Muy buenos días. En nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión.
Saludamos a la Comisión de Vivienda, a las señoras y señores senadores, y al Ministerio de Vivienda y Urbanismo; los presentaremos inmediatamente. Antes, la cuenta. Señor secretario, por favor.
Gracias, presidente. Ha llegado una comunicación de la Cámara Chilena de la Construcción con comentarios y propuestas respecto del proyecto de ley que modifica los textos legales que se indican para agilizar la obtención de permisos de urbanización y edificación. Además, desde la misma entidad se remitió el reporte del mes de septiembre sobre el plan de reconstrucción. Asimismo, han llegado sendas comunicaciones del señor Ministro de Vivienda y Urbanismo, respondiendo a oficios de esta comisión, con información referida al megaproyecto habitacional Vista Hermosa de Arica, abordándose además la situación general de la escrituración de viviendas sociales y antecedentes relativos a proyectos habitacionales y urbanos en desarrollo en las regiones del Maule y de Los Ríos. Dichos antecedentes ya fueron enviados a sus correos. Por otra parte, el alcalde de la comuna de San Joaquín, don Cristóbal Labra, remitió un correo exponiendo el caso de la toma 9-14 de dicha localidad, solicitando gestiones para incorporar ese proyecto en una eventual glosa presupuestaria. Eso es todo, señor presidente, la cuenta.
Muchas gracias, secretario. ¿Se ofrece la palabra sobre la cuenta? Entendiendo que tenemos dos puntos en tabla —y uno de ellos lo abordaremos con mayor profundidad con el Ministerio—, avancemos.
Saludamos a nuestros invitados. Hoy día tenemos dos puntos en tabla: primero, someter a votación en particular el proyecto de ley que prorroga el Plan de Emergencia Habitacional; entiendo que se ha presentado una indicación. En segundo término, continuaremos el análisis de la situación financiera del MINVU y sus servicios dependientes, su impacto en la ejecución presupuestaria de la cartera y, especialmente, en el Plan de Emergencia Habitacional, materia que comenzamos la semana anterior y que comprometimos continuar el día de hoy.
Tiene la palabra el senador Espinosa.
Gracias, presidente. Quisiera señalar que, en relación con los costos para el Estado y los temas de la reconstrucción de Valparaíso —que todos sabemos ha sido un proceso lento por factores absolutamente externos al propio Ministerio—, no se pretenda minimizar el trabajo realizado en regiones con el Plan de Emergencia Habitacional. El ministro es testigo: en la región que represento con orgullo en este Parlamento, el plan ya está cumplido en un 100% y vamos a llegar aproximadamente al 120%. Y eso ocurre también en muchas otras regiones, donde los esfuerzos de los SERVIU, las inmobiliarias y las entidades patrocinantes han dado buenos frutos.
En ese marco, y a petición de dirigentes de mi región, quisiera solicitar al Ministerio —y al ministro, presente en esta sesión— que se agilice la evaluación de unos comités que ingresaron hace poco en la comuna de Río Negro, provincia de Osorno, código RUCAN 190492, compuestos por los comités Creciendo Juntos y Chifín, los cuales fueron ingresados el 24 de septiembre del presente año. La petición es que se pueda agilizar la evaluación de estos proyectos para postularlos durante el presente año, en particular en el mes de noviembre. Probablemente estos proyectos requieran un subsidio adicional, cuestión que la DITEC deberá analizar.
Lo mismo solicito para el proyecto del Comité de Vivienda Nueva Ilusión de Osorno. Osorno ha sido una comuna que históricamente venía rezagada en el Plan de Emergencia Habitacional. En este gobierno, encabezado por el presidente Boric y el ministro Montes, Osorno ya ha obtenido más de 3.000 subsidios habitacionales, lo que es destacable en una comuna que tenía muchos problemas por la presencia de humedales y diversas situaciones que hicieron inviables terrenos cercanos al centro de la ciudad. Por ello, al igual que en los comités de Río Negro, agilizar la evaluación de estos proyectos es muy importante para que puedan ser presentados este año y continuar su tramitación.
He dicho, presidente, disculpe que me haya extendido. ¿Les parece que lo dejemos por escrito como oficio de la Comisión? Entendiendo que el Ministerio está presente y tomó nota, ¿habría acuerdo para el oficio? Así se envía la información a la Secretaría, para que el Ministerio también responda formalmente.
Gracias, senador. Saludamos al ministro Carlos Montes; a la subsecretaria Gabriela Algueta; a Carlos Araya, jefe de la División de Política Habitacional; a Vania Navarro, jefa de la División de Finanzas; a Patricia Soto, jefa del Departamento de Presupuestos; a la encargada del Plan de Emergencia Habitacional, Daniela Flisfisch; y a la asesora legislativa, Janet Tapia, quien siempre nos acompaña en la Comisión. Les agradecemos su presencia.
