Señorías, por favor, ocupen sus escaños.
Señorías, por favor, ocupen sus escaños.
Gracias. Gracias. Buenas tardes a todos y a todas. Si sus señorías ocupan los escaños, empezaremos la sesión del Pleno. Muchas gracias a todos y a todas.
Se abre la sesión y, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 68.1 del reglamento y con lo acordado por la Junta de Portavoces, esta Presidencia somete al Pleno de la Cámara a la modificación del orden del día en el sentido de incluir como último punto de la sesión del Pleno el miércoles la solicitud de abocación por el Pleno de la deliberación y votación final del proyecto de ley de transparencia e integridad de las actividades de los grupos de interés. Lo acuerda así la Cámara. Perfecto. Queda aprobada entonces la modificación del orden del día en el sentido que hemos explicado.
Comenzamos ahora con el debate de toma en consideración de la proposición de ley del Grupo Parlamentario Vox de modificación de la Ley Orgánica 4.002.000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social para restringir la regularización de inmigrantes ilegales a través del arraigo.
Para la presentación de la iniciativa tiene la palabra la señora Demer Méndez.
Gracias, señora presidenta. Venimos a traer una oportunidad. Una oportunidad para valorar y rescatar lo más elemental que tenemos, que es lo que somos.
Con esta proposición de ley se elimina la trampa del arraigo, ese coladero de regularizaciones masivas y esa vía de regalo indiscriminado de lo más valioso que tenemos, nuestra nación, nuestra pertenencia y nuestra identidad.
Y lo cierto… Lo cierto es que es bonito estar aquí para defender lo más elemental del ser humano, los asideros naturales que los progres lleváis tantísimo tiempo queriendo arrebatarnos.
Hace años que quienes mandan buscan la abolición de las naciones, buscan desdibujar las fronteras y debilitar los pueblos fuertes.
Hace años que hay valientes que se resisten a creer y aceptar que no hay nada que hacer.
La semana pasada el mundo patriota se sacudió porque una de esas grandes voces fue apagada por el odio y el fanatismo de los de siempre, los que odian las patrias, las familias fuertes y el sentido común.
Pero el asesinato de Charlie Kirk, sobre todo, fue un ejemplo. Un ejemplo de entrega de quienes, por encima de todo, escogen la causa de la verdad y de la justicia. Un ejemplo de quienes escogen a toda costa y a todo coste sacrificarse por recuperar todo eso que nos ha dado la vida.
…lo habéis quitado. Quienes perseguís a los patriotas, quienes encargáis redacciones y articulitos demonizándonos todos los días, quienes señaláis cobardemente para que sean otros quienes ejecuten, también debéis saber que cada voz que intentéis apagar terminará resonando por toda la eternidad.
Las balas no han podido ni podrán nunca acabar con la voz de los patriotas. Al contrario, cada ataque será fuerza para desafiar a quienes quieren, de nuevo, abolir las naciones.
Y hoy… Como decía antes, traemos una oportunidad. Traemos una proposición de ley para acabar con esa trampa, con la trampa del arraigo, una proposición de ley para dejar de malvender la nacionalidad de los españoles.
El arraigo es este mecanismo que se introdujo en el artículo 31 de la Ley Orgánica 4/2000 y se desarrolló en el 124 del reglamento de extranjería. Al principio nos contaron que fue una herramienta puntual para situaciones extraordinarias, pero lo cierto es que se ha convertido en la vía mayoritaria de regularización de quienes entran por la puerta de atrás en nuestras naciones.
El mejor ejemplo de que esto fue una trampa para malvender lo que además debemos blindar es lo que ha sucedido los últimos cinco años. Y es que el número de inmigrantes con residencia por arraigo familiar ha aumentado en un 650 %, señorías, pasando de 43 848 en marzo de 2020 a 328 841 en marzo de 2025, datos de su propio gobierno.
A esto se suma, desde luego, esa infame reforma de la ministra Saiz del reglamento de extranjería, por la que ella misma ha reconocido que será la herramienta para regularizar a un millón de inmigrantes más los próximos tres años.
