En el nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión. Continuamos con el trabajo de la Segunda Subcomisión Mixta de Presupuestos para el año 2026. Saludamos a los senadores Ricardo Lagos Weber y Javier Macaya, y al diputado señor Luis Cuello. Vamos a comenzar con la exposición de la Partida 11, correspondiente al Ministerio de Defensa Nacional. La ministra de Defensa Nacional, señora Adriana Delpiano, viene en camino; tengo entendido que se encuentra junto a los Comandantes en Jefe del Ejército y de la Fuerza Aérea. Comenzaremos y ellos se plegarán a la reunión; ya conversamos, esa será la forma de proceder.
Saludamos al Subsecretario de Defensa, señor Ricardo Montero; a la jefa de la División de Administración y Finanzas, señora Lisette Rebolleo; al Subsecretario para las Fuerzas Armadas, señor Galo Eidelstein; al jefe de la División de Presupuestos y Finanzas, señor Jan Zuil; y al asesor legislativo, señor Roberto Sáez.
El Comandante en Jefe del Ejército de Chile viene en camino; lo saludaremos a su llegada. Se encuentra presente el Comandante en Jefe de la Armada, almirante señor Fernando Cabrera, y el Director General de Finanzas, contraalmirante señor Klaus.
También la Fuerza Aérea; el comandante en jefe viene con la ministra. Y el Estado Mayor Conjunto; no sé si está o está también en la comitiva. Aquí está. Entonces, el comandante de aviación, señor Emilio Herrera. De la Dirección de Presupuestos, tenemos a la jefa del sector Justicia, Defensa y Relaciones Exteriores, señora Milena Tomasov; a las analistas del sector, señoras Carla Díaz y Mariela Orellana; y al señor Alfonso Riquelme.
De acuerdo a lo expuesto, ofrecemos la palabra al señor subsecretario de Defensa, señor Ricardo Montero, para comenzar a exponer la Partida 11, correspondiente al Ministerio de Defensa Nacional.
Muchas gracias, presidente. Saludar, por su intermedio, a los senadores, a los diputados y a las personas que nos acompañan el día de hoy. Muchas gracias por la disposición. Efectivamente, la ministra ha estado acompañando al Presidente de la República hace algunas horas en Colchane. Está con los comandantes en jefe del Ejército y de la Fuerza Aérea y, por fuerza mayor, se atrasó un poco el vuelo; viene en camino. Muchas gracias por la comprensión, presidente.
Haré una descripción general de la partida y, luego, parte del equipo que nos acompaña —el subsecretario y también el almirante de la Armada— explicará los detalles que correspondan. Lo primero: la Partida 11 consta de 16 capítulos y 18 programas. Es un presupuesto que, como ha sido durante esta gestión, es de continuidad. Lo que presentamos hoy es un presupuesto del orden de los 2.400 millones de dólares, que representa un aumento de 0,3% respecto del año pasado. Es importante despejar inmediatamente que, como sabemos, hubo una aprobación de presupuesto el año pasado y, posteriormente, un recorte presupuestario que afectó a Defensa. La referencia que se toma para este 0,3% es el presupuesto primitivo que se aprobó el año pasado. Este 0,3% representa un incremento del orden de 7,9 millones de dólares y, como señalé al inicio, se trata de un presupuesto de continuidad, con este pequeño aumento, y donde el 73% se dirige a gasto en personal.
Quisiera relevar, además, que si bien no es parte de esta partida, en la Partida 50 del Tesoro Público se considera el aporte basal por un total de 490 millones de dólares en la presentación de esta Ley de Presupuestos, que, en su momento y en la instancia que corresponda, detallará el Ministerio de Hacienda.
Sin más, presidente, paso la palabra al Subsecretario para las Fuerzas Armadas y a su equipo, liderado por Jan Zuil, Jefe de la División de Presupuestos y Finanzas.
