La patria se abre la sesión.
El acta de la sesión 109 A.V.A. queda reglamentariamente aprobada; el acta de la sesión 108 A.V.A. se pone a disposición de las diputadas integrantes de la Comisión. La señora Secretaria dará lectura a la cuenta.
Buenas tardes. Voy a dar lectura a los documentos llegados a la sesión del día de hoy.
La diputada señora Javiera Morales reemplaza a la diputada señorita Yael Yoma, y la diputada señora Marta Bravo Salinas reemplaza al diputado don Gastón Formiúlenbro.
Igualmente, el presidente de la República ha colocado nuevamente urgencia calificada de simple para el proyecto que modifica el decreto con fuerza de ley número 1 de 2005 del Ministerio de Salud, relativo a poner fin a las enfermedades en condiciones preexistentes.
Han recibido los siguientes documentos:
Un oficio del Ministerio de Justicia, mediante el cual se responde a un oficio de esta comisión en relación con las denuncias efectuadas por agresiones sexuales, la rebaja de las sanciones impuestas y los respectivos sumarios registrados en la Corporación de Asistencia Judicial de Valparaíso. En este oficio se remite la respuesta del Director de dicha corporación, que informa sobre la rebaja de la sanción impuesta al abogado jefe del Centro de Atención Jurídico y Social de San Felipe, como resultado de la investigación sumeria incubada en su contra.
Un oficio de la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales, mediante el cual se remite el estudio "Séptima Radiografía de la Mujer Exportadora", elaborado por la Dirección de Estudios de esa Subsecretaría desde 2017. Dicha Dirección, pionera en la construcción de cifras relacionadas con la participación de las mujeres en el comercio exterior y en la medición de los desafíos y brechas que enfrentan, busca relevar el aporte de las mujeres a la internacionalización de la economía chilena, ya sea como líderes de empresas exportadoras, como parte de la fuerza laboral de empresas con ventas al exterior o como integrantes de redes locales de proveedores de industrias exportadoras finales.
Un oficio de la Subsecretaría de Educación, mediante el cual se responde a un oficio de esta comisión.
Elimina las discriminaciones por edad y sexo en los planes de salud y crea el plan común de salud de las instituciones de salud previsional. Eso, presidente. Diga, ¿quién pidió la palabra? ¿Gastón? Ya. No corre el reemplazo del diputado Gastón. ¿Ya? Está bien. Ya no importa. Si está aquí, se anula el plazo. ¿Sobre la cuenta, alguien? ¿No? ¿Algún varios de alguien? ¿Tampoco?
Antes de partir, quiero recordarles que faltan todavía diputados que envíen los nombres de sus asesores para la mesa que se va a formar con DIPRES por este proyecto. Falta el diputado Cuello. Falta el diputado Romero. Falta el diputado Frank Sauerbaum. Falta el diputado Alexis Sepúlveda. Y falta el diputado Gastón Fonviulembro. Además, falta que se envíe el nombre del asesor que participará en la elección. Nosotros ya vamos a enviar el listado para que lo envíen pronto, de forma que se puedan sumar desde el principio y no después que partan.
Pasamos a la orden del día, que indica que esta sesión tiene por objeto continuar recibiendo audiencia respecto del proyecto de ley que crea el nuevo instrumento de financiamiento público para la educación de nivel superior y el plan de reorganización y condonación de deuda educativa, calificado con urgencia suma.
Están invitados el subsecretario de Educación Superior, el señor Víctor de Llana Calderón; la señora Lorraine Dearden, de University College London, junto a Natalia Valdés Aspillaga y Héctor Río Jara, a quien no le pegó mucho el inglés por si acaso; y Nicolás Barr, también del Instituto Europeo, de London School of Economics.
La señora Lorraine es quien va a exponer el estudio que solicitó el diputado Donoso, el cual creo que no está terminado, pero sin embargo tiene una presentación; según se indica, la misma se encuentra en el WhatsApp. Además, la señora Lorraine está acompañada por dos profesores que participaron en el estudio y que hablan español. También contamos con la intérprete de la Cámara, la señora Mirta Pará.