Vamos al primer punto en tabla, secretario, relativo a la tramitación del Plan de Emergencia Habitacional, conforme a lo acordado en la sesión anterior. Se presentó una indicación fuera de plazo; por tanto, necesitamos recabar la unanimidad para darle trámite. Secretario, tiene la palabra.
Presidente, efectivamente, el plazo de indicaciones vencía el día viernes, pero ayer la senadora señora Yasna Provoste presentó una indicación destinada a agregar un artículo transitorio que establece que el Ministerio de Vivienda y Urbanismo informará trimestralmente a las Comisiones de Vivienda del Senado y de la Cámara de Diputados sobre la ejecución anual del Plan de Emergencia Habitacional por regiones, identificando viviendas terminadas, viviendas en construcción y el gasto presupuestario ejecutado. La idea es establecerlo como un artículo transitorio de este proyecto. No estoy absolutamente seguro, pero tengo la impresión de que ese requisito de información ya está contenido en la ley y, por lo tanto, no tendría sentido acoger la indicación. Si mal no recuerdo, la obligación de informar trimestralmente está en la ley.
Le ofrecemos la palabra, Ministro, o a quien usted estime de su equipo, para una opinión sobre la indicación. Fue presentada anoche, fuera de plazo, pero más allá de lo procedimental nos interesa la observación del Ministerio respecto del fondo.
Gracias, Presidente. Buenos días a los miembros de la Comisión y a su equipo. Efectivamente, existe una norma en la Ley de Presupuestos que nos obliga a entregar esta información trimestralmente. Estamos disponibles para mantenerla en las mismas fechas, a fin de no estar cambiando calendarios. Se ha entregado trimestralmente y nos parece bien que se siga entregando así. Esto ya está regulado, pero ustedes decidirán.
Secretario.
Sí, Presidente. ¿Permitiríamos que ingrese la indicación para su tramitación? Efectivamente, el artículo 29 se refiere al tema, estableciendo que las disposiciones de los capítulos primero y segundo de la presente ley se evaluarán anualmente. El Ministerio de Vivienda y Urbanismo deberá remitir un informe a la Comisión Mixta de Presupuestos y a las comisiones de la Cámara y del Senado. Estas disposiciones tienen vigencia hasta el 31 de diciembre de 2025. Quizás por eso presentan esta indicación, toda vez que se va a prorrogar hasta 2029. Puede ser esa la idea.
¿Les parece primero recabar el acuerdo para acoger la indicación y luego ver el fondo, si fuera necesario? ¿Habría acuerdo, senadores? —Sí.
Bien. Secretario, ¿cómo procedemos? Debemos votar en particular, ya que en general ya se votó.
Exactamente, señor Presidente. Si les parece a los señores senadores, se podría votar, toda vez que el artículo único tenía solamente tres números, que ya vimos en sesiones pasadas: la idea es reemplazar la expresión “31 de diciembre de 2025” por “31 de diciembre de 2029”. También establecer que en la letra C...
Se indica que, mediante decreto supremo del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, suscrito también por el Ministro de Hacienda, se establecerán los criterios de adquisición de los respectivos terrenos y se definirán los aspectos operativos del presente artículo, comenzando por la necesidad de contar con diversas tasaciones de cada terreno. Se agrega que dicho instrumento tendrá vigencia durante todo el período de vigor de la presente ley. En la misma línea, el punto número 3 establece que la coordinación podrá ser efectuada por la Comisión.
Si le parece a la Comisión, se vota en particular el artículo único con sus tres numerales y la indicación de la senadora Provoste, en una sola votación. Senador señor Espinosa: A favor. Senador señor Sandoval: A favor. Señor Presidente: A favor. Con esto, queda despachado el proyecto.
Muy bien. Ministro, además está el compromiso de presentar otra iniciativa. Esta era más bien procedimental, de extender el plazo, pero queda pendiente presentar una propuesta más sustantiva, con modificaciones al plan, para un nuevo Plan de Emergencia Habitacional más ambicioso, con nuevas metas. Le damos la bienvenida a la senadora Provoste.
Ministro: Iba a señalar lo mismo que usted plantea. Creemos muy importante fijar plazos. Hay un equipo trabajando y ha habido reuniones para formular una propuesta de proyecto. No puede ser tan amplio como usted sugiere, pero sí debe abordar los temas nodales y fundamentales. Propongo que de aquí a noviembre tengamos una primera propuesta de texto, para poder entrar en diciembre y enero y, ojalá, tomar decisiones al respecto. Ya ha habido reuniones; algunos parlamentarios no han designado a su representante, por lo que sería bueno que todos participaran. Por parte del Ejecutivo está Janet Tapia, y esperamos avanzar lo antes posible, idealmente antes de noviembre.
Muy bien, Ministro. Pedimos a la señora Tapia que nos convoque formalmente, con fecha, para esas reuniones, a fin de enviar representantes de los equipos de la Comisión de Vivienda del Senado, que además han participado en distintas mesas técnicas para ir logrando acuerdos y tramitar los proyectos de ley. Le doy la palabra a la senadora Provoste e invito a sumar su voto. Fue acogida su indicación, senadora.