Gracias, Subsecretario Montero. Le damos la palabra al Subsecretario Galo Edelstein. Tiene la palabra, Subsecretario.
Muchas gracias, señor Presidente. Saludo también a los senadores y diputados y al resto de invitados. Efectivamente, como señalaba el Subsecretario Montero, el presupuesto del próximo año tiene una característica fundamental: dentro de las restricciones que todos conocemos, pudimos negociar y conversar con la Dirección de Presupuestos, y la base de este presupuesto será el presupuesto primitivo que se postuló para este año y no el presupuesto con el recorte, lo que permite cumplir los planes y objetivos fijados para la Defensa Nacional. Esto es consistente con los tres presupuestos anteriores, en los que nos hemos preocupado de continuar con la financiación de las labores de la Defensa Nacional, de acuerdo con sus planes y objetivos.
En ese marco, es importante destacar que se logró presentar un presupuesto con un aumento de 0,3% en términos generales, sumando el presupuesto en pesos y en dólares. Otro dato relevante desde el punto de vista global es que también hubo algunas rebajas.
Dentro de este aumento global del 0,3%, se registran rebajas fundamentalmente menores, salvo una bastante importante: el presupuesto en dólares se redujo en 6 millones. Es relevante precisar que estas bajas no afectan en absoluto las capacidades, pues provienen de proyectos ejecutados durante 2025 que, al tratarse de inversiones específicas, no se repetirán en 2026. Como ejemplo, en el Instituto Geográfico Militar este año se renovó mobiliario, lo que naturalmente no se hará nuevamente el próximo año. En el Servicio Aerofotogramétrico de la Fuerza Aérea se adquirieron una cámara fotográfica especializada para toma de imágenes a gran altura y un espectrorradiómetro, equipamientos que tampoco se volverán a comprar. En la Subsecretaría de Defensa, por ejemplo, este año se realizará el encuentro de Ministros de Defensa del Pacífico Sur, actividad que no se repetirá el año siguiente. Estas situaciones explican algunas bajas, pero no hubo reducciones en inversiones planificadas ni en capacidades de defensa.
Este cuadro, que ustedes ya conocen y que hemos presentado en varias oportunidades, muestra la distribución del presupuesto no por institución, sino desde el punto de vista contable. El componente más grande es el gasto en personal, con un 73%. Esto es importante, y lo reiteramos en cada reunión, porque deja poco margen para otros tipos de gasto. Además, el ítem que le sigue en tamaño, bienes y servicios de consumo (Título 22), representa un 19%, parte del cual está directamente asociado al personal (alimentación, vestuario, etc.). Por lo tanto, ese 73% es en realidad algo mayor si consideramos esos gastos asociados al personal. Luego vienen las transferencias de capital y las transferencias corrientes, con un 3% cada una, donde se incluyen la compra de capacidades y equipamiento; en las transferencias corrientes también están las remuneraciones, entre otros. En los rubros menores figura lo íntegro al Fisco, con un 3% —principalmente el IVA y otros conceptos—, y la adquisición de activos no financieros, que también corresponde a equipamiento, software, en fin. Así se presenta el 100% del gasto.
Quiero recalcar que el aumento del 0,3% no está distribuido arbitrariamente. En el caso del Ejército, hay dos grandes ítems: primero, respecto de los conscriptos, la asignación se incrementó en 2025 en un 50%, y para el próximo año se aumentará a un 75% respecto del monto del año anterior; esto representa 5.500 millones. Segundo, se está desarrollando un sistema informático para la gestión de remuneraciones, con 454 millones adicionales.
En la Armada, como ya se había anunciado, se modificó la planta de Litoral del escalafón de oficiales para reforzar las tareas de seguridad y vigilancia; son 125 oficiales, y su implementación se hará por etapas: ya se está ejecutando la etapa 3 de un total de 7. Asimismo, el próximo año se realizará el ejercicio RIMPAC, el mayor ejercicio naval del mundo, fundamentalmente con los países del área del Pacífico y algunos otros.
