¿Qué pasa? Gracias. Vamos a dar inicio a esta Enatrans 2025. Primero saludamos al Ministro de Seguridad, señor Luis Cordero. Saludamos al Presidente de Chile Transporte y al Directorio de Chile Transporte. Saludamos a los asociados, les damos la más cordial bienvenida, queridos asociados. Saludamos también al señor Jorge Ortúzar, el Gerente General de SOFOFA, que estaba por aquí. Ahí está adelante, por favor. Y bueno, saludamos a todos quienes han sido invitados y agradecemos su presencia. Sean las primeras palabras para agradecer la presencia de cada una de ustedes y ustedes en Enatrans.
Agradecemos además el apoyo de quienes han hecho posible la realización de este Enatrans, especialmente a nuestros socios adherentes y muy especial a quienes han apoyado en este evento, Bipal, Berman, Episa, Scania, Volvo, Copec, Atkim y Cummins. Agradecer también a La Tercera y a la revista especializada en transporte Espacio T como media partners.
El evento de esta mañana está siendo además transmitido en directo por el streaming de La Tercera y de algunas de las candidaturas también van a transmitir el trabajo que se va a desarrollar hoy. También está transmitido por algunos canales el YouTube de Chile Transporte.
Para Chile Transporte es motivo de orgullo poder realizar este evento, pensando esencialmente en nuestros asociados, pero también en los empresarios del transporte en general, quienes demandan saber las propuestas que tienen para nuestro sector, los liderazgos que se perfilan para encabezar un nuevo periodo presidencial.
Nos acompañarán en un rato más los candidatos Evelyn Matei, José Antonio Kast y Johannes Kaiser. Se ha excusado a última hora la candidata Janet Jara.
Así como mismo uno de los temas sustantivos que preocupan a nuestro sector y a la ciudadanía en general, es muy sabido, es el de la seguridad. Por ello es que en este momento, en unos momentos más, vamos a dar paso a la exposición del Ministro de Seguridad, Luis Cordero, quien está con nosotros y agradecemos su presencia.
Pero para dar inicio a este evento, le vamos a ofrecer la palabra al Presidente de Chile Transporte, Raúl Clavero. Raúl, por favor.
Gracias, gracias. Señor Ministro, estimado Luis, socios de Chile Transporte, queridos amigos, tengan muy buenos días y agradezco la concurrencia y el apoyo.
Nos convoca hoy día… Quiero contarles cuál es la situación que tenemos en el país, donde ha logrado avances notables en sectores como la minería, en sectores como la agricultura, como la banca, como el retail, donde sus estándares nos han puesto en el resto del mundo con gran orgullo.
Son industrias sólidas, profesionalizadas, innovadoras y comprometidas con la sustentabilidad. Y acá marco una diferencia. Este proceso de modernización no ha sido uniforme.
Uno de los sectores que ha quedado rezagado es nuestra industria, el transporte de carga por carretera, un pilar esencial en el desarrollo del país. Nuestro sector, y acá voy a hablar un poco de números y contarles, emplea en forma directa 230.000 puestos de trabajo. En forma indirecta emplea 400.000 puestos de trabajo. Quiere decir que nuestra industria de manera formal convoca 600.000 puestos de trabajo. Gastamos el 35% de la energía y este es un dato entregado por Chile Desarrollo Sustentable. La operación diaria que tenemos impacta de manera directa en la seguridad vial, el medio ambiente y la calidad de vida de miles de trabajadores.
A pesar de su importancia estratégica, el transporte de carga está conformado en su mayoría por micro y pequeñas empresas que luchan por sobrevivir. Se enfrentan con una competencia feroz y con una asimetría entre el dador de carga y ellos mismos que los conduce en esa negociación desigual a dinámicas de mercado que derivan en la precariedad. Y en muchos de esos casos, tristemente, conducen a la informalidad. Es la realidad de no tener un marco institucional y normativo actualizado. Esto ha fomentado la atomización del sector, ha debilitado su formalización y ha limitado sus posibilidades de crecimiento.