Se reían de nosotros cuando hablábamos de invasión, nos quedábamos cortos, porque no es solo que nuestra nación, que nuestra identidad, que nuestros servicios públicos sean llevados al colapso, es que, además, y lo más grave, es que es una invasión patrocinada por quienes debían velar por nosotros, por quienes debían proteger, preservar y valorar el patrimonio colectivo de todos los españoles, por los encargados de que las cosas fuesen bien.
Nos vendisteis en 2015, que eran cuatro refugiados que huían de una guerra de Siria, o de cualquiera, para meter millones y millones y millones de personas de muchos lugares del mundo, que han acabado superando y colapsando a los españoles autóctonos en infinidad de lugares de nuestra patria.
Nos dijisteis que debíamos comprometernos a construir puentes y derribar muros porque venían mujeres violadas que huían de la guerra y resulta que trajisteis a sus violadores sin control y aumentó el peligro de las mujeres y de las niñas en las calles de España y en las calles de Europa.
Nos contasteis que venían a pagar nuestras pensiones, pero nos encontramos con listas de espera insoportables, con salas de hospitales a reventar y con colapso de los servicios de todos.
Nos la colasteis con lo de que venían a hacer los trabajos que nadie quería. Pero no nos engañáis, sabemos que buscabais mano de obra barata para vuestros jefes. Y a cambio, los españoles verían precariedad laboral, pobreza, paro y miseria.
Porque… En los últimos cuatro años, solo los últimos cuatro años, habéis llamado a dos millones y medio más, a dos millones y medio de inmigrantes más. Y no hay ni más viviendas, ni más servicios públicos, ni más policía, ni más centros de salud, ni más colegios, ni más trabajo. Lo que hay es, por contra, más inseguridad, más impuestos, más pobreza y más fiasco.
No sé qué excusa pondréis hoy para votar que no a quienes seguimos intentando detener esta locura a toda costa. Pero hay que detenerla, hay que detener este delirio. Y cada día que pasa es tarde, cada día que pasa es tarde.
Pero los españoles se merecen ni un colapso más, ni una niña en peligro más.
Ni un hijab más, ni un mataleón más, ni un machetazo más, ni un atraco más a nuestro futuro, ni un atentado yihadista más, ni un euro más a las ONGs inmigracionistas, ni un contrato más para la industria de las fronteras abiertas, que nos esquilma y nos empobrece.
Es urgente. Es urgente, al menos tres cosas son urgentes. Suprimir el arraigo, esa herramienta jurídica que es una trampa para las regularizaciones masivas. Dos, deportaciones masivas. Remigración de quienes del... delinquen, de quienes entran por la puerta de atrás, de quienes vienen a vivir del esfuerzo de los de aquí y de quienes intentan imponer sus aberraciones. Tres, prohibir las regularizaciones masivas, esas que todos ustedes aquí aprueban y aplauden. La antesala para borrarnos, la antesala para el suicidio colectivo.
Porque, señorías, la nacionalidad no es un papel. No cabe en un pasaporte ni se reduce a un trámite burocrático que caduca. La nacionalidad es un pulso vivo que se transmite de generación en generación, forjado en la memoria de un pueblo que ha sabido resistir, crear y soñar a lo largo de su vida y a lo largo de los siglos. España, señorías, no nació de un texto legal, sino de un encuentro, de la fuerza de sus pueblos y de la obstinación de quienes defendieron su espíritu. En Umancia, Covadonga, Compostela, Lepanto, León o Las Navas de Tolosa son símbolos y nuestra nacionalidad no es un título, es una herencia construida con sangre, con arte y con memoria. Los papeles se pierden, se olvidan, se niegan, se traicionan, se traicionan a menudo en esta Cámara. Pero la nacionalidad late en la historia compartida de las luchas que nos hicieron un pueblo, en la capacidad de reconocernos en quienes caminaron antes que nosotros. La nacionalidad no es un documento administrativo, señorías, es una epopeya que aún se escribe. Es una herencia, es un legado que nos atraviesa, pero ante todo, señorías, es un vínculo que nos obliga a cualquier esfuerzo para enfrentarnos a quienes quieren abolirla.
Muchísimas gracias.
Gracias, presidenta. Buenas tardes, señorías. Buenas tardes a todos y a todas, menos a los racistas, a los que señalan a menores migrantes, a los que quieren hundir barcos que rescatan personas, porque de eso hablamos aquí, de personas, de seres humanos, y no se nos debería olvidar nunca.