Se le dará la palabra a la señora Lorraine para que inicie su exposición. Primero, dele las gracias y la bienvenida también a Nicolás Barr, a Natalia Valdés y a Héctor Río, y a su secretario de Educación Superior.
Tiene la palabra, señora Lorraine.
Muchas gracias. Voy a compartir mi pantalla. Como que no tengo autorización para compartirla, ¿me lo pueden autorizar? No puede compartir pantalla. Y ya... thank you, la pantalla ya la estamos viendo. Entonces, como se dijo, esto es un proyecto conjunto con dos…
Otros investigadores, Héctor y Natalia, quienes son chilenos y hablan español, pueden responder todas las preguntas complejas al final de la presentación. Esto es parte de una iniciativa que fue financiada por el University College London, en la que estamos Natalia, yo y el ministro del Ministerio de Educación. Esto empezó hace aproximadamente un año e involucró el trabajo con el ministerio, utilizando sus datos y datos de otras fuentes para simular las implicaciones de las propuestas que están bajo la reforma. Ahora hemos terminado un informe y lo presentaremos en un panel internacional de expertos esta semana y la semana que viene, por lo que estamos llegando a la etapa final de este proceso. Todavía no contamos con los comentarios de los expertos internacionales, pero hoy les mostraremos los resultados de lo que hemos estado haciendo en los últimos 10 meses.
Como les dije, este es un proyecto conjunto y hay tres personas involucradas. Nick hablará acerca de la teoría de un buen diseño de préstamos después de mí. Yo no voy a pasar mucho tiempo en esto, solamente me centraré en los resultados derivados de las simulaciones, pero, analizando lo que es un buen diseño de préstamos, debemos asegurarnos de que sea accesible, costeable, sostenible, eficiente y, además, justo. No entraré en grandes detalles porque sé que Nick explicará esto con mayor profundidad en la próxima presentación.
Entonces, ¿qué es lo que estamos haciendo? Estamos utilizando los datos chilenos disponibles para evaluar las posibles implicaciones de lo que se está proponiendo en la legislación. Lo que voy a presentar es que hemos estimado varias cosas en base al trabajo realizado; entraré en detalle de lo que hemos hecho en un minuto. Hemos estimado cómo pensamos que funcionará el préstamo y cuál será la tasa de recuperación para el gobierno, es decir, cuánto del dinero inicial se recuperará después de que las personas paguen su préstamo.
Disculpen, tengo dos. Bien, vamos a ver la carga de repago para los estudiantes, es decir, qué parte de su ingreso deben destinar para pagar el préstamo. Luego, analizaremos la corriente de pagos, que corresponde a la cantidad total que el estudiante pagará a lo largo del préstamo, y por último, evaluaremos el subsidio gubernamental, o lo que le costará al gobierno, en promedio, financiar este nuevo préstamo propuesto.
Tuvimos acceso a muchos datos maravillosos de Chile provenientes de distintas fuentes y realmente quisiera agradecer a todos los departamentos gubernamentales por ello. Natalia ha pasado muchos meses en Chile reuniendo todos estos datos en un servidor seguro en el Ministerio de Educación y yo también he dedicado bastante tiempo trabajando en esto. Contamos con los mejores datos disponibles de diversas fuentes para una cohorte de estudiantes que inició la universidad en 2017, la cual será la base de nuestra simulación. Ellos formaron parte de la política de educación, se extrajeron todos los datos y se actualizaron para una nueva cohorte que comenzará en 2027. Posteriormente, vinculamos estos datos con información proveniente de otras fuentes, disponiendo de datos reales de ingresos de esta cohorte en 2022 y 2023, lo que nos permite integrar toda la información. Finalmente, simulamos las posibles ganancias de los graduados hacia el futuro.
Y esto lo hicimos utilizando datos de Chile de los cuales podemos observar, por ejemplo, la movilidad de ingresos: cómo se mueven hacia arriba y hacia abajo de acuerdo a la edad y al grupo educativo. Hemos realizado estas simulaciones y planteado los posibles caminos de movilidad para una corte fabricada que comenzará en 2027. Una vez realizadas estas simulaciones, se estiman las implicaciones del FES. En el informe llevamos a cabo numerosos análisis de sensibilidad; creo que hicimos 288 simulaciones en distintos escenarios, además de aplicar ciertos supuestos para ver qué es lo que encontramos.