Entre los principales problemas se encuentran la ausencia de una visión a largo plazo para el sector y normativas técnicas obsoletas. Nuestra ley de peso y medida data de 1980. No estamos adaptados a lo que sucede en la región, pese a contar con el parque automotor más moderno. A partir del primero de septiembre tenemos norma Euro 6; se han hecho esfuerzos importantes por parte de las marcas para estar acá con ese producto. Y resulta que tenemos electromovilidad, donde los camiones pesan 3,5 toneladas más, y nuestro marco de pesos y medidas no lo contempla. Los largos de las unidades no lo contemplan. La región ya ha habilitado 19,30 metros, tanto Argentina como Brasil, que son socios y competidores del país, y nos relegan en esa posición. Perdemos competitividad.
Por eso, desde Chile Transporte hacemos un llamado a las autoridades, a los actores políticos y a la sociedad para que comprenda que este debate debe ser parte central de la agenda de gobierno, de la agenda nacional. No es un tema meramente sectorial, es una oportunidad para Chile, es una oportunidad claramente para el país. Necesitamos una reforma profunda del marco normativo que promueva la inversión, la renovación de nuestros activos y la formalización de las empresas, asegurando así la competitividad, la seguridad y, algo muy fundamental, la dignidad de nuestros trabajadores que mueven la economía del país. Esto es lo que necesitamos.
Este encuentro en Atrans es la instancia para escuchar propuestas concretas de los candidatos presidenciales, especialmente en materia de seguridad. Valoramos profundamente la presencia del ministro de Seguridad, don Luis Cordero. Nuevamente, gracias, gracias personales, Luis, así como a los candidatos presidenciales. Mi voz, o la voz de Chile Transporte, no es solo la voz de Chile Transporte, es la voz de miles de nuestros trabajadores que reclaman lo que estamos pidiendo. Recordemos, el futuro del transporte de carga es también el futuro de la vida.
lo de Chile. Muchas gracias. Agradecemos las palabras del presidente de Chile Transporte dando inaugurado este ENATRANS. Decíamos hace un rato, y Raúl también lo mencionaba y lo resaltaba, uno de los temas que más ocupa hoy a la ciudadanía en general y a nuestro sector en particular es lo que ocurre en el área de la seguridad. Para tener una visión sobre esta materia de lo gubernamental, lo que se está realizando, hemos invitado y agradecemos la presencia del ministro de Seguridad, Luis Cordero Vega, a quien invitamos a pasar al podio. Gracias, ministro.
Bien, muy buenos días y muchas gracias por la invitación. En Raúl quiero representar el agradecimiento a la invitación que se me ha formulado, pero en particular para tratar de reafirmar, diría yo, desde la perspectiva de seguridad, un argumento que me parece sustancial a este encuentro y es, y lo voy a plantear desde esa perspectiva, por qué tener un sector que presione la precariedad o, en segundo lugar, que desformaliza, es un riesgo para la seguridad pública.
O sea, dicho de otro modo, lo que voy a tratar de argumentar en esta breve intervención que me han solicitado es que los esfuerzos que el Estado de Chile está realizando en materia de seguridad pública, no solo hoy, sino que lo que se proyecta para los próximos años, requiere de sectores económicos robustos, que estén formalizados y que sobre todo tengan capacidad también de generar condiciones de provisión de participación público-privada en materia de seguridad. Así las cosas, tener industrias débiles con riesgos de precarización tiene consecuencias en materia de seguridad pública que yo creo que es conveniente tener presente.
Quiero partir de una premisa. Sin rutas seguras se reducen las posibilidades de crecimiento para el país. Pero hay un segundo aspecto que resulta igualmente relevante, y es que en esas rutas o carreteras también se expanden las organizaciones criminales. No solo me estoy refiriendo al narcotráfico, sino a un conjunto de actividades que, reducidas en el contrabando, generan una cantidad muy significativa de recursos en la economía ilícita, incluso mayores de la que puede generar la droga.
En ocasiones quienes participan del debate público olvidan que cuando hablamos de organizaciones criminales nos estamos hablando de un conjunto heterogéneo de sujetos y asociaciones que, explotando márgenes que genera el sistema institucional, desarrollan economías ilícitas altamente rentables que perjudican no solo la seguridad pública, sino que también las actividades económicas regulares.