Veo a los diputados de Vox un poco ojerosos esta tarde, les veo cansados. Vienen de resaca, porque este fin de semana tenían su aquelarre anual en Madrid, eso que llaman el Europa Viva 2025, un evento donde ustedes se juntan con los fachos de todo el mundo para seguir esparciendo su odio y el mismo programa racista. Lo cuento aquí porque creo que hay mucha gente que no se ha enterado de este aquelarre. Nadie ha oído hablar de Abascal este fin de semana porque la noticia del domingo fue otra. Fue la movilización social contra el genocidio de Gaza, la movilización de centenares de personas que consiguieron paralizar la vuelta y también paralizar el lavado de cara que se pretendía hacer con el Estado terrorista de Israel. Y se ha vuelto a demostrar. Miren, cuando el pueblo se levanta no sólo es capaz de parar una vuelta ciclista, también es capaz de darle la vuelta a la agenda mediática y a los bulos y al odio de la ultraderecha. Cuando nuestro pueblo se pone a trabajar,
Ni la propaganda sionista de Abascal y de Ayuso, ni las tanquetas que nos envió Marlaska. Y esto les tiene que quedar muy claro. La vuelta la ha parado la sociedad civil organizada y esa misma sociedad civil puede ahora parar también a esta ultraderecha racista y sionista. Que no les quepa ninguna duda.
Por lo demás, señorías de Vox, la proposición de ley que nos traen esta tarde a mí personalmente se me queda muy corta. Ustedes en esta proposición nos proponen endurecer los requisitos para regularizar inmigrantes, cargarse prácticamente el derecho de asilo y refugio, agilizar los expedientes de expulsión, pero esto a mí, sinceramente, viniendo de ustedes, se me queda, como digo, muy corto.
Porque ustedes no solo odian a los inmigrantes que cometen delitos, también odian a los inmigrantes que rezan, como hemos visto en Jumilla. Odian incluso a los niños de familias inmigrantes que van a la escuela.
Un concejal suyo, en mi tierra, en Molina de Segura, los perseguía hasta el colegio y los grababa ilegalmente.
Ustedes odian incluso a los niños españoles, hijos de un padre inmigrante y de una madre española. A un chaval de 15 años, este verano en Torrepacheco, lo rodearon cuatro personas, lo arrastraron, lo patearon y rompieron botellas para clavarle cristales. Cargos públicos de Vox en la región de Murcia jalearon esa agresión.
Eso es lo que quiere de verdad Vox: el acoso, la agresión y la intimidación a las personas migrantes. Y hoy vienen ustedes con esta proposición de ley al Congreso y ya enseñan solo la patita.
Pero su programa, ya lo dijo usted, señora diputada de Mer, es echar a ocho millones de inmigrantes y también a sus hijos. Tengan antecedentes o no tengan antecedentes, eso a ustedes les da igual. Ese es el programa de Vox.
Y frente a esto, el resto de las fuerzas democráticas y, por tanto, antifascistas, tenemos dos opciones. O seguir dándole espacio a esta gente y tomar en serio este tipo de proposiciones, ir comentándolas punto a punto, que al final es lo que quiere la ultraderecha y es lo que la legitima, o podemos hacer algo más por las personas migrantes, como es aprobar de una puñetera vez la regularización de las personas migrantes.
Y aquí un aviso también al Gobierno. Vamos tarde. La regularización que exigía la sociedad civil tenía que estar hecha hace dos años. Y retrasarla solo está dando espacio a este tipo de discursos racistas, porque al final, la manera más directa de acabar con las bases materiales del racismo son los derechos sociales y ciudadanos para todos y para todas.
Y, por último, quería terminar dirigiéndome a todas esas personas que han venido a España a vivir con nosotros y a trabajar honradamente, que son la mayoría, a sus hijos y a sus hijas que han nacido aquí y que son tan españoles como cualquier diputado o diputada de esta Cámara.