En esta etapa es importante aclarar lo que no hacemos: no hemos analizado lo adecuado de las tasas reguladas ni cómo esto afecta la sostenibilidad de las instituciones, y tampoco hemos modelado el posible comportamiento de las mismas, ya sea que decidan adoptar FES o no.
Viendo los datos de ingresos, quiero señalar que, al diseñar un sistema de préstamos estudiantiles, no es suficiente considerar únicamente el ingreso promedio, como lo muestra esta gráfica. Hemos dividido la población en seis grupos, distinguiendo entre aquellos que han completado sus estudios (graduados profesionales universitarios) y aquellos que no, ya que este problema es presente. Esto muestra el ingreso promedio de cada uno de los seis grupos. Se puede observar que las personas que se mantuvieron en la educación y se graduaron en la universidad tienen un mayor ingreso, mientras que los desertores obtienen resultados significativamente peores. Sin embargo, esa es solo la media y no se puede diseñar un sistema de préstamos basándose únicamente en promedios de ingreso, sino que es necesario considerar la distribución completa.
En el informe mostramos la distribución completa para estos seis grupos. Para 2025, la línea azul en la parte superior representa el percentil 90, es decir, los ingresos sobre los cuales el 10% gana por encima y el 90% por debajo, evidenciando una gran disparidad en comparación con la media indicada por la línea negra en la gráfica anterior. Por ello, un buen sistema de préstamos debe captar ingresos de forma sostenible tanto de quienes se encuentran en la parte baja de la distribución como de quienes están en la parte alta; de lo contrario, se presentarán problemas, lo que considero es una de las razones por las cuales el sistema actual ha tenido dificultades.
Respecto a los supuestos de nuestras simulaciones, como mencioné, realizamos 288 simulaciones, concentrándonos en lo que consideramos una línea base razonable, siguiendo exactamente los parámetros de la legislación. Suponemos también que todas las instituciones que acceden a CAE y FREE en 2025 participarán en FES. Además, estimamos un aumento real de ingresos del 2%, cifra obtenida de datos de los ministerios para los graduados de educación superior en los últimos ocho años, lo que nos parece un terreno intermedio importante para las simulaciones (aplicable a todas las cohortes, aunque aquí se muestra únicamente la que comienza en 2027 para ilustración). Contamos con proyecciones del ministerio sobre el número de personas que iniciarán en 2027, y ajustamos la muestra en consecuencia. Asimismo, suponemos que los pagos a las universidades se basarán en las tasas reguladas de acuerdo al Código Único en 2025 y que se adaptarán conforme a la inflación. Como mencioné, contamos con otros análisis de sensibilidad que evidencian la importancia de estos supuestos.
Les voy a dar los dos hallazgos principales de una lámina. En nuestro escenario de línea base, creemos que el gobierno va a recuperar aproximadamente el 94% de sus gastos. Consideramos que la reforma es bastante progresiva, ya que los graduados que ganan más contribuyen en mayor medida que aquellos que ganan menos; esto constituye un seguro incorporado en relación al ingreso. Es un hallazgo importante que las corrientes de ingresos que va a recibir el gobierno se acumularán más rápidamente en promedio, en comparación con lo que sucede actualmente en el CAE. Voy a explicarles en un momento este aspecto con mayor detalle.
Los estudiantes tendrán que pagar, en promedio, un poco menos bajo FES que bajo CAE. Aunque se supone que todos quienes obtuvieron un préstamo pagarán completamente de acuerdo a las reglas —algo que en la práctica no ocurre— el desembolso total promedio es similar y ningún estudiante enfrentará dificultades, a diferencia de lo que sucede en el CAE. Esto nos muestra el porcentaje que el gobierno entrega a las universidades y cuánto se recupera, analizado por deciles de distribución de ganancias futuras.