Senadora Provoste: Sí, señor Presidente. Agradezco la disposición de la Comisión para acoger nuestra indicación, que tenía un carácter meramente informativo. Nos parece que ello contribuye a la transparencia, mediante información trimestral. Solicito, si lo tienen a bien los colegas, sumar nuestro voto a favor en la indicación y, asimismo, a favor del proyecto en general y en particular.
Se agrega el voto de la senadora Provoste. Tiene la palabra la señora Janet Tapia.
Janet Tapia: Gracias. Tal como señaló el Ministro, hemos estado trabajando; nos hemos reunido con los asesores de las senadoras y senadores, y hemos pensado convocar también a otras personas sugeridas por ellos. Les hicimos llegar el documento inicial con la propuesta completa de proyecto y un comparado, para que nos hicieran comentarios y se pudieran ir agregando temas que han ido surgiendo. Hubo una reunión reciente del Consejo Asesor del Plan de Emergencia Habitacional, de la que salieron varias ideas que podrían incorporarse. El Ministro me ha pedido especialmente que convoquemos a Daniela, quien es parte del equipo, está a cargo del Plan de Emergencia y tiene amplia experiencia en la materia.
Muchas gracias, señora Tapia. Entonces, seguimos con los plazos que el Ministro ha mencionado para la presentación de un nuevo proyecto. Cumplimos lo acordado en la Comisión y valoro que fue transversal. Faltó solo, en este caso, la senadora Gatica, que está ausente, pero también firmó el proyecto y votó a favor. Esperamos que pronto vaya a Sala y lo podamos votar para seguir avanzando.
Pasamos al punto 2 de la tabla: continuar el análisis referido a la situación financiera del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, sus servicios dependientes, su impacto en la ejecución del presupuesto de la cartera y, especialmente, el Plan de Emergencia Habitacional. Se recuerda que el próximo martes 14 no habrá sesión de la Comisión.
Porque el próximo martes 14 sesiona la Subcomisión Mixta de Presupuestos de Vivienda, a la misma hora de esta comisión, la idea es que los integrantes de esta comisión puedan asistir; de alguna manera, esta sesión es preparatoria para aquella de la subcomisión mixta de vivienda. Senadoras y senadores, ¿les parece que el ministro exponga primero y luego abrimos preguntas y comentarios? Ministro, entiendo que hay una presentación. Efectivamente, nos acaban de entregar las presentaciones; las están cargando porque las estaban terminando, así que estarán en unos minutos en los tablets. Comencemos.
Gracias, presidente. En primer lugar, quiero entregar información adicional sobre la reconstrucción. Aquí tenemos un informe de Valparaíso del mes de septiembre, completo, y otro de la primera semana de octubre. Esto lo hacemos permanentemente y queremos seguir entregándolo a la comisión. Se los haremos llegar, porque es bien importante ir leyéndolo: ahí se ve la evolución de las cosas, lo que está más atrasado y lo que avanza más. Este informe nos permite autocontrolarnos y también que la propia comisión controle dónde están los problemas principales.
Por otra parte, queremos hacerles llegar un documento que creemos es bien importante, referido a entender qué es un subsidio asignado y qué es un subsidio pagado, conceptualmente. Hay copias suficientes para todos los miembros. Yo sugeriría invitar a Esteban Serey, abogado de la Universidad de Chile y magíster en Desarrollo Urbano, autor de este documento, que es muy útil para comprender la lógica con la cual operan los subsidios. Parte de eso lo explicaremos ahora.
Revisando la sesión pasada, fue una muy buena sesión; se vieron muchos temas, demasiados, y debemos centrarnos hoy, porque no podemos abordarlos todos. Lo central fue el Plan de Emergencia y su prórroga; eso estaba en la base, y, en ese marco, la situación financiera del plan: hasta qué punto dicha situación lo estaba afectando. También se incorporó un tema propuesto por Slaven Rasmussen, que es la comparación histórica sobre vivienda y costos. Preferiríamos no verlo hoy, porque hemos estado revisando el trabajo que él hizo —lo tengo acá— y, la verdad, no hay coincidencia: hay conceptos y antecedentes que no son comparables, porque responden a realidades distintas. El propio Slaven estuvo a cargo de esto en el Ministerio en la época de la ministra Patricia Poblete; tuvo que armar una base de datos que no se terminó y presentaba problemas.
Uno podría intentar comparar viviendas del período del presidente Aylwin —se recuerdan el plan acelerado—; entre 1990 y 1997-1998 se registraron alrededor de 700.000 viviendas, de muy pequeñas dimensiones y con condiciones distintas. Comparar esas viviendas con las de hoy no refleja bien la realidad. Incluso hay viviendas de 2006 incorporadas en las estadísticas que corresponden a unidades de 12 metros cuadrados; fueron las últimas. Sumar esas viviendas a otras exige decantar los datos, tanto respecto de las tipologías como de los costos, para hacerlos comparables.