En la Armada, hay una renovación importante de equipamiento informático por 542 millones de pesos. En el caso de la Fuerza Aérea, se considera el Centro Espacial Nacional, con 2.268 millones para el próximo año, e inversiones en infraestructura por 1.490 millones. En la Dirección General del Territorio Marítimo, la Directemar, se encuentra la etapa final de la construcción de un hangar en Concón, correspondiente al proyecto Gaviota para helicóptero, por 978 millones.
En la DGMN, Dirección General de Movilización Nacional, se aumentó nuevamente el pasaje para los conscriptos que viven en zonas alejadas: ya había un incremento el año pasado de más de 400 millones y ahora se agregan 102 millones adicionales. Además, se contempla un programa de digitalización del proceso de reclutamiento por 97 millones y equipamiento informático por 130 millones. A esto se suman otros gastos derivados del proceso de mejora de los beneficios y de la situación de los conscriptos implementado este año a través de 40 medidas, muchas de las cuales requerirán implementación por parte de la DGMN.
En la DGAC, Dirección General de Aeronáutica Civil, hay una inversión relevante en seguridad aeroportuaria de 35.000 millones de pesos. Es importante señalar que este año fue de 23.000 millones; para el año 2026 aumenta a 35.500 millones, distribuidos en 31 proyectos de seguridad aeroportuaria. Ahí se incluyen carros de incendio, ropa de protección contra incendios, equipamiento en general y equipos ERA (de respiración autónoma), entre otros ítems. Asimismo, se considera una transferencia al MOP, Ministerio de Obras Públicas, asociada a concesionarios y pago de IVA, por alrededor de 4.000 millones de pesos. También se financia a los estudiantes egresados de la Escuela de Tránsito Aéreo que trabajarán como controladores de tránsito aéreo, lo que forma parte de los acuerdos alcanzados con la asociación de funcionarios de la DGAC.
Adicionalmente, hay un aumento importante en el Estado Mayor Conjunto, orientado a fortalecer el Programa Antártico y asegurar temas de infraestructura y funcionamiento, por 1.300 millones de pesos. En general, esos son los principales incrementos; el resto se mantiene, y, como señalaba, las bajas son acotadas. Podemos entregar antecedentes adicionales según las consultas.
Eso sería como intervención general. Me gustaría pasar la palabra ahora al director de la División de Finanzas de nuestra Subsecretaría para revisar el presupuesto en mayor detalle.
Gracias, subsecretario. Tiene la palabra el Director de Finanzas.
Muchas gracias, Presidente. Por su intermedio, un cordial saludo a toda la Comisión y a quienes nos acompañan hoy. Como bien nos comentó nuestro Subsecretario de Fuerzas Armadas, iniciaremos la revisión en detalle. Antes, desglosaremos brevemente el resumen del presupuesto, ahora desde la perspectiva de los subtítulos y la naturaleza del gasto. En ese sentido, como se visualiza ahí —y de mejor forma lo transparentamos acá—, el crecimiento por naturaleza del gasto se explica fundamentalmente…
Perdón que lo interrumpa. Vamos a suspender por cinco minutos porque viene llegando la ministra.
También hay una renovación importante de equipo informático en la Armada por 542 millones de pesos. En el caso de la Fuerza Aérea, se considera el Centro Espacial Nacional, con 1.268 millones para el próximo año, e inversiones en infraestructura por 1.490 millones. En la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante (DIRECTEMAR), se encuentra la etapa final de la construcción de un hangar en Concón, del proyecto Gaviota para helicópteros, por 978 millones.
En la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), se incrementó nuevamente el pasaje para los conscriptos que viven en zonas alejadas. Ya había habido un aumento el año pasado de más de 400 millones; ahora se agregan 102 millones adicionales. Asimismo, hay un programa de digitalización del proceso de reclutamiento por 97 millones y la adquisición de equipo informático por 130 millones. Además, derivado del proceso de mejora de los beneficios y condiciones de los conscriptos implementado este año mediante 40 medidas, la DGMN deberá implementar varias de ellas.