Para todas ellas tengo un mensaje de Podemos. Si nadie os lo ha dicho antes, bienvenidos y bienvenidas. Gracias por todo lo que hacéis por este país. Gracias por trabajar aquí con nosotros y hacernos mejores. Os queremos aquí y también os queremos luchando a nuestro lado frente a una extrema derecha racista. Porque no sobran inmigrantes, señorías. Lo que sobran son fascistas. Muchas gracias.
Muchas gracias, señor Sánchez.
Por el Grupo Parlamentario Vasco PNV tiene la palabra el señor Legarda Uriarte. Es que recaso a la presidenta, a Rachaldeo, un gustillo. Buenas tardes, señorías. Volvemos a debatir sobre el fenómeno migratorio, un fenómeno consustancial a la historia de la humanidad que en cada momento, en cada tiempo y lugar ha tenido su propia configuración y que hoy se nos presenta como un fenómeno complejo y de enormes dimensiones que no conviene ni banalizar ni tampoco simplificar y mucho menos utilizarlo de manera desalmada para la extensión de réditos electorales. Responde a variadas causas que se podrían resumir en la falta de medios de vida, de oportunidades, de personas en sus países de origen, lo que les impulsa a migrar en busca de un futuro mejor y que, querámoslo o no, en ocasiones tensan las relaciones entre los países receptores y los de origen y tránsito.
…de los distintos países receptores y también en las mismas sociedades receptoras. Un fenómeno migratorio que reclama, en todo caso, un esfuerzo y una cooperación en todas las áreas con los países de origen y tránsito y un abordaje, en nuestro caso, a nivel de la Unión. Nos encontramos ante un reto global europeo que requiere una respuesta también a nivel europeo y cuyo objetivo último ha de ser buscar el equilibrio entre el principio de responsabilidad de los países con frontera exterior y el de solidaridad de los demás países en el marco del acervo humanitario europeo y del respeto a los derechos fundamentales.
Principios de responsabilidad y solidaridad que desde una perspectiva axiológica y a nivel interno también hemos de conjugar para conformar nuestra respuesta ante este fenómeno estructural que es el migratorio.
Porque una cosa es, señorías, que ninguna sociedad pueda admitir sin límite a toda persona extranjera que quiera instalarse en su territorio y otra muy distinta que, incluso de forma irregular en términos administrativos, haya de reivindicarse a ellos y tratarles negándoles su dignidad como personas y su propia humanidad, asociando inmigración y delincuencia y describiendo a la inmigración económica irregular como ilegales e inculcando marcos mentales discriminatorios en la ciudadanía.
Marcos mentales que buscan generar alarma social a la sociedad de inmigración como una amenaza tanto para la identidad como para la seguridad de la sociedad receptora, sin perjuicio, señorías, de que, y vuelvo a repetirlo, ni Europa ni cada uno de los Estados miembro puede renunciar a unas políticas sostenibles en materias de inmigración y asilo, ni descuidar tampoco a quienes planteen riesgos objetivos para su seguridad, pero tampoco atender a quienes sólo alientan miedos, deshumanizan al otro y piden inmigración cero, algo que finalmente perjudica tanto al valor libertad que está reñido con el pánico ciudadano como igualmente a los mismos valores humanitarios en que se basa nuestra civilización.
Señorías, hemos de estar vigilantes ante falsos relatos de flujos migratorios incontrolados, del relato de la inseguridad y el terrorismo y del de la pérdida de identidad. Relatos, como les decía, que sólo buscan el trasvase de votos hacia un mesianismo autoritario y que necesita introducir previamente esos miedos en la agenda íntima de la ciudadanía que vive en los sistemas democráticos.
Señorías, esta semana, en este Pleno, Vox nos trae una vez más todo este argumentario, al menos con tres iniciativas, y, señorías, lo dije la semana pasada, debemos tomarnos en serio las amenazas de Vox y también la gravedad de sus intenciones, porque es una indecencia instrumentalizar las crisis migratorias, porque la clave de bóveda de la gestión de la seguridad en las sociedades democráticas liberales se asienta en la responsabilidad individual y en el principio de proporcionalidad, no en incriminaciones genéricas a un colectivo.