Por eso, la agenda de seguridad no solo es un problema de orden, no solo es un problema de cuántos policías y fiscales existen, es un problema también de cómo funcionan razonablemente bien nuestros mercados. Y por eso, no solo los puertos y los pasos fronterizos, las carreteras y las rutas son estratégicas a la hora no solo del desarrollo, sino que también de la persecución de dichas organizaciones que, ante la posibilidad de explotar millonarios mercados ilícitos, siguen buscando nuevas rutas. Y quienes conocen y manejan mejor ese eslabón son los que forman parte de la mayor rentabilidad de esa estructura.
Por cierto, para nadie es desconocido los hechos que hemos conocido en las últimas semanas, donde miembros de las Fuerzas Armadas se han visto vinculados a mecanismos logísticos asociados al transporte en materia de droga. Esto, que pareciera ser un tema específico sobre cómo se abordan los problemas de corrupción y de riesgo en las instituciones, también demuestra en algún sentido la importancia que tiene el buen resguardo de la cadena logística. Y en algún sentido también implica poner atención en otros aspectos que en ocasiones omitimos.
Y permítame un pequeño comentario coyuntural en este sentido. Durante estos días, de hecho ayer en la noche, he vuelto de una visita conjuntamente con el general director de Carabineros y el director general de la Policía de Investigaciones, esta vez recorriendo parte de la ciudad
significativa de la frontera en la región de Antofagasta. Hace algunas semanas atrás hice lo mismo en el caso de la región de Tarapacá. El problema no es solo focalizar la preocupación en el tema de la frontera respecto a la migración irregular, que es importante, sino que uno de los aspectos más riesgosos que tiene y que en este contexto tiene sentido en este encuentro tiene que ver con cómo se utilizan las redes de contrabando en distintos pasos de nuestra frontera. Lo voy a decir en los siguientes términos. Podríamos reducir significativamente los ingresos ilegales, pero la situación de la frontera en relación a las actividades ilícitas vinculadas al contrabando son extremadamente riesgosas para el país y en especial para las actividades económicas, como el transporte, que es clave para el desarrollo de nuestro país.
Muchos de ustedes conocen bastante bien lo que implica el trabajo de personal, funcionarios, gente que se desplaza por rutas que implican altas altitudes. Por lo tanto, la inversión en tecnología no solo la realiza el Estado. Sería el ejemplo clásico de lo que está haciendo el Estado de Chile en materia del proyecto Cifrón para las Fuerzas Armadas o la muralla digital, sino que también es igualmente importante la inversión que realiza el sector privado en materia de transporte en esas zonas.
Estos días estuve en el Paso Zico, en Itocajón y también en el Paso Jama, y los menciono porque son estructuralmente centrales para el proyecto de corredor bioceánico.
Y aquí quiero tomar las palabras de Raúl. Para discutir de este tema, Chile tiene que pensar en el largo plazo. Es cierto y es importante hablar de la integración regional. Es cierto que es una gran y significativa importancia para el crecimiento del país, pero requiere de tener una industria adecuadamente regulada para poder competir razonablemente bien con los competidores de otros lugares. Actualizar en ese sentido la regulación y hacerla competitiva es beneficioso para la seguridad pública.
Quiero ejemplificar en un ámbito. Si no mitigamos los riesgos en materia de seguridad, el corredor bioceánico se podría transformar más bien en un presente griego para Chile y su economía.
En el Paso Jama, que ustedes bien saben está a más de 4.000 metros y que el país celebró hace algunos años como un paso integrado conjuntamente con Argentina, se revisan 300 camiones diarios y más de 10.000 personas a la semana. Simplemente con la implementación del corredor, las proyecciones es que en ese paso aumentará el 80% de ese flujo. Por lo tanto, el esfuerzo del país es un esfuerzo no solo para lo de hoy, sino que para lo que viene. Y en consecuencia, mirar la situación de los pasos fronterizos desde esta perspectiva, pensando en este caso particularmente en el transporte de carga, es determinante para cumplir con el propósito de desarrollo y de crecimiento que dicha iniciativa promueve para el país.