En la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), hay una inversión relevante en seguridad aeroportuaria de 35.000 millones de pesos. Es importante señalar que este año fue de 23.000 millones; para el año 2026 aumentará a 35.500 millones de pesos, en 31 proyectos en el ámbito de la seguridad aeroportuaria. Allí se consideran carros de incendio, ropa de protección contra incendios, equipamiento en general y equipos ERA (equipos de respiración autónoma), entre otros ítems. También se contempla una transferencia al Ministerio de Obras Públicas, por concepto de concesionarios y pago de IVA, por 4.000 millones de pesos. Adicionalmente, se financia a los estudiantes egresados de la Escuela de Tránsito Aéreo que se incorporarán como controladores de tránsito aéreo, parte de los acuerdos alcanzados con la Asociación de Funcionarios de la DGAC.
Asimismo, hay un aumento importante en el Estado Mayor Conjunto, orientado a fortalecer el Programa Antártico y asegurar infraestructura y funcionamiento, por 1.300 millones de pesos. En general, esos son los principales incrementos; el resto se mantiene, y respecto de las disminuciones, que son acotadas, podemos entregar más antecedentes según las consultas.
Eso sería como intervención general. Me gustaría pasar la palabra ahora al Director de la División de Finanzas de nuestra Subsecretaría para ver el detalle.
Gracias, subsecretario. Tiene la palabra el Director de Finanzas.
Muchas gracias, presidente. Por su intermedio, un cordial saludo a toda la Comisión y a quienes participan hoy. Como bien nos comentó nuestro Subsecretario para las Fuerzas Armadas, vamos a comenzar la revisión más en detalle. Antes, desglosar brevemente el resumen del presupuesto desde la perspectiva de los subtítulos, según la naturaleza del gasto. En ese sentido, como se aprecia en la lámina, el crecimiento por naturaleza del gasto se explica fundamentalmente…
Perdón que lo interrumpa: vamos a suspender por cinco minutos porque viene llegando la ministra.
Ministra, usted está informada telefónicamente por la asesora y jefa legislativa. Estábamos tratando de ganar tiempo para que usted pudiera estar presente. Presidente, por su intermedio: en algún momento me gustaría subrayar los aspectos que me parecen más importantes de este presupuesto, pero no es necesario abordarlo ahora; lo haré cuando se indique. Perfecto, ministra, muy amable. Y faltaría el Comandante en Jefe del Ejército, que está por llegar; también viene en camino. Ya. Entonces, estábamos comenzando con el senador Galilea.
Gracias, presidente. Quizás no es para hacer tiempo, pero, ya que no ha llegado el Comandante en Jefe del Ejército y aprovechando que recién llegó la ministra, quisiera hacer una pregunta de contexto en materia de defensa. Entiendo que el último documento de Política de Defensa Nacional es del año 2020 y, corríjame, en general cada gobierno hace una actualización de esa política, esfuerzo bien grande que Chile empezó a realizar desde los años 95, 97, con el presidente Frei y el ministro de Defensa Edmundo Pérez Yoma. Creo haber leído todo el trabajo que significó, y fue un gran avance: socializar, compartir y dar a conocer cuáles eran los objetivos de la defensa nacional en cada una de sus ramas.