Por eso preferimos darnos el tiempo para decantar y hacer comparables los antecedentes; en ese tercer tema no queremos entrar más allá de algunas referencias. Ustedes recordarán que hubo 40.000 subsidios entregados sin proyecto y que no tenían dónde adquirir viviendas, especialmente del DS 49. Además, en el ámbito rural, gran parte de los subsidios también se entregaron sin proyecto y no se pudieron ejecutar. La forma en que eso se incorpora en las estadísticas es fundamental para aclarar las cosas: todo el tema de mejoramiento y también la reconstrucción, porque en las reconstrucciones —el 27F en particular— hay realidades distintas; hay viviendas de mejoramiento y otras que hay que demoler y reconstruir completamente. Entonces, qué se suma y cómo se suma es algo que debemos revisar para hacer comparables las series y no generar distorsiones.
Nosotros, en todo este tiempo, hemos puesto el énfasis en lo principal: la meta del Plan de Emergencia, que es llegar a todas las...
Ministro Carlos Montes: …comunas de Chile; ese es nuestro tema: estamos en el 98% de las comunas y, a su vez, llegando con un estándar superior de vivienda. En eso hemos estado y dentro de los tiempos. Puedo informarles que ya llegamos a 220.000 viviendas; es decir, en el mes de septiembre cumplimos las 220.000. Luego se puede entregar la cifra exacta. Esperamos terminar el período con 260.000 y estamos trabajando para eso; es lo fundamental en que estamos.
Sobre el tema financiero, solo partir con una noticia: ayer comenzamos a pagar lo que estaba adeudado tanto en subsidios individuales como en terrenos y también en mejoramiento. Esto fue posible por ajustes presupuestarios con el Ministerio de Hacienda. Esperamos que el proceso sea rápido y cubra buena parte de la deuda vencida en estos tres conceptos.
Pensando en cómo organizar la exposición ante la Comisión, estimamos conveniente que Carlos Araya, el más antiguo del equipo, con mayor trayectoria, haga primero una presentación conceptual —los conceptos en juego para aclarar de qué estamos hablando, entre ellos la distinción entre subsidio asignado y subsidio pagado—; posteriormente, que Vania Navarro, nuestra jefa, realice un análisis de la situación financiera; y, a partir de ello, iniciar el diálogo, si a usted le parece, Presidente. Está la Subsecretaria; hay otras personas del Ministerio para ir aclarando: uno de los que más conoce subsidio de mejoramiento, otra persona de subsidio rural; ella, que sabe de todo; y está Daniela Flifi, quien maneja todos los antecedentes. Entonces partiríamos, si le parece, Presidente, con la exposición de Carlos Araya sobre el tema conceptual; luego vamos a la parte financiera y después al diálogo.
Presidente: Muy bien, Ministro, muchas gracias.
Senador David Santos: Sí, Presidente, muchas gracias. Saludamos al Ministro y a todo su equipo. ¿Por qué estamos acá? Diría, básica y esencialmente, porque necesitamos establecer márgenes de información precisa, acotada, definida. Hemos intentado, a través de esta Comisión, en innumerables ocasiones, arribar a informaciones que nos dejen a todos tranquilos y satisfechos respecto de sus contenidos. No queremos que nuestro Ministro se nos desespere porque el plan de emergencia de recuperación del incendio de Valparaíso no avanza como se quisiera. Quisiéramos que la gente de Valparaíso tuviera sus temas en un camino claro de definiciones. Hubo aquí un representante del Ejecutivo a cargo de este plan del incendio, probablemente el responsable directo que pone el Ministerio para llevar a cabo el plan de recuperación de los incendios de Valparaíso. Y a todos nos desespera lo que dice el Ministro; a todos nos desespera la situación en la que se mantienen las familias. La razón fundamental por la cual estamos acá es porque queremos que no sea la prensa la vía o el canal por el cual, en una comisión técnica —y, sin duda, también política— como es la Comisión del Senado, obtengamos la información. Queremos aquí la información real, objetiva, y no enterarnos por vías que no son las adecuadas para llegar a buen puerto. Ese es el contexto, básicamente.
Presidente: Muy bien, Senador, yo lo comparto.
Ministro Carlos Montes: Mire, hemos tratado de informar permanentemente a esta Comisión y también a la de la Cámara, y ahora entregamos semanalmente el informe de cómo va. Por alguna razón, al final siempre terminamos con dudas. Siempre habrá dudas, porque son estadísticas sobre distintas dimensiones y aspectos, pero contar con información permite dialogar. Desde el mes pasado estamos entregando a esta Comisión informes periódicos. Y, si me permite decirlo al tiro, respecto de la construcción de vivienda en Valparaíso: en el plan de emergencia ustedes podrán ver que ya hemos construido 22.855 viviendas. Eso es bien importante.
