Parlamento Europeo - JURI – Asuntos Jurídicos - 4 de noviembre de 2025

Buenas tardes, bienvenidos a esta audiencia dedicada a la diversidad de género en el sector de la propiedad intelectual. Hemos organizado esta reunión junto con la Comisión FEMM, a la que me gustaría agradecer su apoyo a esta importante iniciativa. Quisiera dar la bienvenida a nuestras invitadas: la señora Edita de Visiua, vicedirectora ejecutiva de la EUIPO; la jefa de la División de Asuntos Exteriores de la OMPI; la señora Vipka Hendricks Patten, analista y economista de la Oficina Europea de Patentes; la profesora Patellini del ISET; y la señora Carmen Sánchez, empresaria. Muchísimas gracias a todas por su presencia. Estamos deseosos de escuchar sus intervenciones y, sin más, tiene la palabra la señora Edita de Visiua. Muchas gracias, señor presidente, señorías, estimados colegas. Gracias por invitar a la EUIPO a esta comparecencia tan importante. Es un honor y un placer estar aquí y compartir este momento con mujeres que son una verdadera inspiración y demuestran lo que es posible cuando al talento se le da una oportunidad. El apoyo a las mujeres y a la diversidad en general siempre ha sido una causa muy cercana a mi corazón. Crecí en Polonia en una época en la que se decía que hombres y mujeres podían desempeñar los mismos trabajos; un conocido eslogan de la Polonia comunista era: “las mujeres pueden conducir tractores”. Estudié Física en la universidad y, posteriormente, la combiné con el Derecho; así me enamoré de la propiedad intelectual. Cuando empecé mi carrera en este ámbito había muy pocas mujeres en puestos de liderazgo. Hoy estoy orgullosa de ser la primera vicedirectora ejecutiva de la EUIPO y de poder debatir con ustedes cómo lograr que la propiedad intelectual sea más inclusiva. El objetivo es sencillo: crear un ecosistema en el que todas las mujeres, en particular las jóvenes creadoras, tengan la confianza y la oportunidad de transformar sus ideas en un impacto real. En toda Europa hay muchísimas mujeres con talento que utilizan la propiedad intelectual para proteger sus ideas y hacer crecer sus empresas. Jil Sander demostró que el diseño y la marca pueden ser creativos y tener poder comercial. Magda Butrym, de Polonia, representa a una nueva generación de empresarias europeas que utilizan la protección de marcas y diseños para competir a escala internacional. Sin embargo, las mujeres siguen infrarrepresentadas en el sector. ¿Qué estamos haciendo y qué podemos hacer para cambiarlo? Hace dos años, la EUIPO realizó un estudio sobre la presencia de la mujer en el ámbito de las marcas y los diseños. Las mujeres representan solo el 24 % de las y los diseñadores en Europa y están un 30 % menos representadas que los hombres. A este ritmo, tardaríamos más de 50 años en alcanzar la paridad. Por ello, la inclusión es un asunto urgente: no puede esperar. Confiamos en que este análisis de la situación nos ayude a compartir buenas prácticas y a atraer a más mujeres.

En el mundo del diseño y la innovación, a través de los premios europeos de diseño, celebramos a las mujeres que trabajan en el sector. Este año, uno de los premios fue para Hella Jongerius, de los Países Bajos, una diseñadora en cuya obra se funden la artesanía tradicional y la tecnología, y que ha trabajado para marcas como IKEA y KLM. Antes de ella, Maria Benktzon, de Suecia, recibió también el mismo galardón por demostrar que el diseño inclusivo puede hacer la vida más fácil para todas las personas. Más recientemente lanzamos un primer comité virtual para definir el panorama de la propiedad intelectual y nuestro programa de trabajo para 2030, reuniendo a expertos de las oficinas de propiedad intelectual de toda la Unión Europea para compartir ideas y lograr que el sistema de propiedad intelectual resulte más inclusivo para las mujeres y para las personas inventoras jóvenes. Porque un acceso igualitario a la PI supone también un acceso igualitario a la innovación. Estamos llegando a la próxima generación a través de un proyecto en el que más de 10 000 estudiantes de toda Europa adquirieron competencias digitales y empresariales. En el ámbito de las disciplinas STEM, atraímos a miles de mujeres de 19 países, a las que mostramos de qué forma la propiedad intelectual puede transformar la creatividad en innovación. Dentro de nuestra comunidad de la propiedad intelectual, la tendencia muestra signos positivos. En este momento hay 12 mujeres al frente de oficinas nacionales de propiedad intelectual en Europa, la mitad nombradas en los últimos dos años. Aunque estos nombramientos se realizan a nivel nacional, para nosotros demuestran que cada vez hay más mujeres en