Pregunto por qué no se ha actualizado en este gobierno, porque muchos de los temas que probablemente saldrán a colación —capacidades estratégicas, fondos de contingencia, cuáles son exactamente los desafíos de la defensa— dependen de ello. Si la orientación va por el lado de la inteligencia artificial, de los drones, por dónde; y, en definitiva, dónde está aparejado el presupuesto con el Plan Nacional de Defensa. Si se prevé que parte de las Fuerzas Armadas destinen un contingente importante, por ejemplo, al resguardo de fronteras, eso debe ir asociado a presupuesto, a capacitación de personal, a fondos que no sé si salen de Defensa, de Interior, o de dónde. Esa mirada global nos ayudaría a comprender mucho mejor cómo ve el Gobierno su plan, dónde están las orientaciones, más allá de los presupuestos que suponemos higiénicos —asegurar sueldos, asegurar todo el sistema de salud de las Fuerzas Armadas, en fin, las cosas más típicas—, y enfocarnos en los desafíos de dónde debemos estar en términos de defensa nacional, que es lo que a través de la política nacional se logra.
Eso no ha sido explicitado por este gobierno aún; ya estamos terminando. ¿Es porque no se pudo? Me encantaría saber por qué ocurrió esto, porque ya tenemos cinco años desde la última actualización. Quería dejar planteado ese tema, presidente; si la ministra o alguno de los subsecretarios pudiera abordarlo, lo agradecería mucho.
Si me permite, presidente… —Antes, ministra, porque también hay un parlamentario que está pidiendo la palabra: el diputado Sánchez.
Muchas gracias, presidente. Saludar a todos; saludar a la ministra, por supuesto, a los subsecretarios, a todo el equipo, al Comandante en Jefe de la Armada…
Ministra, usted está informada telefónicamente por su asesora y jefa legislativa sobre cómo estábamos tratando de ganar tiempo para que usted pudiera estar presente. ¿Cómo estamos, Presidente, por su intermedio? En alguna oportunidad me gustaría subrayar los aspectos que me parecen más importantes de este presupuesto, pero no es necesario hacerlo ahora; lo haré cuando se indique. Muchas gracias.
Falta el Comandante en Jefe del Ejército, que está por llegar; viene en camino. Bien, estábamos comenzando con el debate... Perdón: tiene la palabra el senador Galilea.
Gracias, Presidente. Quizás no es para hacer tiempo, pero ya que no ha llegado el Comandante en Jefe del Ejército y aprovechando que recién llegó la Ministra, quería hacer una pregunta de contexto en el tema de Defensa. El último documento de Política de Defensa Nacional, entiendo, es del año 2020. Y, corríjame, en general cada gobierno hace una actualización de la Política de Defensa Nacional, que fue un esfuerzo bien grande que Chile empezó a hacer desde 1995 o 1997, con el Presidente Frei y el ministro de Defensa Edmundo Pérez Yoma. Creo haber leído todo el trabajo que significó y que fue un gran avance en términos de socializar, compartir y dar a conocer cuáles eran los objetivos de la defensa nacional en cada una de sus ramas.
Pregunto por qué no se ha actualizado en este gobierno, porque muchos de los temas que probablemente salgan a colación tienen que ver con las capacidades estratégicas, con los fondos de contingencia, con cuáles son exactamente los desafíos de la defensa: si van por el lado de la inteligencia artificial, de los drones, de otros ámbitos. En fin, dónde está aparejado el presupuesto con el Plan Nacional de Defensa. Si parte de las Fuerzas Armadas van a estar, o se prevé que estén, con mucho contingente, por ejemplo, en el cuidado de fronteras. Eso va aparejado de presupuesto, de capacitación de personal, de fondos que no sé si salen de Defensa, de Interior; de dónde salen. Creo que esa mirada global nos ayuda, o nos ayudaría, a comprender mucho mejor cómo ve el Gobierno, cuál es su plan y dónde están las orientaciones, más allá de los presupuestos que suponemos higiénicos para asegurar sueldos, asegurar todo el sistema de salud de las Fuerzas Armadas, en fin, las cosas más típicas; pero los desafíos, en términos de dónde tenemos que estar en defensa nacional, es lo que a través de la política nacional se logra. No ha sido explicitado por este gobierno aún; ya estamos terminando. ¿Es porque no se pudo? Me encantaría saber por qué ocurrió esto, porque ya tenemos cinco años desde la última actualización.