Porque, a pesar de todos los problemas de Valparaíso, es de las regiones que más viviendas ha producido. En segundo lugar, quiero señalar a la comisión un vacío institucional. Este ministerio tiene hoy día 27 eventos, 27 procesos de reconstrucción a su cargo de gobiernos anteriores, del gobierno del presidente Piñera y de distintos gobiernos, y además 16 de este gobierno. En total, son 43. Todo esto implica 15.829 viviendas, de las cuales hemos avanzado en 9.343.
Insisto: hay un vacío institucional. Si uno mira el terremoto del 71, por ejemplo, en el norte, en Coquimbo, el Estado tuvo capacidad de responder porque había Estado para responder; era otra organización, otra estructura. Hoy día tenemos un problema: las realidades de cada una de las reconstrucciones son distintas. La de Valparaíso no tiene que ver con otras, porque aquí hay socavones, suelos con otras características, con otra pendiente; tiene otro ritmo. Hemos tratado de recoger la experiencia, convocando a las personas con más trayectoria, tanto del gobierno actual como de anteriores, y tuvimos seminarios, discusiones, en fin, para avanzar.
¿Cómo estamos hoy? Del total de las viviendas, el 98% ya tiene subsidio y el 94% tiene además asistencia técnica asignada; es decir, hay alguien trabajando al lado en cada proyecto. Y hoy día, en ejecución o por terminar, tenemos 865, dentro de las cuales están, por ejemplo, cuatro viviendas en Manuel Bustos que están hechas hace un año y no se han podido terminar porque falta un muro de contención. No se pueden habitar porque ese muro requiere licitación. ¿Y sabe cuánto nos demoramos, senadora, en cada licitación? Once meses, más o menos; algunas más, otras menos. Dado el tipo de organización que tenemos, el Estado no tiene ni las capacidades para la acción ni las facultades, porque nuestra organización general no las contempla. Quiero enfatizarlo, porque vamos a seguir enfrentando muchos eventos de este tipo; es parte de la historia de Chile.
Quiero valorar mucho que ya tengamos 1.121 expedientes en la Dirección de Obras Municipales, de los cuales 966 —que estaban pendientes— ya fueron aprobados. Creo que las Direcciones de Obras de Viña del Mar y de Quilpué están en otro ritmo, trabajando muy bien, y estamos bastante bien coordinados. Por eso tenemos expectativas de que, como dijimos, durante este gobierno prácticamente todas las viviendas dañadas habrán iniciado obra o terminado obras. Son situaciones distintas, pero estarán en ese proceso. Terminarlas todas y tenerlas disponibles no será posible, lamentablemente.
Además, está toda la dimensión urbana. Tenemos 145 obras urbanas en ejecución; solo en Viña del Mar, 20. Y a su vez, 112 en Quilpué y 3 en Villa Alemana. ¿Cuál es la mayor dificultad? Aquí se optó por una forma de trabajo que recogiera la diversidad de situaciones y el diálogo con los afectados. No se pudo trabajar de manera estandarizada. En otros eventos hay un terreno, se demuele todo y se reconstruye con un modelo de vivienda. Aquí no. Los copropietarios requieren diálogo caso a caso con la respectiva empresa, y eso ha sido un problema. Incluso la Cámara Chilena de la Construcción en Viña tiene un proyecto que aún no ha podido iniciar por distintas razones objetivas. Quiero subrayar que se requieren respuestas singulares para situaciones singulares.
Esperamos que, en los cinco meses que quedan —un poco menos—, dejemos todo en obra y con varias viviendas ya terminadas. Lamentamos las discusiones que esto provoca, porque es muy difícil y duro para las familias.
Asimismo, estamos construyendo 985 viviendas en terrenos nuevos: viviendas nuevas para personas allegadas que fueron afectadas y para quienes estaban en zonas de daño y deben trasladarse. Los vamos a invitar en los próximos días a la colocación de la primera piedra del primer proyecto de 240 viviendas en Reñaca Alto. ¿Sabe que nos demoramos más de un año en poder terminar ese proyecto? Hasta por CONAF; al final terminamos...
Estamos con un conflicto con CONAF que obligó a realizar un conjunto de gestiones que demoraron dos o tres meses adicionales. Sé que esto no es excusa; lo que sí quiero señalar es que la región está trabajando intensamente, el Ministerio también, y queremos terminar el Gobierno, a lo menos, con todos los proyectos en ejecución y con un porcentaje alto de obras terminadas. Eso quería señalar, a propósito de las reflexiones del senador Sandoval.
Muy bien, ministro. Le ofrecemos la palabra a don Carlos Araya y, luego de las presentaciones, retomaremos los comentarios y preguntas de la comisión. Adelante, Carlos.
Muchas gracias, presidente. Saludo al senador, a la senadora y a los equipos presentes. La idea en esta introducción es referirme al modelo y a la estructura general del sistema de asignación y pago de subsidios, es decir, a cómo funcionan los programas habitacionales, de manera conceptual. Posteriormente, como señaló el ministro, haré referencia a situaciones contextuales recientes y a algunas de las indicaciones que presentó en su exposición de la sesión anterior la Asociación de Desarrollo Inmobiliario.