Pero quisiera hacer brevemente algún resumen de algunas cosas que son de importancia para ustedes y que ha sido parte del debate de este último tiempo. Me parece indispensable hacerlo porque ha formado parte de las conversaciones entre el Estado de Chile y vuestro gremio. Y rendir cuenta de eso en algún sentido me parece que es lo responsable en un auditorio de estas características.
Sabemos que los riesgos en materia de crimen organizado en algún sentido se han ido detectando en Chile. Algunos en ocasiones han considerado que de modo tardía. En el contexto de la política nacional contra el crimen organizado de hace pocos años, a través de los consejos regionales, por ejemplo, se han priorizado el delito de robo de camiones de alto tonelaje en la región del Bío Bío para el año 2024 y 2025 y los lagos para 2025. Eso tiene un esfuerzo muy significativo donde focalizar acciones y recursos.
En el caso del robo de camiones de alto tonelaje, se trata de un delito que afecta significativamente al sector y que representa no solo la unidad de una pérdida económica para una empresa contratista, sino que por las características de este sector impacta en micro y pequeños empresarios, que tiene consecuencias no solo en la viabilidad futura del desarrollo de sus actividades, sino que…
también en la seguridad de sus trabajadores, pero además en un impacto en la cadena logística del funcionamiento del país. Por eso está activa desde el Ministerio del Interior la mesa de reporte de robo de camiones de alto tonelaje, que fue creada con el objeto de centralizar esa información, pero sobre todo permitir una coordinación integrada de la persecución penal en ese sentido. Ha permitido fiscalizaciones intersectoriales, pero además de eso ha permitido proyectos en zonas de descanso en la Ruta 5 Sur, a lo cual me quiero referir un poco más adelante, y un plan de capacitación para funcionarios en zonas de peaje. Además, durante este año Carabineros amplió el plan de desarrollo operativo de puntos de control integrado, que son muy relevantes. No solo desde la perspectiva de lograr dimensiones del control en una misma unidad, no solo por parte de la policía, sino que también de aduanas, de Cernapesca, del SAC, de CONAF, de impuestos internos, de transportes, entre otros. Porque lo que permite en algún sentido es también viabilizar el tiempo. El tiempo en determinadas zonas se puede transformar en un problema muy estructural para el funcionamiento de la cadena logística. El trabajo integrado no solo en consecuencia cumple un propósito de seguridad, uno de sus aspectos centrales, sino que también de expedición del control en la ruta.
¿Cuál es el resultado entonces de esas iniciativas? Bueno, a julio de este año el robo de camiones de alto tonelaje o de su carga se redujo en un 49% en comparación al 2022 y un 29% si comparamos con lo que ocurría en julio del año pasado. Ahora, esos números son importantes, pero los esfuerzos deben continuar. También observamos una preocupación en la macrozona centro, que sigue siendo el área con mayor incidencia delictiva, con el 78% de los delitos a nivel nacional y especialmente en la Región Metropolitana, asociado a estos casos en particular. La persistencia de esa actividad delictiva en esta región exige mucho más que focalización. Algunos de estos aspectos quiero detenerme un poco más adelante.
En el robo de madera, que por largo tiempo afectó a transportistas, esencialmente como víctimas directas y concretamente a la integridad física, además de sus bienes por parte de quienes cometían esos delitos, la agenda de seguridad que ha implicado el acuerdo entre el gobierno y la oposición implicó la aprobación de dicha ley en septiembre del 2022 y, al amparo de ella, las consecuencias de la reducción de ese tipo de delito ha bajado sustancialmente. Y sigue siendo uno de los delitos priorizados para la macrozona sur. En el año 2023 se dictó el reglamento que regula el rotulado y que permite la trazabilidad de la madera destinada a la construcción. ¿Y por qué pongo énfasis en esto? Porque este es uno de los ejemplos donde las actividades de vinculación público-privada son claves para el monitoreo de rutas interurbanas y las fiscalizaciones conjuntas en zonas rurales y en zonas urbanas. Eso, junto a la persecución penal de organizaciones criminales destinadas a estos efectos, ha tenido algunos resultados. De hecho, a julio de este año el robo de madera en el contexto de violencia rural ha bajado un 54% si lo comparamos en relación al año pasado y un 93% si comparamos con lo que ocurría en el año 2021. Esto es un hecho que han reconocido los propios gremios; sin embargo, mientras sigan ocurriendo, la preocupación seguirá siendo relevante.