altos cargos en el mundo de la PI. En la EUIPO, cerca del 60% de nuestro personal son mujeres; la mitad de las direcciones y el 56% de las jefaturas de equipo también están ocupadas por mujeres. Estas cifras muestran que el progreso avanza, pero requiere una vigilancia constante. Permítanme ofrecer algunos ejemplos de lo que hacemos en la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea. A través de nuestro Plan Estratégico 2030 hemos lanzado el programa de igualdad de oportunidades, con iniciativas clave para el desarrollo de capacidades de liderazgo, programas de mentoría para mujeres y el fomento de prácticas inclusivas, de manera que cualquier persona, mujer u hombre, con independencia de su origen, tenga las mismas oportunidades. Cada 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer y, en mayo, acudimos a las universidades. Apoyamos la conciliación de la vida profesional y personal con días de trabajo en remoto, especialmente durante las vacaciones escolares. También en la sede de la EUIPO en Alicante aplicamos estas medidas, de modo que los hijos e hijas de nuestro personal puedan recibir su educación. Señorías, una Europa de la innovación necesita la creatividad de todas y todos. No podemos permitirnos perder talento por cuestiones de equilibrio de género. Cuando se da a las mujeres las mismas oportunidades de crear diseños, dibujos y de inventar, Europa se refuerza y se vuelve más innovadora. Y lo que yo espero es que cada...

cada vez haya más mujeres un día y que un día, pues, como yo, se enamoren de la propiedad intelectual. Muchísimas gracias. Gracias por su presentación, señora Dembisíbec. Tiene la palabra la señora Dalila Hamou, de la OMPI. Buenas tardes, señor presidente, y muchísimas gracias, señorías, miembros de la comisión. Gracias por darme la oportunidad de presentarme ante ustedes hoy en nombre de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, la OMPI, y de contribuir a sus debates acerca de la presencia de la mujer en el sector de la propiedad intelectual. La OMPI es la agencia de las Naciones Unidas que sirve a los innovadores y creadores de todo el mundo. Una parte importante de nuestro trabajo consiste en involucrar a quienes están infrarrepresentados en el ecosistema de la innovación, especialmente las mujeres y los jóvenes creadores. Como ya ha señalado la señora Dembisíbec, las mujeres siguen estando infrarrepresentadas en la propiedad intelectual. En 2024, según los datos de la OMPI, las mujeres representaban tan solo el 18% de las inventoras nombradas en las solicitudes internacionales de patentes del Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT) y el 21% en las solicitudes de diseños industriales a nivel mundial. Estas cifras evidencian una profunda brecha de representación y, al mismo tiempo, una oportunidad económica desaprovechada. Por ejemplo, cerrar esta brecha de género en el ámbito empresarial en toda Europa podría generar 250 000 millones de euros adicionales en valor añadido bruto de aquí a 2040. Para mejorar la participación de las mujeres en la propiedad intelectual, la OMPI ha creado una estrategia, una hoja de ruta —el WIPO Gender Action Plan (WIPO GAP)— para reducir esta brecha. El objetivo está muy claro: asegurar que la creatividad y la innovación se apoyen en la propiedad intelectual, y permitir que las mujeres contribuyan plenamente y se beneficien de ese ecosistema de innovación. Para lograrlo, nuestro programa se articula en torno a tres pilares complementarios: estrategia, datos y creación de oportunidades. En el pilar de estrategia y políticas, trabajamos para reforzar los marcos institucionales y crear entornos en los que las mujeres puedan participar plenamente en la innovación. En este marco, hemos convocado un simposio OMPI–ONU Mujeres con representantes de 64 oficinas de propiedad intelectual de todo el mundo. El resultado ha sido un diálogo muy dinámico sobre buenas prácticas, colaboraciones y estrategias de política tanto nacionales como regionales, así como iniciativas orientadas a apoyar la participación de creadoras, innovadoras y empresarias. Pero el diálogo no basta. También necesitamos infraestructuras que garanticen que las políticas se basen en evidencias. En 2023, la OMPI lanzó una base de datos sobre la brecha de género que respalda todas nuestras políticas e iniciativas y aborda la participación de las mujeres en el emprendimiento innovador y en la propiedad intelectual. Esta base de datos ofrece a los legisladores de todo el mundo ejemplos prácticos y datos concretos para diseñar estrategias focalizadas, y proporciona a los investigadores información sobre intervenciones exitosas en otros contextos.