En cuanto a la estructura del sistema, el modelo de asignación de subsidios se financia con cargo al Subtítulo 33 de la Ley de Presupuestos del MINVU, a través de un esquema de subsidios habitacionales que, en conjunto con el ahorro y, eventualmente, el crédito, según corresponda, financian la adquisición, construcción, mejoramiento de las viviendas, o el arriendo en el respectivo programa.
Estos subsidios se asignan, en su mayor parte, mediante llamados públicos que se realizan anualmente conforme a un cronograma y planificación definidos en cada programa, a través de resoluciones específicas que detallan condiciones, requisitos, plazos de postulación y el marco de financiamiento disponible para la asignación. Asimismo, una parte de los recursos se destina, en virtud de las facultades de la autoridad ministerial, a asignaciones directas en casos muy particulares: situaciones sociales o críticas, incrementos y refinanciamientos de proyectos en dificultad (recontrataciones, asumir obras u otras contingencias). Esta facultad también está acotada por los recursos anuales y forma parte del proceso inicial de asignación.
El pago efectivo de los subsidios asignados año a año se realiza, mayoritariamente, en los ejercicios siguientes, en un flujo continuo. Cada año hay llamados, y ello es independiente de que, en el último año de una administración, se produzca un cambio de gobierno: los subsidios traspasan periodos. En ese último año deben mantenerse los llamados abiertos para garantizar la continuidad operativa. Todos los años se realizan convocatorias a postulaciones a través de los distintos sistemas, entendiendo que la política habitacional funciona como una línea continua de producción: cada administración hereda proyectos y compromisos financieros de la anterior, genera sus propios proyectos y deja, a su vez, una cartera activa para el gobierno siguiente. Esto es particularmente relevante para la sostenibilidad de la industria de la construcción de vivienda.
El marco presupuestario anual se define de dos maneras, lo que es una particularidad del modelo de otorgamiento de subsidios del Ministerio de Vivienda. Por una parte, el marco anual de recursos de subsidios que puede otorgar el Ministerio está autorizado mediante resolución conjunta de los Ministerios de Hacienda y de Vivienda, donde Hacienda fija los marcos máximos por programa, en unidades de fomento, que el Ministerio puede asignar durante el año a través de los procesos administrativos respectivos. Esa resolución ratifica lo planificado en la Ley de Presupuestos para el año siguiente, en cuanto a los recursos disponibles para asignar subsidios. Por otra parte, se considera el presupuesto anual del Ministerio de Vivienda y Urbanismo en la Ley de Presupuestos del año correspondiente, que contempla recursos para pagar los subsidios emitidos, principalmente en años anteriores, ya sea como pago final —una vez completados los procesos para proveer la vivienda a la persona que postuló— o como desembolsos parciales durante la ejecución, conforme a los estados de avance.
Respectivo anticipo de acuerdo a lo que disponga el reglamento del programa del que estamos hablando, eso se paga con el presupuesto anual y, además, en una proporción menor, también el gasto de los subsidios nuevos que se entregan en ese año, que generalmente es muy bajo, no más allá del 5 o 10%, según el programa habitacional. Por eso hablamos de que el presupuesto anual, por lo menos en un 90%, corresponde a compromisos de arrastre de años anteriores, que pueden ser 2, 3, 4, hasta 5 años o incluso, en algunos casos, mucho más atrás por situaciones particulares, como las carteras críticas o los subsidios que en su momento se pudieron entregar sin un proyecto detrás.
En ese contexto, el otorgamiento de anticipos o préstamos también está contemplado en la Ley de Presupuestos y son facultades discrecionales que tiene el Estado, de acuerdo con la disponibilidad de caja, para poder apoyar a las empresas constructoras en el proceso de ejecución de un subsidio habitacional. La lógica del modelo de subsidio que impera en la política habitacional chilena consiste en entregar subsidios a la demanda, los que se aplican y se pagan cuando está terminado el proceso. Los mecanismos de financiamiento intermedio, entonces, son herramientas de apoyo al proceso, disponibles para las empresas constructoras, y en todos los reglamentos está claramente señalado que se otorgan conforme al avance de la obra y a la disponibilidad presupuestaria que tenga el Ministerio.
Ya lo mencionó aquí el Ministro, y también lo ha planteado el senador Sandoval, en el sentido de ir aclarando con datos lo que se ha ido produciendo en la prensa. En la última semana se ha levantado públicamente que hay algunos retrasos y habría una deuda vencida en los proyectos de vivienda social. Se mencionó que existía una deuda pendiente por mil millones de dólares, lo que generó un debate intenso; sin embargo, el Ministerio de Vivienda ha precisado con claridad que no existe una deuda vencida por mil millones de dólares, como fue planteado en algunos medios. Esa cifra incluso fue descartada por la propia Asociación de Desarrolladores de Vivienda Social y la Cámara Chilena de la Construcción. También se ha instalado que hay una crisis nacional del sistema, lo cual no es así: no hay una crisis ni una situación compleja que ponga en riesgo la continuidad del Plan de Emergencia Habitacional. Y respecto de la afirmación que circuló de que al SERVIU Metropolitano le faltarían 312 mil millones para cerrar el año 2025, se trata de una cifra con supuestos discutibles, en el sentido de que lo que se consigna ahí proviene de diversas fuentes, con obligaciones o compromisos distintos que corresponden a proyecciones más que a deudas vencidas, cuestión que también ha sido descartada.