Finalmente, en el marco del Plan Nacional contra el Crimen Organizado, si bien no corresponde específicamente al sector de transporte de carga, también se ha estado trabajando conjuntamente con las empresas de transporte para denunciar delitos de crimen organizado y esperamos tener en septiembre próximo, con la colaboración de la Oficina de Naciones Unidas contra el Delito, una actividad para facilitar y orientar la denuncia de personas relacionadas con servicios de transporte y alojamiento. ¿Por qué este último aspecto es tan relevante? Por lo que indiqué con anterioridad, el rol clave del transporte de carga en la cadena logística y su ubicación.
Fundamentalmente en las zonas fronterizas, son claves de custodiar en el desarrollo adecuado y correcto de las mismas. Una manera de proteger la industria es también una manera de facilitar la orientación de denuncias que puedan estar utilizando el transporte como medio de comunicación y de contenido contaminado de bienes que son objeto de contrabando o narcotráfico. Menciono esto en particular porque Chile enfrenta desafíos en materia de seguridad que requieren necesaria y obligatoriamente cooperación público-privada. El Estado no puede claudicar de su deber constitucional de resguardar la seguridad pública interior. Sin embargo, los objetivos finales solo son posibles con una cooperación público-privada fuerte. Ustedes como gremio del transporte son un aliado del Estado, y lo digo así, no de un gobierno en particular, porque los compromisos que el Estado de Chile, y quiero ser enfático sobre este punto, asume con un gremio tan relevante para el país como este, es un compromiso del Estado y de una administración en particular.
Quiero además, en este breve recuento, dar cuenta también de los esfuerzos que conjuntamente con vuestro gremio el Estado ha estado formulando en relación a la violencia rural en la macrozona sur, que como ustedes, por cierto, tienen perfecto conocimiento, uno de los afectados directa y en ocasiones indirectamente también es el gremio del transporte. Más allá de las iniciativas que están vinculadas a inversión pública y a las propuestas de la Comisión para la Paz y el Entendimiento, la intervención y la declaración del estado de excepción no solo ha implicado la intervención de las Fuerzas Armadas, sino que ha reformulado el rol de la Fuerza Pública en la macrozona sur, y ha generado dinámicas de trabajo y cooperación entre las Fuerzas Armadas, que se encuentran asignadas según sea la región del Bío Bío o bien de la Araucanía, con las fuerzas policiales y especialmente con Carabineros.
En esa zona, solo entre el año 2022 y el año 2024, se han invertido más de 31.000 millones de pesos para la adquisición de equipamiento estratégico y tecnología para fortalecer la capacidad de reacción de las instituciones dentro de una estrategia más global asociada a la macrozona sur. Esto ha considerado, por cierto, camionetas blindadas, modernas aeronaves no tripuladas, vehículos de transporte blindado, cámaras corporales, equipos de protección balística, entre otros.
La pregunta es, al igual que la anterior, si esto ha tenido efecto. Y la respuesta nuevamente es clara. Como lo han reconocido los actores tanto de la Araucanía como del Bío Bío, representantes de todos los sectores políticos y especialmente de los gremios del sector privado, los hechos de violencia rural en la macrozona sur han bajado un 70 % en comparación al año 2021, que fue cuando alcanzó su mayor índice. Siendo el año 2024 el que recién pasó el año con menores hechos de violencia desde el año 2018. Y ese número sigue bajando. Al 30 de junio de este año, los números indicaban eventos menores a los del año pasado. Y en el caso de la quema de camiones y vehículos y maquinarias, estos han caído en un 39 % en comparación al año pasado.