Se definió este análisis considerando los primeros 20 años en el mercado laboral, que constituye el periodo máximo del préstamo FES, y se han colocado estos datos en deciles. De esta forma, se sabe de qué decil provino el estudiante y en qué posición terminó en la distribución de ingresos. La línea roja representa cuánto préstamo pagaron, de acuerdo a su origen, y se observa una línea bastante plana; el promedio es del 94%. Sin embargo, en el decil inferior se paga menos del 60% del monto inicial, mientras que en el decil superior se paga 1.2 veces. En conjunto, esto confirma el carácter progresivo: quienes están en el decil del 6 al 10 contribuyen más, compensando a aquellos ubicados en los primeros seis deciles.
Este análisis también se realizó por tipo de universidad y se puede segmentar por género. Se observa que la tasa de recuperación para quienes desertan es baja, siendo para los hombres aproximadamente 153% de la cantidad inicial, aunque existen variaciones significativas en términos de género. No obstante, se identificaron problemas en la tasa de recuperación para algunas personas. En algunos casos, no se puede pagar una inversión que resulta ser tres, cuatro o cinco veces mayor que el monto inicial. El gobierno es consciente de esta situación: la proporción de personas que ha pagado más de 1.5 veces la cantidad prestada por parte de la universidad es de 1.6%, pero se observan casos en los que se paga hasta siete veces.
Si bien no se trata de un problema masivo, es un aspecto que debe ser solucionado, pues se busca mantener a estas personas dentro del sistema. Es muy probable que, ante el temor de pagar múltiples veces su inversión inicial, decidan no participar en el sistema. Volveremos a este tema posteriormente.
Este es el pago promedio que se hace por cada estudiante a lo largo de su carrera; se expresa en términos de miles de pesos, de modo que, en promedio, supera los 12 millones de pesos en pago o reembolso. Sin embargo, existen variaciones dependiendo del título obtenido, ya que hay alumnos que cursan carreras que se extienden por más años, lo que incide en la longitud y duración del crédito. Como pueden ver claramente en este gráfico, se observa una variación por género y también de acuerdo a la carrera elegida.
Esto tiene incidencia en el período de pago y reembolso. Muchos estudiantes deciden incorporarse al mercado laboral, mientras que otros abandonan, generando deserción. En este sentido, se destaca también el aspecto de los subsidios gubernamentales, siendo otro escenario en el que se otorga un subsidio promedio de un millón de pesos chilenos. En el grupo de los hombres, todos completan alguna de las tres calificaciones que permiten realizar una contribución al sistema, otorgando una compensación; en el caso de las mujeres, la tasa de abandono muestra un escenario distinto, aunque la carga del reembolso se determina en proporción al ingreso que estos pueden obtener.
En cuanto al pago del crédito, en promedio, el 3,8% del salario se destina para ello, lo cual resulta completamente financiable. Entre los hombres, este porcentaje se acerca casi al 4%, mientras que en el caso de las mujeres es ligeramente inferior, alrededor del 3,7%. Esto no debería impactar el ingreso o salario, puesto que se ajusta a las normas internacionales y no excede dichos porcentajes.
Respecto a los años de reembolso, se estima un máximo de 20 años, aunque existen variaciones entre los seis grupos analizados que arrojan cifras distintas.
Voy a terminar haciendo una comparación con el CAE, utilizando solo a los alumnos que fueron elegibles en un corte simulado. Aquí se observa que existe un préstamo que equivale a la misma cantidad del CAE, considerando que únicamente se dispone de un 50% de crédito y, adicionalmente, un período de ajuste por crédito también en un 50%. Se muestra que, en efecto, el FEZ se elevará virtualmente a la misma cantidad que el CAE, aunque se sabe que aproximadamente el 60% del CAE cae en default y no es pagado, lo que genera un impacto en la garantía del Gobierno.
Resulta interesante que el FEZ avanza más rápido que el CAE, ya que el 60% de los préstamos o créditos solicitados pagan menos que lo estipulado en el CAE, haciendo que el reembolso sea más rápido, dado que se ajusta al sistema CAE independientemente del nivel de ingreso.