Muy rápidamente, en relación con los comentarios que aportó el director de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios en la sesión anterior —muy interesantes respecto del análisis de la política habitacional—, nos parece, como bien lo dijo el Ministro en su introducción, que hacer una comparación entre periodos tan extensos y con marcos y énfasis distintos en distintos gobiernos es complejo. Es muy difícil concluir, a partir de esas comparaciones, que hoy, con una cantidad de recursos mayor que en el pasado, se produzcan menos viviendas. Lo que se planteaba ahí era que, comparando el decenio 2004-2014 respecto de 2014-2024, habría una caída del 30% de la producción de vivienda con énfasis en el sector vulnerable; y, en el mismo sentido, desde 1990 hasta 2024 se hacía la conclusión de un decrecimiento de la producción habitacional del Estado. Pero es complejo hacer estas comparaciones por tratarse de momentos distintos, con tipos de viviendas, productos y políticas diferentes, y considerando algunas particularidades.
Por ejemplo, en los años 90 el tipo de vivienda que se construía —con promedios en torno a los 30 metros cuadrados, incluso menos en algunos casos— incluía la vivienda progresiva con infraestructura sanitaria; a la que hacía mención el Ministro, entregada en 2006 en la comuna de Malloa, de 12 metros cuadrados, también pertenece a ese tipo de políticas que eran pertinentes en esa época. Asimismo, han cambiado los estándares de urbanización, de equipamiento y de áreas verdes, que en ese periodo no existían o eran significativamente más bajos. Ha aumentado el costo de los suelos, su habilitación, viabilización y factibilización, con la incidencia del impulso dado en los últimos años para mejorar la localización de los terrenos, lo que incorpora evidentemente un costo del suelo mucho más alto. Y, a lo largo de ese periodo, se han incorporado progresivamente mejoras técnicas y de estándares a los proyectos habitacionales: mayores exigencias de norma térmica, accesibilidad universal y criterios de eficiencia energética, que han incidido, obviamente, en entregar una mejor vivienda.
Mejor vivienda respecto de la que podíamos entregar hace 20 o 30 años atrás. También hay algunos cambios de énfasis en la composición, como lo señalaba la exposición de la Asociación de Desarrollo Inmobiliario; sin embargo, también responde a cómo se han ido desarrollando las necesidades habitacionales. Entre 2004 y 2014 hay un cambio asociado a una disminución en la provisión y en la producción habitacional. Pero esa es una cifra que hay que analizar, sobre todo considerando las cifras entregadas muy recientemente sobre el déficit en base al Censo 2024.
Efectivamente, el número de hogares ha ido creciendo en Chile progresivamente a medida que va aumentando la población; pero, además, los hogares se van haciendo más pequeños, con menos personas. Hoy existe una cantidad relevante de hogares unipersonales que no existía antiguamente. No necesariamente ese crecimiento de hogares va a significar un aumento correlativo del déficit estructural de vivienda ni de las carencias o necesidades urgentes en materia habitacional. De hecho, los hogares unipersonales han ido aumentando y no todos ellos requieren la construcción de nuevas viviendas ni suman al déficit; en algunos casos se requieren otro tipo de medidas, como las que se han adoptado recientemente, por ejemplo el subsidio al dividendo o las garantías a través del FOGAES.
Lo importante es que el déficit habitacional, de acuerdo con la metodología tradicional basada en el censo —corregida incluso en el año 2022—, ha ido a la baja. Son 491.000 viviendas las que se requerirían, de acuerdo con la metodología formal en base al Censo 2024, lo que representa el 7,5% de los hogares que existen hoy en Chile. Los hogares han ido al alza y las necesidades habitacionales van decreciendo. Esta cifra es muy relevante porque, en el censo anterior, los requerimientos de vivienda respecto del total de hogares bordeaban el 10%. Por lo tanto, las comparaciones son complejas y —como mencionaba el ministro— hay que entrar mucho más en detalle sobre qué comparar con qué respecto de qué tipo de programas, considerando también que, si se mira desde el punto de vista de la inversión pública, hoy existe una inversión cinco veces mayor a la de los años noventa, pero los productos, la localización, el tipo de suelo y el tipo de vivienda son muy distintos a los de esos años. Además, en los años noventa no existían en la inversión habitacional los programas de mejoramiento ni los de arriendo, que se han ido sumando como alternativas dentro de los programas para el acceso a la vivienda en nuestra política habitacional. Eso, Presidente. Muchas gracias.
