veces se muestran indiferentes y, además, pretenden influir en el usuario, ofreciéndole productos que no necesita. Incluso nosotros, los adultos, a veces caemos en la trampa, y esto es aún más peligroso para los jóvenes, que no saben defenderse frente a todo ello.
Nuestra comisión presta mucha atención al futuro de los jóvenes, de los niños y de las mujeres. Tenemos que defender el futuro de todos estos colectivos. En cuanto a las niñas y las mujeres jóvenes, hay que cuidar que no tengan una baja autoestima, porque esto entraña muchos riesgos. Y, en concreto, quiero sacar a colación las aplicaciones de citas. Cada vez están más integradas en la vida de las jóvenes y pueden ser muy peligrosas. Hay usuarios que pueden tratar de apropiarse de datos o de imágenes personales, entre otros riesgos. Deberíamos obligar a esas plataformas a verificar los datos y la identidad de los usuarios, y a supervisar lo que ocurre en línea. Creo que este es un problema al que no se le da el justo valor en el debate sobre las redes sociales, y deberíamos cambiar esta situación.
Estamos todos de acuerdo en que es muy importante aprender a comunicarse bien en las redes sociales, y para eso hay que educar a los jóvenes. Si no disponen de este tipo de formación en la escuela, van a buscar esa “educación” fuera, y serán los algoritmos los que reemplacen a los profesores. Ya no hay barreras claras entre el mundo digital y el físico: todo está fusionado. Por tanto, tenemos que proteger a la infancia tanto en el mundo real como en el digital.
Para concluir, de nuevo, gracias a la ponente por su excelente trabajo. Muchas gracias.
Le doy la palabra a María Costelina, representante de S&D.
Muchas gracias, presidenta. Este es un expediente extremadamente importante. Para empezar, reitero mi agradecimiento por este proyecto de opinión. Tenemos entre manos temas esenciales que están configurando el futuro.