Pero, y esto es bien importante, mientras esa violencia no sea suprimida en la zona sur, los esfuerzos del Estado por mantener la tranquilidad en esos lugares y el desarrollo correcto de las actividades económicas requerirá de esfuerzos significativos y persistentes por parte del Estado.
Y por eso creo que en esto no debiésemos ser ambiguos. Durante largos años costó que gobierno y oposición lograran acuerdos sobre el contenido de una nueva ley antiterrorista. Dicha ley finalmente ha sido promulgada y publicada. Y recurriendo a ella, en los casos de la macrozona sur, y específicamente respecto a atentados y quemas de camiones, ha sido utilizada por parte del Ejecutivo en los casos Rucalhue, igualmente en el caso del Galpón de Contulmo y también en el caso de Coyipulli. Quiero reafirmar frente a ustedes
Que el Estado no va a renunciar y no debe renunciar a recurrir a esta herramienta cuando los hechos así lo ameritan.
Por eso, junto con las medidas de seguridad y de persecución de quienes están detrás de estos ataques y eventos violentos, nuestra atención y preocupación también está con las víctimas, incluidos los transportistas y trabajadores afectados.
Para ello existe un protocolo que se está aplicando, por ejemplo, en los casos Rucalwe y en el caso de uno de los atentados de Coyipulli; atención psicológica a las personas que han sido víctimas, el aporte monetario temprano del Departamento de Acción Social de la Subsecretaría y también la posibilidad de acogerse a los programas Cercotec, con el propósito de reponer las maquinarias y sus vehículos.
De igual modo, el Ejecutivo ha trabajado activamente con quienes, formando parte de las empresas, mantienen seguros que puedan beneficiar a las víctimas afectadas.
Ese breve resumen, que creo que es relevante tenerlo presente, nos ubica en un contexto no solo de rendición de cuentas, sino de perspectiva hacia dónde debemos seguir.
Pero desde ese punto de vista creo también indispensable hacer referencia a los acuerdos con los gremios del transporte. Yo podría eludir a propósito de mi presentación un ámbito de esas características, pero creo que no me parecería correcto, esencialmente porque forma parte de un eje de trabajo esencial con este sector.
En más de una ocasión, y eso tuvo que ver con mi posición anterior, tuve la oportunidad de reunirme con ustedes, donde pude revisar conjuntamente los acuerdos que el Estado, no el gobierno, había asumido con este gremio.
Ya me referí a lo que se refería a la estrategia de seguridad de la macro zona sur y el fortalecimiento tanto de Carabineros como de las fuerzas armadas en esa zona, así como a la disminución de los eventos de violencia.
Pero hay otras que siguen siendo igualmente relevantes, como las zonas de estacionamiento y descanso.
En la macro zona norte, en las rutas fiscales se han estado trabajando en Arica y Parinacota, en Tarapacán, Antofagasta, incluido en el sector de La Negra y también en Atacama.
También se han continuado con las gestiones de la modificación de contratos y, con base en ello, con la modificación que se pudo obtener de la ley de concesiones, lo cual ha permitido mejorar los estándares de seguridad y confort en las rutas concesionadas. Además, se cuenta con proyectos en nueve tramos en ruta, los que suman a más de 1.385 kilómetros en nueve regiones del país.
En el tramo Coyipuy y Temuco, que se encuentra terminado y está habilitado con 31 puntos de control, más la iluminación y su sala de monitoreo; en el tramo Temuco-Río Bueno, que se encuentra en ejecución; y los tramos Río Bueno-Puerto Montt, Puerto Montt-Pargua, Trespino-Coronel, Santiago-San Antonio, La Serena-Vallenar, Vallenar-Caldera y Santiago-Talca, todos en desarrollo.
Pero además, desde la dirección de concesiones del Ministerio de la Pública junto con el Ministerio del Interior, se ha estado trabajando de manera conjunta con algunos de los representantes del sector transporte para incorporar zonas de descanso en otros lugares como Los Vilos, por ejemplo, con los estándares requeridos por los gremios.