Muy bien. Muchas gracias, Carlos Araya, por la presentación.
Ministro Carlos Montes: Quisiera dejar bien marcado lo siguiente. Aquí no hubo mil millones de dólares de deuda vencida. Alguien lo dijo, pero posteriormente nadie lo sostuvo. Pedimos que hubiera fundamentos y, ahora, la Cámara de la Construcción y la Asociación de Vivienda Social dicen que ellos no lo han dicho. Y no lo han dicho. La Cámara no lo dijo; fueron otras personas. Después se señaló que en la Región Metropolitana hay 312 millones de dólares de deuda vencida. Y la verdad es que después se dijo: no, no era eso lo que estábamos diciendo, era otra cosa. Era la proyección de que, al terminar el período, si no se hacía algo, íbamos a tener 312 millones de déficit. Y eso bajo ciertos supuestos: estaban suponiendo que íbamos a hacer tales y cuales cosas que llevaban a ese resultado. Esto nos generó bastante debate.
¿Qué hicimos frente a esto? Lo va a explicar Vania: se recorrió y se habló con cada servicio para ver qué tenían de deuda atrasada en los temas centrales —en terrenos, en todo el tema de mejoramiento, también en individuales— y en algunas viviendas que estaban totalmente terminadas y que no habían querido recibir conforme. Llegamos a 130 millones de dólares; esa es la cifra. Y eso es lo que se empieza a pagar desde el día de ayer a un ritmo distinto —porque también se estaba pagando algo antes—, para evitar tener ese pasivo. Y la otra cosa que quiero decir: ¿cuánto representa? También lo va a...
Para insistir, Vania: ¿cuánto representa la inversión del Ministerio de Vivienda dentro de la inversión inmobiliaria en el país? 41% de manera directa y 57% del total de la inversión se mueve directamente y a través de los socios que tenemos —familias y empresas—; es lo que mueve el Ministerio de Vivienda. Esto es muy alto respecto de los últimos años. ¿Por qué es tan alto? Porque ha bajado la inversión privada. Quiero recalcar estos datos porque dan una idea de la responsabilidad que existe y la importancia de reconocerlo e incorporarlo. Eso, Presidente.
Presidente.— Muy bien. Se ofrece la palabra al senador Sandoval.
Senador Sandoval.— Muchas gracias, Presidente. Por eso estamos acá. Al final del día, lo que buscamos nosotros —y, por su intermedio, Presidente, al senador Fidel Espinosa— no es poner en duda el avance del Plan de Emergencia Habitacional. Las últimas informaciones que ustedes mismos entregaron hace pocas semanas hablan de un nivel de ejecución significativo, lo que indica que, en general, el cumplimiento del plan está dentro de los márgenes: viviendas terminadas, 208.969; en ejecución, más de 120.000; y por iniciar, otras 63.000. Esa información ya fue entregada a propósito del avance de los diferentes proyectos en construcción y muestra que la meta se va a cumplir. Nos alegramos por ello, por las familias que logran el sueño de la vivienda.
Ahora bien, nos preocupan algunas situaciones. Por ejemplo, el MOP proyecta un menor presupuesto para el año que viene de 858.000 millones de pesos —aproximadamente 858 millones de dólares—, que es la caída presupuestaria del Ministerio de Obras Públicas. Estaremos muy atentos a lo que ocurra. Asimismo, usted, Ministro —por su intermedio, Presidente—, señaló que la deuda real no son mil ni trescientos; son ciento y tantos millones de dólares, es decir, ciento y tantos mil millones de pesos, que se comprometió a pagar próximamente. Me imagino que la Tesorería debe estar emitiendo cheques intensivamente en este momento.
También se han discutido otras materias que han incidido en dificultades de ejecución, entre ellas la eliminación de los anticipos para la construcción. Si bien es cierto que su otorgamiento es discrecional y depende de medidas presupuestarias, al terminar con una práctica habitual alguien debe compensar esa situación. ¿Dónde lo hace la empresa? Obviamente en la banca, con los costos adicionales que ello implica.
Por eso, Presidente, le sugiero solicitar: primero, la cantidad de proyectos que están hoy en el banco de proyectos, su estado y la eventual necesidad de financiamiento; y, segundo, un detalle de las viviendas iniciadas bajo el DS-49 en los últimos diez años, para contar con una radiografía del tema.
Asimismo, se reportan demoras en los estados de pago, lo que ha obligado a recurrir a esta figura del “confirming”, que llamó la atención: una suerte de leasing, donde la empresa, ante la demora, debe concurrir a la banca, asumiendo los efectos y costos que eso implica. Por lo mismo, Presidente, no sé si pudiéramos oficiar a BancoEstado —no sé, Mirko, quién tiene esa información— para que remita los antecedentes de las empresas que han recurrido a este instrumento para resolver problemas de caja en el inicio de la ejecución presupuestaria. Me permitiría solicitar esos oficios y, por cierto, mantenernos muy atentos a lo que ocurra con el presupuesto.