Le recuerdo que los gitanos es un desgraciado ejemplo de estigmatización histórica, porque, señorías de Vox, dicen defender a la mujer frente a un modelo social de miedo, silencio y humillación que dicen porta la cultura migrante africana y que va camino de imponerse en el Estado por la falacia de la gran sustitución, pero luego se niegan a apoyar leyes y políticas que buscan remover los obstáculos para lograr la igualdad efectiva de hombres y mujeres, que al movimiento feminista lo llaman feminazi, que niega la violencia de género, pese a todos los asesinatos que siguen cometiéndose.
Porque, señorías de Vox, dicen defender a los vecinos y a los mayores de nuestros barrios, pero luego ni una queja ni una palabra contra la gentrificación.
Porque, señorías de Vox, dicen que la inmigración hunde y precariza las condiciones laborales de las clases trabajadoras españolas, beneficiando a los que buscan mano de obra barata, pero luego no votan a favor de ninguna ley que mejore las condiciones de esas clases trabajadoras, ni critican a aquellos que sólo ofrecen condiciones precarias, laborales precarias, infracondiciones en sus explotaciones, con contratos en negro, pero que después de trabajar no les quieren ver pasear por sus calles.
Porque, señorías de Vox, sostienen que en el Estado existe una política de fronteras abiertas. Gracias.
…se pliega ante la oligarquía mundial, cuando ustedes, señorías de Vox, son lacayos de la oligarquía tecnológica mundial y singularmente la americana y antirregulación europea que la discipline. Porque señorías de Vox reclaman impedir el trabajo de las ONGs en el mar y enviar a la Armada para luchar contra las pateras a la vez que sostienen la obligación de rescatar a los náufragos. Entonces, ¿qué rol deberá cumplir la Armada según ustedes? Señorías de Vox, ¿cómo gestionarían las expulsiones masivas que reclaman? ¿De quienes no se conoce ni su país de origen? ¿De quienes su país de origen se muestra retardatario? ¿O incluso de quienes nadie se hace cargo, incluidos los menores? Señorías de Vox, y voy finalizando, dejen de dar pábulo a discursos tóxicos que envenenan la política y el debate político, la seguridad pública y la misma convivencia. Y ustedes, señorías del Partido Popular, dejen de alimentar a un monstruo que les devorará. Las encuestas así lo van corroborando. Nada más y muchas gracias.
Querría hacer una reflexión antes de iniciar mi intervención, y es la relativa a la vorágine informativa en la que vivimos. Estos días ha sido noticia todas aquellas protestas que se desarrollaron aquí cerca del Congreso el pasado domingo, ante la vuelta para denunciar la terrible situación de Gaza. Y ante ello hemos visto cómo diferentes medios de comunicación, diferentes partidos políticos han hablado de la mala imagen que se daba para España, del peligro que ello representaba.
Pero claro, en esa vorágine mediática en la que vivimos parece que se ha olvidado lo vivido hace apenas dos meses en Torrepacheco, donde vimos pogromos y persecuciones de personas migrantes, jaleadas y auspiciadas por la extrema derecha. Y ante ello parece que esos mismos que se alteran ante lo vivido el domingo les parece normal. ¿Daba eso buena imagen para España? ¿Creen que eso no es peligroso perseguir a ciudadanos para intentar lincharlos? Creo que eso es lo peligroso, creo que eso es lo terrible. Y me dirán ustedes cuál es la diferencia entre lo que auspiciaron ustedes el pasado mes de julio o lo que hace el Ku Klux Klan en Estados Unidos. Díganme ustedes en qué se diferencia.