Hago referencia brevemente a estos aspectos porque tienen que ver también con la calidad que rinde la infraestructura para el desarrollo de esta industria.
Al cierre, me gustaría hacer referencia a un par de ideas finales en el contexto de la actividad que ustedes desarrollan hoy. Los esfuerzos que el Estado de Chile ha desarrollado desde 2022 hasta ahora son positivos, pero todavía debemos perseverar.
Creo conveniente reconocer los avances, pero también creo conveniente reconocer los pendientes. Es la única manera en que, en un sistema democrático razonable, las personas, y especialmente el sector privado, tenga confianza y estabilidad en las reglas del juego del largo plazo.
Y es que, con indiferencia de quien gobierne, los compromisos son compromisos y el Estado los tiene que cumplir. Eso es lo que está detrás, por ejemplo, de una agenda de seguridad que lleva muchos años, que entre otros ha llevado a la creación de este ministerio, después de 18 años de discusión, a 74 leyes aprobadas en materia de seguridad que tienen un origen muy distinto.
de la administración del expresidente Piñera, de esta administración, de mociones parlamentarias y que han formado parte de una estructura priorizada con un objetivo común, dotar de reglas del juego y actualizar esas reglas del juego en un conjunto de ámbitos en que el país hasta ahora no había hecho sus adecuaciones. Y un aumento en materia de seguridad y orden público del 15,3% del presupuesto nacional desde el año 2022.
Sin embargo... Podemos tener leyes y podemos tener recursos, pero si no lo gestionamos razonablemente bien, lo que vamos a tener son bibliotecas de papel. Si no gestionamos razonablemente bien los recursos públicos asignados, podemos tener una dilapidación entre inversiones urgentes y aquellas que requieren consistencia en largo plazo. Podemos tener instituciones, pero si no funcionan integradamente y de modo cooperativo, simplemente se pueden transformar en casilleros burocráticos que compitan entre ellos y que terminen por perjudicar el bien público.
El desafío del Estado de Chile es que, en el contexto de herramientas conferidas, profundice su capacidad de gestión pública en materia de seguridad. Y es que si hay algo que debiésemos tener presente para los próximos años es que el gran desafío que tiene Chile es tener un modelo de gestión pública en materia de seguridad pensado en sus resultados y no de quién es el autor del recurso de la competencia. Y también, dejar de hacer de este tema, aunque a ratos es medio inevitable, la política contingente. Y es que en seguridad, como en otros ámbitos de la política pública, la consistencia está en el largo plazo.
Así lo han planteado los gremios del transporte, ya que algunos de los acuerdos que el Estado de Chile ha llegado con este gremio, por ejemplo, se verán materializados en los próximos años y serán objeto de exhibición por próximas administraciones.
Quienes están en el gobierno y en el Estado siempre debemos tener presente que el objetivo principal es el interés general, que las acciones en favor de ese interés hoy día pueden tener resultados futuros, que serán otros los que probablemente se beneficiarán de los mismos. Pero la única manera de comprender razonablemente bien el propósito de resguardar el interés general es que todos tengamos presente que formamos parte de una cadena de compromisos que el Estado debe ejecutar. Es por eso que la única manera de avanzar en estos ámbitos no es sólo con cooperación público-privada, sino que con mecanismos de diálogo y sobre todo de cumplimiento de los compromisos.
El sector transporte enfrenta desafíos muy significativos en su condición de industria. Para el Ministerio de Seguridad, avanzar en esa reforma es también una garantía en materia de seguridad. Un transporte de carga precarizado, un transporte de carga que vive en contextos simplemente de sobrevida, es un riesgo para la seguridad pública.
Los desafíos que el país enfrenta en materia de crecimiento económico son clave. El corredor bioceánico es un buen ejemplo, pero los desafíos y las mitigaciones de seguridad requieren también de un gremio y un sector de transporte de carga fortalecido. Eso explica focalizar los esfuerzos en lograr un país más seguro. Y un país más seguro es, al final del día, un país tranquilo, con confianza y sobre todo con posibilidad de materializar los propósitos perseguidos por cada uno de nosotros.