Les muestro, en estas tres líneas del gráfico, la línea azul que representa el FEZ, con una cifra de 12 millones; ahí se refleja el monto del FEZ.
Y luego, pueden ver que incluso bajo el sistema CAE, donde todos pagan lo que debería suceder durante el periodo del préstamo CAE, solamente en el año 54 se proyecta tener mayores ingresos. En la realidad, lo que hemos simulado es que se produce un abandono y una deserción de alumnos, por lo que, finalmente, no se efectúa un pago posterior. Tenemos confianza en que habrá una recuperación más rápida debido a la eficiencia del sistema de contingencia de créditos.
Además, es importante el punto final, que es, digamos, la carga del reembolso. Podemos ver también que el promedio es del 25.2% del pago, lo cual indica que la proporción del ingreso destinado al pago del FECI CAE no es sostenible. Esto, en términos de contingencia, tiene un impacto del 20% en el sistema CAE y observamos una progresión muy eficiente. Asimismo, dado que la empleabilidad se mantiene, el seguro también entra a jugar como parte de los ingresos. Este es el resumen de lo que hemos hecho, y lo analizaremos posteriormente.
Como conclusión, parece que lo propuesto es sostenible, equitativo y tiene un gran impacto en el mantenimiento del reembolso y en que el flujo de pago sea más rápido en el sistema. Sin embargo, existen algunos desafíos: algunos titulados con altos ingresos podrían terminar pagando, en ocasiones, incluso el costo que les costó su título. Por lo tanto, es necesario considerarlo, ya que no queremos que las personas tengan que pagar demasiado después de terminar su carrera. A modo de introducción, debe establecerse una protección sin reducir los ingresos del Estado. Aunque pareciera algo sencillo, la simulación demuestra que podríamos rescatar más dinero sin que ello represente un problema al introducir el factor ingreso en el sistema, incluso en casos de ingresos altos.
Voy a concluir aquí, pero estoy dispuesta a responder cualquier consulta que puedan tener. Muchas gracias por su atención.
Muchas gracias, señora Lorraine.
Vamos a escuchar a nuestro invitado, ya que son presentaciones complementarias a don Nicolás Barr. Creo que, al final, realizaremos las preguntas. ¿Está don Nicolás?
Muchas gracias, buenas tardes a todos. Quiero compartir mi pantalla. En primer lugar, ustedes pueden ver mi pantalla. Buenas tardes, es un placer estar con ustedes esta tarde. Me habría gustado estar en persona, pero la verdad es que mi viaje en marzo fue el número 15 que he realizado a Chile.
Estoy muy contento, sin embargo, de poder conversar con ustedes y de compartir la sesión de preguntas y respuestas. Quiero empezar compartiendo cinco lecciones a partir de la teoría económica.
Lección 1: Los graduados, los alumnos titulados, deberían compartir los costos de su titulación y de su carrera. Además de los beneficios privados, la teoría económica señala que debería establecerse un pago mayor por la satisfacción de desempeñar un trabajo mejor remunerado. También es importante tener en cuenta el trasfondo de los alumnos, ya que en algunas ocasiones quienes ingresan a la universidad provienen de sectores más acomodados en comparación con aquellos que no cuentan con estas ventajas económicas.
Lección 2: Tal como lo expresó Lorraine, los créditos bien diseñados deben presentar características esenciales, como pagos contingentes a los ingresos. Si uno solicita un préstamo para comprar una casa, necesita una garantía para ese crédito; de igual forma, pedir un crédito para financiar una carrera implica un riesgo que debe ser mitigado mediante la inversión en las habilidades del alumno. Así, se protege el crédito de riesgos excesivos y la tasa de repago permite ajustar los ingresos para que otros alumnos puedan asumir riesgos, garantizando que los créditos sean lo suficientemente grandes para cubrir todos los aranceles y contar con una tasa de interés eficiente.
Lección 3: La competencia entre las universidades es positiva, siempre y cuando los consumidores estén bien informados. Esto se convierte en una fuente esencial para asegurar la calidad, mediante encuestas sobre la experiencia de los alumnos, la calidad de la enseñanza y los resultados de su inserción laboral, lo que ayuda a contrarrestar los problemas de información, especialmente entre los estudiantes de menores recursos económicos.