Miren, señora Ademer, lo que es un delirio es lo que ha traído usted aquí. La cantidad de bulos, de mentiras que ha repetido, que ha insistido. Y es cierto que lamentablemente han tenido cierto éxito, porque debido a que esto es una moda mundial, ustedes repiten y extienden sus bulos en redes sociales, pues lamentablemente hoy en día hay parte de la sociedad que cree, que considera que la migración es un problema. Pero si vamos a los datos, si vamos a examinarlos, lo que vemos es que todo lo que dicen ustedes es mentira. No hay datos que unan a las migraciones con la delincuencia. Es más, esto está estudiado, lo estudia la academia. Hay datos sociológicos que dicen que no hay un impacto entre las migraciones y la delincuencia. Se han doblado las migraciones y el número de delitos tradicionales, si no tenemos en cuenta los ciberdelitos, va a la baja. ¿Por qué repiten ustedes esta estigmatización, este señalamiento contra personas migrantes? Para extender un miedo y para generar un enemigo exterior que les vaya a ustedes bien en lo electoral, lo que es terriblemente peligroso, pero además es…
De igual forma, ustedes mienten a su electorado cuando dicen que la Armada tendría que bombardear a personas migrantes que intentan llegar al Estado o a Europa en embarcaciones con nosotros. No saben que eso legalmente no se puede hacer. Pero también cuando usted habla de las deportaciones masivas y sabe que el Convenio Europeo de Derechos Humanos no permite las devoluciones masivas, está prohibido. ¿Por qué mienten a sus votantes? Porque les va bien electoralmente, supongo, pero tratan a sus votantes como auténticos idiotas si es que se creen en algún momento que esto es posible.
¿Saben cuál es la realidad? Que a día de hoy 2,8 millones de trabajadores extranjeros en España aportan el 10% de toda la recaudación de la Seguridad Social. Y saben que al mismo tiempo solo perciben el 1%. Esto es, las migraciones no solamente son un fenómeno, como se dice, universal, sino que también es una necesidad a día de hoy en la sociedad española.
Usted hablaba de la mano de obra barata. A mí me ha venido a la cabeza el caso de aquel militante apoderado suyo, de VOX, que llevó a una persona migrante muerta a la puerta de un hospital. Lo tenía trabajando como un esclavo. Eso es lo que buscan con personas que están fuera de la legalidad.
Por eso el arraigo no solamente es positivo, sino que es una necesidad a día de hoy. El arraigo no es un privilegio, es un instrumento, es una herramienta en base a la regularización de todas esas personas, que ayuda a su integración y que además permite que salgan de esa oscuridad, que salgan de esa vulnerabilidad de la que algunos explotadores se aprovechan para que trabajen como esclavos en el pleno siglo XXI.
Por eso creemos que no solamente el arraigo es positivo, sino que hay que abordar ya esa ILP que pide una regularización de todas aquellas personas migrantes que se encuentran en este momento en el Estado, que llegue cuanto antes y además en base a cinco razones que yo creo que son de sentido común y que lo repiten las organizaciones que han propuesto esta ILP o que han activado esta ILP.
En primer lugar, es un caso demasiado importante, demasiado grande, más de 500.000 personas que se encuentran en una situación irregular dentro del Estado.
En segundo lugar, es una medida decente, hace de este Estado un Estado mejor, un Estado más digno, más democrático, más ejemplar.
En tercer lugar, y eso incluso a los sectores más neoliberales o más conservadores les debería interesar, es un beneficio para el conjunto, también en términos económicos.
En cuarto lugar, es que fortalece la seguridad sanitaria, tanto de esas personas como del conjunto de la sociedad.
Y en quinto lugar, no sería la primera vez, se ha hecho en muchas ocasiones y es tiempo de hacerlo para sacar a todas esas personas de la oscuridad y darles derechos e igualdad.
Y como decía, que haría de España un Estado mucho más decente y mucho más digno.
Señalaba con anterioridad que su propuesta y sus propuestas que traen esta semana se basan en mentiras, en bulos que están desmentidos por la academia. Y de igual forma, que las personas migrantes aportan mucho más de lo que reciben en nuestras sociedades. Y miren, no nos engañemos.
Usted hablaba en ese delirio que ha repetido, y voy acabando, señora presidenta, de invasiones. No, la verdad es que Europa demográficamente necesita, necesita a esas personas migrantes. Y hay dos maneras de hacerlo. O con vías legales y seguras, acabando con ese cementerio que se ha convertido en el Mediterráneo y el Atlántico, o hacerlo de una manera indigna.
Yo creo que hay que abordar el asunto en toda su totalidad y buscar vías seguras, vías legales para que todas esas personas puedan llegar en seguridad a Europa y se puedan integrar sin ningún problema en nuestras sociedades.
Mientras tanto, señores del Partido Socialista y de partidos que apoyan al Gobierno, hay que tomar medidas para acabar con los delitos de odio y con la difusión de bulos que tratan de estigmatizar y de señalar a personas que viven entre nosotros.