Muchas gracias. Muchísimas gracias al ministro. Le invitamos al ministro como al presidente, al vicepresidente. Le vamos a hacer un adelante porque le vamos a hacer una entrega. Por favor, muchísimas gracias.
Ministro, entonces vamos a continuar, dar la bienvenida y los agradecimientos.
Vamos a pasar a la segunda fase, no sé si está por ahí ya Gloria Faúndez, quien va a ser quien va a dirigir este segundo bloque. Y les vamos a pedir que tengan un poco de paciencia porque vamos a ir a buscar a los invitados del panel, que son los candidatos Evelin Matei, José Antonio Kast y Johannes.
Mientras tanto, ahí viene, damos la bienvenida a Gloria Fagundes, editora general de La Tercera, quien va a moderar y a dirigir esta parte. Así que vengo en un minuto.
Perfecto. Le voy a pedir al equipo de producción, tenemos puesto en cinco minutos, por favor, subirlo a seis minutos, si es que se puede, seis minutos. Excelente, estamos listos. Para que sepan, Jorge, el del final va a ser el lugar de tres, cuatro. Perfecto. Muchísimas gracias a la gente de prensa. Afuera va a haber una sala también donde va a estar el streaming instalado para poder seguir si es que no hay espacios suficientes en el salón por asuntos de seguridad. Y mientras terminan con las últimas tres fotos, entonces contarles, bueno, a contar de los próximos segundos, Gloria va a estar a cargo de moderar.
El formato que hemos resuelto y que hemos propuesto es el siguiente. Originalmente eran cinco minutos de inicio para cada candidato; ahora lo subimos a seis después de que la candidata Janet Jara se bajó en el día de ayer a último minuto, entonces conversando con los equipos, cada candidato va a tener seis minutos al principio, va a funcionar esta vez el cronómetro, no como pasó en alguna oportunidad anterior, no se preocupe, y después al final también van a tener tres, cuatro minutos para exponer desde el podio. En medio van a haber tres bloques. Y bueno, todo va a estar conducido por Gloria. Y el orden es, ya estaba sorteado previamente, el orden es primero José Antonio K, después Evelyn Matei y al final Johanna Schaizer. Esta es en la primera fase. En la segunda fase va a ser primero Evelyn Matei y se va a ir corriendo el primer lugar de cada uno, cosa que a todos les toque en primero, en segundo o en tercer puesto. Así que, Gloria, bienvenida, muchísimas gracias y tú con la palabra.
Ya, muy bien. Muchas gracias. Se escucha bien, ¿no? Muy buenos días a todos los asociados e invitados, me dicen, de Chile Transporte, por venir a este debate. Por cierto, a los candidatos a quienes paso a presentar, aunque yo creo que no necesitan mayor presentación, José Antonio Kass, muy bienvenido. Evelyn Matei, bienvenida. Johan Skyser, muy bienvenido. Estamos acoplados, sí. ¿Ahí sí? No. Quizás mi voz cantarina, pero... ¿Ahí sí? ¿Aquí dónde es? ¿Sí? No hay problema. ¿Ahí sí? ¿Mejor? No, entonces mi voz. ¿No? ¿Algo está prendido, dice? Ah, ya. Todo de nuevo, entonces.
Muy buenos días a todos. Mi nombre, ya lo escucharon, es Gloria Faúndez, soy la editora general de La Tercera. Es un honor para mí moderar este debate, que espero sea debate y franca y buena conversación. Las reglas ya las conocen ustedes, las acaba de recordar Javier, así que José Antonio Kass, el podio es suyo para hacer la presentación general. Y ese es el minutero, porque yo sé que usted es desordenado, así que me...
cumple la hora me había dicho antes el por si acaso sí, bueno, muy buenos días gracias por la invitación saludo también a mis colegas candidatos lamento que Janet Jara se haya bajado de este debate porque mi primer minuto o minuto y medio era para plantearle a ella directamente algo. Como no está, lo voy a decir igual. Le va a llegar el mensaje seguramente a través de los medios de comunicación. Porque para este debate y para los próximos,