…esencial para diseñar políticas que cierren la brecha de género. Nuestra investigación inicial se centró en las mujeres en el mundo de las patentes, pero ahora analizamos su presencia en marcas, diseño industrial y derechos de autor para obtener una imagen completa de la contribución femenina al panorama de la creatividad y la innovación. Los resultados son prometedores. Nuestro informe económico de 2025 sobre Europa Central y los Países Bálticos indica que la participación de la mujer en el diseño industrial prácticamente se ha duplicado, del 9,5% en 2013 al 18% en 2021. Nuestros economistas también analizan la renovación de marcas en Chile y los derechos de autor en obras literarias en Líbano. Hace un año celebramos el primer foro mundial de investigación con participantes de 41 países. En noviembre celebraremos la segunda de estas conferencias mundiales sobre acceso digital, incluyendo los clústeres de innovación, la composición de equipos y sus efectos sobre inventores e inventoras, así como metodologías emergentes en la recogida innovadora de datos. Por supuesto, además de las políticas y los datos, todo esto debe traducirse en oportunidades tangibles: ese es el papel del pilar “Crear oportunidades” de nuestro programa. A través de formaciones y capacitaciones, la OMPI ha llegado a más de 300.000 mujeres en los últimos cuatro años. La Academia de la OMPI imparte cursos para cerrar la brecha de género en materia de propiedad intelectual, con más de 134.000 mujeres beneficiarias tan solo en 2024. En Europa, por ejemplo, las artesanas transforman la tradición en oportunidades económicas mediante programas de la OMPI de apoyo al emprendimiento y al éxito empresarial. En Rumanía, estos programas se aplican para preservar las artesanías y alcanzar nuevos mercados. En Hungría, las mujeres artesanas presentan proyectos para ampliar sus actividades a nivel nacional. En Ucrania, las artesanas tradicionales han recibido mentoría de la OMPI; cuatro de ellas han conseguido comprender cómo funcionan los derechos de propiedad intelectual —por ejemplo, las marcas—, que sirven para preservar este patrimonio y, además, abrir posibilidades económicas. Pronto escucharemos el testimonio de Carmen Sánchez, creadora de Flores Nicua, quien ha participado precisamente en este proyecto de propiedad intelectual para mujeres artesanas en la España rural. Su historia es un ejemplo de cómo este apoyo focalizado puede transformar la creatividad individual en empoderamiento económico. Concluiré diciendo que cerrar la brecha de género en propiedad intelectual no se logra de la noche a la mañana. No hay una única organización que pueda hacerlo por sí sola; pero, mediante iniciativas como nuestro proyecto OMPI GAP y trabajando con las oficinas nacionales, podemos tener un impacto a largo plazo. Sin embargo, esto requiere también un fuerte compromiso político para mantener el apoyo en el tiempo, desplegar esfuerzos focalizados y dar visibilidad a esta brecha y al potencial de las mujeres en la innovación. Juntos podremos crear un mundo más innovador y una innovación más incluyente. Señor Presidente, señorías, muchísimas gracias por su atención y por darnos la oportunidad de presentarles el trabajo de la OMPI ante todos ustedes. Ha sido un placer y quedo a su disposición para cualquier pregunta. Gracias. Muchas gracias, señora...