Lección 4: En este sistema, el gobierno tiene un rol importante y continuo. Aunque no entraré en detalle, es fundamental destacar que, aunque existe competencia, se trata de un mercado regulado en el que el gobierno sigue apoyando a los contribuyentes para garantizar un buen esquema crediticio y que las políticas implementadas cuenten con la participación amplia de la sociedad. Este tema se retomará más adelante.
Lección 5: Para asegurar el acceso a la universidad a alumnos de cualquier estrato económico, el elemento clave es el desarrollo de un sistema central. Un premio Nobel ilustra que la tasa de retorno es más alta en el desarrollo temprano de la infancia, lo que hace posible una mayor inversión en los años posteriores, desde el nacimiento hasta la titulación. En Inglaterra se observa que, si bien una gran proporción de los alumnos que llegan a la universidad provienen de sectores acomodados y una menor de aquellos con menos recursos, la tasa de graduación y el esquema de acceso son elementos impulsivos fundamentales para que estos alumnos puedan alcanzar la titulación.
Por lo tanto, hay que tomar muy en serio a los alumnos con menos ingresos, y lo que hay que hacer en ese caso es trabajar en la etapa inicial para que puedan también graduarse con buenos niveles. Esta es la parte teórica; pero ahora veamos qué pasa con la parte política. Voy a utilizar un estudio de caso de Inglaterra, y tanto la teoría como la evidencia internacional apuntan a la estrategia en tres elementos.
El primer elemento es cómo se paga la universidad. Aquí tenemos una mezcla de aranceles, ¿no es cierto?, y del apoyo del contribuyente. El segundo aspecto es el apoyo a los alumnos, que es gratuito en el punto de uso; es decir, los créditos idealmente deberían ser suficientemente representativos de la cobertura de los aranceles y de los costos de vida. El tercer elemento es la medición de la amplia participación, enfatizando el desarrollo temprano y, posteriormente, la mejora de la información hacia el nivel de educación superior.
Además, contamos con el apoyo financiero y sus políticas, incluyendo el apoyo en la educación secundaria, y los préstamos contingentes al ingreso que forman parte de todo el ciclo educacional. Esta es la evidencia internacional. ¿Pero por qué no funciona? La reforma en Inglaterra, en el año 2006, incluyó reformas a los aranceles, donde la matrícula era de hasta 3.000 libras anualmente, además del apoyo al contribuyente y de los costos de vida realistas. Con el paso de 25 años se observa incluso la condonación y se evidencia que los alumnos de sectores menos acomodados se beneficiaron en el enfoque inicial de la estrategia de la reforma del 2006.
La estrategia, según la teoría, consiste en financiar las universidades mediante los aranceles, el apoyo del contribuyente y los créditos contingentes al ingreso. Entre el año 2006 y 2012, la gratuidad alcanzó a más del 87%, los subsidios y créditos más de un 25%, el número de alumnos creció en más de un 20% y el número de solicitantes de sectores menos acomodados superó el 53%. Debemos preguntarnos, ¿por qué ocurrió esto? Fue por una aguda elevación de la tasa de graduación en la educación secundaria.
En este programa se inicia desde el nivel preescolar, continúa con la educación primaria –donde ocurre lo mismo–, sigue con las asignaciones de mantenimiento escolar que entregan un apoyo financiero en los últimos dos años de educación superior y, finalmente, se apunta a mejorar la información de los alumnos hacia la educación superior.
Por lo tanto, tenemos la teoría y la evidencia. Ahora quiero utilizar el tiempo que me queda para compartir algunos pensamientos respecto a la reforma y las propuestas en Chile. Yo apoyo absolutamente la dirección que se ha propuesto y las reformas que se han implementado, y los parámetros del diseño actual son muy prometedores en términos cuantitativos. Sin embargo, existe un riesgo de sobresimplificación, ya que los aspectos económicos son bastante directos y, obviamente, también los aspectos políticos. Esto puede dificultar reconocer problemas políticos que vayan en la dirección opuesta. Aplaudo el hecho de que en Chile esto se esté manejando muy bien por los políticos; y, como ustedes conocen el diseño, se complementa con las características deseables en las reformas, elaboradas a partir de elecciones y experiencias anteriores, y con la incorporación de préstamos bancarios convencionales relacionados con las inversiones del sector financiero.