Muchas gracias.
Muchas gracias, señor Iñarritu. Por el Grupo Parlamentario Republicano tiene la palabra el señor Salvador Ayduc.
Gracias Presidenta, buena tarde a todos. Hoy votamos en contra de una proporción de ley que es un auténtico excremento, tal como suena. Lo peor de la agenda ultraderechana, europea, catalana y española.
Volan restringir el arreglamento laboral, estigmatizar colectivos sinceros y, hasta y todo, de portar residencias legales con criterios arbitrarios y raciales.
Desde la izquierda republicana, digamos claro, ninguna ley se ha de basar en el origen. Es tan elemental. Ninguna ley se ha de basar en el origen.
Los delitos son individuales, no son nunca colectivos. No son nunca colectivos. Y los castigos pueden ser, por el Código Penal, individuales, pero nunca pueden ser colectivos. Es tan elemental eso.
Vox, como decía antes los compañeros, manipula las estadísticas y silencia lo que es esencial. Me explico. Por ejemplo, vamos a hacer estadística. El 97,9% de los delitos sexuales se cometen hombres, los cometen hombres según el Instituto Nacional de Estadística en el año 2021. ¿Qué tenemos que hacer? ¿Deportar a todos los hombres? ¿Seguir esta regla de tres? ¿Una estupidez tan grande como esta? ¿Por qué no hacemos una estadística para el nivel económico? Mira, les diré una cosa, una cosa que como españoles que son y lo entenderán bien.
En Cataluña, en los años 60 y 70, ya existía una extrema derecha. La extrema derecha siempre ha existido a todo alrededor. Yo recuerdo que había gente de extrema derecha catalana que decía a las presas se habla castellano, a las presas se habla español, no se habla catalán. Son los cernegos, los que vienen aquí a robarnos, a violar. Eso es lo que decían sobre los nacionales, esta gente tan española que piensa que esto de la patria es como una inyección que se inyecta hipodérmicamente y dura durante siglos cuando hay una persona que se llama Demer que supongo que tiene orígenes holandeses no sé si esta agulla hipodérmica va a fallar aquí las estadísticas que hacen servir son otras estúpidas.
La estadística principal, según la cual, y esta también vale, el 98% de la población migrante no comete ningún delito. Repito, el 98% de la población migrante no comete ningún delito. ¿Hace ningún delito? Esta estadística no les interesa. Vamos a buscar, a ver qué encontramos, que siempre pueden encontrar cosas.
El mito del efecto crida. En el año 2008 ya no venía nadie, la gente marchaba. ¿Por qué? Porque no había trabajo. Es que los inmigrantes son inmigrantes, pero no son imbéciles. Cuando van a un lugar, igual que los españoles, cuando iban a un lugar, iban a trabajar. Y si no hay trabajo, no van. Igual que dentro de un mercado único como Estados Unidos, pues si una feina a Detroit, la gente se va a feinar a un otro estado. Y esto es fundamental, es que realmente yo a veces dudo de su coeficiente intelectual, porque realmente es que es ridículo todo plegado. Seguimos.
Ustedes lo que quieren es dividir la clase trabajadora por su origen, evitando lo que es la lucha de clases. Si faltan becas de almacenamiento, la culpa es del moro, del sudaca. Nunca la culpa es de los de abajo, que hay suficiente becas de almacenamiento. Y así podríamos estar diciendo una cosa tras la otra, pero a ustedes les interesa, les interesa que no haya lucha de clases, les interesa las luchas identitarias. Esta es la realidad.
Pero dejemos centrarme, y ahora viene la parte que no me gustará tanto, en los grupos del gobierno y de los que estaban en el gobierno.
Y los señores de Podemos, sobre todo, porque ahora son los que están paralizando la ILP de regularización ya. La están paralizando porque dicen que hay transferencias a una comunidad autónoma que se llama Cataluña, que para mí es una nación. Pues sí, igual que hay la inspección de trabajo transferida, queremos la transferencia en temas de inmigración. Ya está, sencillo.
Digo esto, es una excusa lamentable para hacer una de las cosas más importantes y más honorables que puede hacer un gobierno que se autonomena de izquierdas, que es que una ILP una ILP que se va a presentar en el 2020.