Muchas gracias. Tiene la palabra ahora Wiebke Hinrichs, que se conecta en línea. Buenas tardes. Estoy en la Oficina Europea de Patentes y quisiera presentar brevemente esta institución. Es una institución que protege la innovación y concede patentes cuyos efectos pueden extenderse a 64 países. El año pasado recibimos en torno a 200.000 solicitudes de patente. Contamos con más de 6.000 empleados; unos 4.000 son expertos dedicados al examen de patentes en distintas áreas tecnológicas. En la transparencia pueden ver el reparto. Soy ingeniera industrial, especialidad mecánica, y trabajo en patentes de movilidad, tecnologías espaciales y también en bicicletas. Además de examinar patentes, parte de mi labor es el análisis técnico de datos para la Unidad de Estudios Económicos de la Oficina, que forma parte del Observatorio de la Oficina Europea de Patentes, un foro de información. Allí aunamos los recursos y datos de nuestras bases de datos —que incluyen no solo patentes, sino también publicaciones científicas, normas y documentación de normalización— para anticipar, en la medida de lo posible, la evolución de la innovación y ponerla a disposición del público en general y, por ejemplo, de ustedes para su toma de decisiones. Entre nuestras publicaciones figuran distintos tipos de estudios, así como el marcador de propiedad intelectual y el buscador geográfico de tecnologías. En 2020 publicamos un estudio específico sobre las inventoras —la participación de la mujer en la actividad de invención— y analizamos el porcentaje de mujeres que figuran como inventoras en las solicitudes ante la Oficina Europea de Patentes, observando su evolución a lo largo de 40 años. El resultado es positivo: el porcentaje de inventoras ha aumentado de forma constante. La línea roja corresponde a los países de la Oficina Europea de Patentes (EPO); no coincide con la Unión Europea, ya que somos más. Estados Unidos aparece como la línea inferior, y también se muestran las de Corea del Sur y China. Detrás de estos datos hay fenómenos complejos que hemos tratado de desglosar por sectores: por ejemplo, en el sector químico el porcentaje de mujeres es significativamente mayor como inventoras designadas y el crecimiento ha sido más acusado que en mi propia especialidad, la ingeniería mecánica, con varias categorías intermedias. Asimismo, cuando comparamos tipos de solicitantes, observamos que en universidades y organismos públicos de investigación (OPI) el peso de las mujeres en las invenciones es mayor que en el sector privado, que incluye tanto a las empresas —columna intermedia— como a los solicitantes a título particular. En el Índice de Patentes encontrarán estadísticas desglosadas por Estado miembro: en el gráfico, España, Bélgica y Francia presentan un porcentaje relativamente alto de mujeres inventoras en las solicitudes.

La proporción de inventoras, comparada con otros países, requiere siempre un análisis desagregado para entender qué ocurre en cada Estado. Una de las explicaciones de estas cifras es que en España, Bélgica o Francia quizá haya más solicitudes de patentes procedentes del ámbito universitario, mientras que en países como Italia o Alemania, o en determinadas regiones de Asia, recibimos más habitualmente solicitudes que vienen del sector privado. No lo digo como excusa para nadie, en especial para los países situados a la derecha del gráfico y sus cifras tan bajas. En cualquier caso, todos nuestros estudios completos están disponibles públicamente, con el detalle que puedan desear consultar, en epo.org, en particular en el Observatorio. El próximo año se publicará un nuevo estudio, “Las mujeres en STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas)”. Queremos cooperar con otras instituciones y su publicación está prevista para comienzos de 2026. Confiamos en que proporcionará datos muy útiles, información nueva y conclusiones de gran interés. En la siguiente transparencia verán que concedemos anualmente dos galardones: el Premio al Joven Inventor y el Premio al Inventor Europeo. Contamos con numerosas candidatas y finalistas en estas categorías; ven aquí muchas fotografías, pero no son una imagen completa: podríamos dedicar un libro o un póster a cada una, porque todas han realizado invenciones que nos facilitan la vida. Por desgracia, no dispondremos del tiempo necesario para entrar en todos los detalles, aunque lo merecerían. Debo decir que estoy desarrollando una carrera profesional en la Oficina Europea de Patentes (EPO) enormemente interesante y llena de oportunidades. Vivo fuera de mi país, tengo tres hijos y es un contexto muy enriquecedor, por lo que estoy muy agradecida. He tenido la suerte de conocer a algunas de estas inventoras. Es un placer que vayamos a escuchar dentro de nada a la profesora Patrizia Paterlini‑Bréchot, quien, sin duda, podrá informarles de su camino hacia la invención. Muchísimas gracias por su atención e interés. Gracias por la ponencia. Tiene la palabra la profesora Patrizia Paterlini‑Bréchot, siguiente oradora. Señoras y señores, miembros de la Comisión de Asuntos Jurídicos, es un honor comparecer hoy para hablar de la mejora de la diversidad de género en el sector de la propiedad intelectual, un asunto que se sitúa en la intersección entre la innovación, la igualdad y la futura competitividad de Europa. Comparezco ante ustedes como científica e inventora del método ISET, una tecnología patentada que permite aislar células tumorales circulantes raras a partir de sangre, abriendo la vía a diagnósticos oncológicos más tempranos, a tratamientos más precoces y, potencialmente, a la eliminación del cáncer. El camino desde el descubrimiento científico hasta la protección mediante propiedad intelectual ha sido un viaje transformador, tanto en lo profesional como en lo personal, que me ha mostrado lo esencial que es construir un ecosistema de innovación más inclusivo.