Y luego tenemos que no hay incentivo para los bancos para que puedan conseguir sus reembolsos. Y luego, como ya dije, cumplir con los principios que se discutieron anteriormente: un sistema nacional, un sistema bancario, un sistema de pago a través del sistema tributario y un préstamo que sea suficiente como para poder mantener una educación superior libre, digamos, para la mayor parte de los alumnos, con una educación gratuita en las universidades para la mayor parte de los alumnos. Y luego, entonces, estas cifras parecieran ser muy positivas, pero hay algunas preguntas que requieren, digamos, un poco de ajuste. Primero, ¿esto es un crédito o un impuesto al graduado, a la carrera que se estudió? ¿Qué pasa? ¿Cuál es el rol de la educación superior gratuita? ¿Y cuál es el rol de los subsidios?
Y quiero tomar esto uno a la vez. En un crédito, meramente como tal, lo que paga el alumno está relacionado con el tamaño del crédito, con el monto del crédito, y así es donde se entra en el reembolso. Pero, en un aspecto simplificado, la duración de este reembolso se detiene después de un número determinado de años. ¿Y por qué? Porque el pago no está relacionado con la magnitud del crédito, sino que, obviamente, tiene que ver con el ingreso, con el monto que ellos pidieron.
El argumento a favor de tener un impuesto sencillo para los graduados es fácil de entender y es bastante redistributivo. Lo que está en contra es que es dinero público, es un modelo de economía cerrada; es decir, que es difícil recolectar estos pagos de los estudiantes que trabajan fuera de Chile y, potencialmente, es un problema político si no hay un límite al sobrepago. Es decir, si Bill Gates hubiera tomado un impuesto de graduados, él estaría financiando la mitad de la educación superior de Estados Unidos, y eso no es sostenible.
Ahora, argumentos por y en contra de un préstamo puro. Esto puede ser un mejor arreglo cuando los aranceles varían, pueden ser financiados con dineros privados y el pago puede hacerse cumplir en los graduados que trabajan en otros países. En contra, se enfoca la atención en la deuda total que el estudiante ha acumulado, y estos pueden ser grandes números que pueden ser muy aterradores y causar problemas políticos. Y esto ha sido un error que hemos cometido en el debate en el Reino Unido, porque dejamos que los ingresos y los préstamos fueran demasiado grandes. Entonces, esto es un híbrido. El sistema del Reino Unido es un préstamo para los que ganan bien y que pagan todo en su totalidad, pero el impuesto graduado es un pago que se detiene después de 40 años o 30 años, dependiendo de cuánto el estudiante tomó el préstamo; cualquier cosa que no se haya pagado se condona. Y podemos tener un impuesto máximo de graduados —es decir, un repago por 20 años, como en Chile—, pero estos pagos tienen un límite del 125% del préstamo, de manera que nadie vaya a pagar más del 25% adicional de lo que pagó. Esa es una simulación que muestra que este es el caso también con el PES. En este aspecto, la reforma propuesta es híbrida.
El segundo punto es si algunas personas deberían tener la educación superior gratuita. El argumento de este sistema gratuito es que no debería ser demasiado subrayado. En el Reino Unido, cuando no había aranceles y los estudiantes tenían subsidios para los costos de vivienda, uno esperaría que muchas personas pobres fueran a la universidad, pero no lo hicieron. Había una cita del ministro de Educación que dice: “Si yo fuera un socialista real, no gastaría un centavo en educación superior; lo gastaría en la educación parvularia”. Así que la pregunta económica es: ya que el préstamo hace que la educación superior sea gratuita para todos los estudiantes, ¿no sería mejor, en vez de utilizar los recursos para darles a algunos estudiantes un arancel libre, sino más bien pagarles para el apoyo?