Quería dejar planteado ese tema, Presidente. Si la Ministra o alguno de los subsecretarios pudiera tocarlo, lo agradecería mucho.
Si me permite, Presidente. Antes, Ministra, porque también me está pidiendo la palabra el diputado Sánchez.
Muchas gracias, Presidente. Saludar a todos; saludar a la Ministra, por supuesto, a los subsecretarios, a todo el equipo, al Comandante en Jefe de la Armada.
...de la Fuerza Aérea. A ver, escuchamos recién una exposición por parte del subsecretario respecto de que —corríjame si me equivoco— el aumento general del presupuesto para la Defensa sería de 0,3%. Usted ya me conoce a estas alturas: yo siempre soy muy directo. La información que manejan ustedes es más que la que tengo yo, pero algo tengo. Esto ha sido tema de discusión en otras ocasiones y no corresponde acá engañarnos respecto de cuál es la situación presupuestaria real de las Fuerzas Armadas.
Solo como muestra, lo que pudimos revisar con mi equipo respecto de la ejecución presupuestaria de la Armada de Chile. En algunos aspectos, por ejemplo, en transferencias corrientes, se observa que los presupuestos asignados ya estaban ejecutados a agosto de este año, y que en el presupuesto que se propone el ajuste a esos ítems sería cero: se mantendría todo igual. Entonces, la pregunta obvia es por qué el Gobierno plantea mantener igual un presupuesto que a agosto ya estaba totalmente ejecutado. Esto está en el subtítulo 24 de Transferencias Corrientes, que dice relación con transferencias del Gobierno Central, la DGMN, la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas, otras entidades públicas, etcétera.
Para qué hablar de lo ocurrido este año con el subtítulo 21, Gastos en Personal. Esto es transversal a todas las instituciones; no es solo la situación de la Armada. En la Armada han ocurrido situaciones que han sido materia de oficios que yo he enviado. No sé si vale la pena, o si es prudente, entrar en demasiado detalle al respecto, pero confío en que todos los que están sentados en la mesa saben a lo que me refiero. Los recursos no son suficientes, evidentemente.
Y, con un presupuesto de 0,3, la primera pregunta que me surge —yo soy un humilde abogado no más— es si ese 0,3 es por sobre la inflación o sin considerar la inflación. Porque, si es sin considerarla, ni siquiera estamos hablando de continuidad: estaríamos perdiendo poder adquisitivo para el próximo año. Y si la considera, con suerte nos mantenemos en el mismo nivel, con los mismos problemas que hemos tenido durante este año: presupuesto para petróleo, presupuesto para sueldos, para renovación de equipo, para el cumplimiento de las obligaciones excepcionales en los estados de excepción y el resguardo de la frontera norte, el Fondo de Capacidades Estratégicas, que ha sido tema de noticia en los últimos días. Aquí no son elucubraciones ni cosas que se le ocurren a uno: es parte de lo que está presentando la prensa. Entonces, tenemos que hacernos cargo de la realidad.
Más que pintar una imagen de los avances que se vienen para el próximo año con el presupuesto que se propone, digamos las cosas como son y conversemos sobre la realidad. Conversemos respecto de qué se va a hacer en esos aspectos que son fundamentales. En ese sentido, creo que hay una responsabilidad por parte del Ejecutivo de sincerar cómo vamos a corregir lo que no funcionó bien durante este año. Mi invitación a la Ministra y a sus subsecretarios es que puedan colaborarnos para dar más tranquilidad y claridad a todos los diputados y senadores aquí presentes —porque no todos somos miembros de la Subcomisión Mixta—, de que el presupuesto que estamos discutiendo da respuesta a los problemas muy evidentes que hemos visto durante este año. Muchas gracias.
Gracias, diputado. Tiene la palabra el diputado Cuello.
Muchas gracias, presidente. Un saludo, por cierto, a la señora Ministra, a los Comandantes en Jefe y a los subsecretarios. Presidente, si no me equivoco —usted me corrige—, entendí que todavía no estaban culminadas las respectivas exposiciones de los subsecretarios. Entiendo que se proponga hacer un contexto general y me parece muy pertinente; sin embargo, creo que entrar a la discusión antes de conocer la exposición invierte el orden, a mi juicio. Puedo equivocarme, pero sugiero, presidente, que podamos escuchar a los subsecretarios, al Ministerio, a la Ministra.
…de la Fuerza Aérea. A ver, escuchamos recién una exposición por parte del Subsecretario respecto de que —corríjame si me equivoco— el aumento general del presupuesto para la Defensa sería de 0,3%. Ya. Usted ya me conoce a estas alturas; yo siempre soy muy directo. La información que tienen ustedes es más que la que tengo yo, pero algo de información tengo. Esto ha sido tema de discusión en otras ocasiones en el pasado, y creo que no es la instancia para engañarnos respecto de la situación presupuestaria real de las Fuerzas Armadas. Como botón de muestra, revisamos con mi equipo la ejecución presupuestaria de la Armada de Chile. En algunos aspectos —por ejemplo, en lo relativo a transferencias corrientes— ahí se observa que los presupuestos asignados estaban ya ejecutados a agosto de este año, y que en el presupuesto que se propone el ajuste a esos ítems sería cero: se mantendría todo igual. Entonces, la pregunta obvia es por qué el Gobierno plantea mantener igual un presupuesto que a agosto ya estaba completamente ejecutado.
Como les decía, esto está en el subtítulo 24, Transferencias Corrientes, que dice relación con transferencias del Gobierno Central, la DGMN, la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas, otras entidades públicas, etcétera. Qué decir de lo ocurrido este año con el subtítulo 21, Gastos en Personal. Esto es transversal a todas las instituciones; no es solo la situación de la Armada. En la Armada han ocurrido ya algunas situaciones que han sido materia de oficios que he enviado. No sé si valga la pena, o si sea prudente, entrar en mucho detalle al respecto, pero confío en que todos los que están sentados en la mesa saben a qué me refiero.
Y los recursos no son suficientes, evidentemente. Frente a un presupuesto de 0,3, la primera pregunta que me surge —yo, que soy un humilde abogado— es si ese 0,3 es por sobre la inflación o sin considerarla. Porque, si es sin considerar la inflación, ni siquiera estamos hablando de continuidad; estamos hablando de pérdida de poder adquisitivo para el próximo año. Y si la considera, con suerte nos mantenemos donde mismo, con todos los problemas que hemos tenido durante este año: presupuesto para combustibles, para sueldos, para renovación de equipos, para el cumplimiento de las obligaciones excepcionales establecidas en los estados de excepción y el resguardo de la Frontera Norte, el Fondo de Capacidades Estratégicas, que ha sido tema incluso de noticia en los últimos días. No son elucubraciones ni cosas que se le ocurren a uno; es parte de lo que está presentando la prensa.
Creo que tenemos que hacernos cargo de la realidad. Más que pintar una imagen de los avances que vendrían para el próximo año con el presupuesto propuesto, digamos las cosas como son y conversemos sobre la realidad: qué se va a hacer en esos aspectos fundamentales. En ese sentido, creo que hay una responsabilidad del Ejecutivo de sincerar cómo vamos a corregir las cosas que no funcionaron bien durante este año. Mi invitación a la Ministra y a sus Subsecretarios es que puedan colaborarnos para tener mayor tranquilidad y claridad todos los diputados y senadores aquí presentes —no todos somos miembros de la Subcomisión Mixta—, de modo de contar con la tranquilidad de que el presupuesto que estamos discutiendo da respuesta a los problemas muy evidentes que hemos visto durante este año. Muchas gracias.
Gracias, diputado. Tiene la palabra el diputado Cuello.
Muchas gracias, Presidente. Un saludo a la señora Ministra, a los Comandantes en Jefe y a los Subsecretarios. Presidente, si no me equivoco —y usted me corrige—, entendí que aún no estaban culminadas las respectivas exposiciones de los Subsecretarios. Entiendo que se proponga un contexto general y me parece muy pertinente; sin embargo, entrar a la discusión antes de conocer dichas exposiciones invierte, a mi juicio, el orden debido. Puedo estar equivocado, pero sugiero, Presidente, que podamos escuchar primero a los Subsecretarios, al Ministerio, a la Ministra.
…y luego poder tener un debate, un intercambio. Gracias, Presidenta. Gracias, diputado Cuello. Vamos a escuchar las dos últimas intervenciones. Aprovecho de saludar al presidente de la Cámara de Diputados, que está participando en esta subcomisión. Diputado Castro, tiene la palabra.
Gracias, Presidenta. Saludo a la ministra, a los subsecretarios, a los comandantes y a todas las personas aquí presentes. Son dos materias específicas las que deseo plantear, y estimo útil dejarlas como antecedente antes de la exposición, en respuesta también a lo señalado por el diputado Cuello.
Primero, en julio de 2025 oficiamos, junto a la diputada Camila Flores, al subsecretario de Defensa mediante los oficios N.os 11.257 y 11.258, solicitando los fundamentos respecto de las reasignaciones presupuestarias efectuadas durante el año y, en particular, cómo estas impactaron en la fiscalización de la DGAC y de Directemar. Esto es fundamental para la discusión, porque no olvidemos que este ministerio asumió —puedo estar equivocado, ministra— cerca del 10% del ajuste en la reasignación de recursos. Podemos estar conversando sobre lo mismo, pero no sabemos cómo afectó específicamente a Directemar y a la DGAC. Es clave saberlo para asegurar que estos organismos funcionen adecuadamente. Ese es el primer punto.
Segundo, y sé que usted lo está siguiendo de cerca, ministra —pero es bueno dejarlo consignado para los demás diputados y senadores—, pocas veces en la Ley de Presupuestos se pueden presentar propuestas que generen un retorno tan claro. La DGAC tiene la posibilidad de aumentar las horas de personal en algunos aeropuertos. Esto implica, por cierto, un mayor gasto en personal y horas, pero también un retorno muy relevante por el aumento en el volumen de tasas de embarque y otros ingresos asociados a los mayores vuelos. Le haré llegar a usted, a la comisión y a los colegas un estudio que muestra, por ejemplo, que si se incorporaran más horas para habilitar aproximadamente mil vuelos adicionales en el aeropuerto de La Serena, el gasto sería del orden de 4,5 millones de dólares, con un retorno cercano a 9 millones. Es decir, el retorno es muy significativo y de corto plazo. Además, se potencia la conectividad con rutas entre regiones que hoy no tienen la misma demanda de pasajeros. Ojalá podamos resolver este tema antes del término de la tramitación de esta Ley de Presupuestos; sería un muy buen aporte para la próxima administración y para el país. Y, reitero, me preocupa lo primero para saber cómo se están cumpliendo esas funciones. Muchas gracias.
Gracias, diputado Castro. Tiene la palabra el diputado Romero.
Gracias, Presidenta. Presidenta, pensaba que me iba a dejar con cuello, que no me iba a dar la palabra. Mire, escuché con atención al subsecretario para las Fuerzas Armadas. Saludo a la ministra y a todas las autoridades de nuestras Fuerzas Armadas. El señor subsecretario señaló que en los últimos años la Defensa Nacional ha contado con 2.400 millones de dólares, y que la “gran sorpresa” para este año es un aumento de 0,3%. La verdad —y lo digo mirándolo a la cara a usted, subsecretario, y a las autoridades— es que esto constituye una falta de respeto a las Fuerzas Armadas, considerando el aumento de costos en todos los ámbitos.