Ponemos de pie. En nombre de Dios y de la patria se abre la sesión. La señora secretaria entonces dará lectura a la cuenta.
Sí, presidente. Bueno, le hemos enviado al WhatsApp un informe, un estudio, que recibió la Biblioteca del Congreso Nacional, lo que lo hace normalmente, pero ahora además se llama Coyuntura Económica Nacional y Escenario Internacional. Agrega cuál es la mirada internacional sobre el tema que tanto preocupa, entonces se los mandamos por WhatsApp. Además, señala que incluye IMASEC, IPC, índice de empleo, tasa de política monetaria, tipo de cambio nominal, intercambio comercial y algunos aspectos generales del contexto de economía internacional.
Y les quiero decir también que el sistema está con problemas, por lo tanto deberán guiarse por la presentación que se va a proyectar. No vamos a poder colocarla directamente, pues no se puede proyectar; se visualizará únicamente en papel mientras tanto. Ya se va a proyectar, porque el sistema está con un problema en la cámara, digamos.
Muy bien, ¿alguna palabra sobre la cuenta, colega? ¿Ningún comentario o aportación? Muy bien.
Entonces, esta sesión tiene por objeto recibir al señor director del Servicio de Impuestos Internos para presentar los resultados del estudio de evasión tributaria corregido, así como las principales medidas de fiscalización que están tomando para disminuir esta evasión. Está invitado el director del Servicio de Impuestos Internos, el señor Javier Etcheberry Celhay, junto con su subdirectora de fiscalización, señora Carolina Saravia; el subdirector de gestión, estrategia y estudios tributarios surrogantes, el señor Eduardo Pantoja; y el asesor, el señor Michel Llorat. Bienvenido a todos, director, bienvenidos a todos. Así es que le ofrezco la palabra.
Gracias, presidente. Esto es una continuación de una reunión, de una sesión en que yo vine recién asumido como director de Impuestos Internos subrogante, en ese tiempo en que me pidieron información sobre el informe que había encargado el Servicio de Impuestos Internos…
Michelle Jurrat. Y yo, en ese momento, di las explicaciones pertinentes, señalando que venía llegando y que no había tenido tiempo de trabajar en detalle el tema con Michelle. En esa reunión también se me preguntó exactamente qué acciones iba a emprender como director del Servicio de Impuestos Internos para fiscalizar y asegurar el cumplimiento de la ley tributaria. Entonces, expliqué brevemente el planteamiento en que me encontraba, aclarando que, al venir recién llegando, me comprometí a que, una vez revisado el informe y analizado en detalle, vendría a presentarlo acá.
Michelle Jurrat, que ha trabajado con nosotros durante todo este tiempo, fue precisando muchos temas, pues había aspectos que no se entendían plenamente. Al abordarlos con mayor detalle, se consigue, creo, un entendimiento mucho más claro. La importancia radica en que, al identificar adecuadamente las brechas de cumplimiento, es posible dirigir la fiscalización de modo que se reduzcan dichas brechas. Nunca en un país se puede lograr que todo el mundo cumpla al 100%, porque hay quienes no quieren cumplir, quienes no saben hacerlo, quienes encuentran el proceso demasiado complicado o quienes creen que no serán sorprendidos. En fin, se trata de múltiples razones, ya ampliamente estudiadas y presentes en el quehacer de todos los servicios de impuestos internos en el mundo. Por eso, es tan importante medir la evasión.
Ahora, le pedí a Michelle, si le parece, presidente, que exponga, ya que nosotros les enviamos el informe esta mañana, junto con una presentación que sintetiza los principales elementos del informe y las principales medidas tributarias que estamos implementando para fiscalizar.
Presidente, si le parece, podemos iniciar con la presentación enviada esta mañana. Le pediré a Michelle que vaya exponiendo y usted determine en qué orden se realizarán las preguntas – si serán al final o en el momento que usted lo considere oportuno –, pues disponemos de todo el tiempo necesario para ofrecerles todos los antecedentes sobre estos temas.
Muy bien. Muchas gracias, director. Entonces, le vamos a ceder la palabra a don Michel Llorar y, a continuación, a la señora Carolina; más adelante, abriremos una ronda de preguntas.
Tiene la palabra, don Michel.
Muchas gracias, presidente. Vamos a seguir la presentación en papel. Voy a indicar el número de hoja que estoy revisando; pasamos a la hoja 2. En ella se muestra la estructura del informe entregado en la mañana. La explico brevemente: el informe consta de un resumen ejecutivo; luego, presenta un primer capítulo –una introducción– en el que se definen varios conceptos y se exponen cifras históricas de las estimaciones realizadas por el Servicio de Impuestos Internos.
Posteriormente, se aborda en el capítulo 2 el tema del IVA. En este apartado se describen las metodologías de estimación de la evasión basadas en cuentas nacionales. El informe desarrolla dos metodologías: una denominada método del valor agregado y otra, método del IVA no deducible, ambas explicadas con detalle y acompañadas de sus respectivos resultados.
Enseguida, dentro del IVA, se presenta una metodología para estimar la evasión de IVA por informalidad, a la que llamamos la brecha de IVA por informalidad. Luego se expone una estimación de la brecha de IVA por ventas sin boletas; posteriormente, se detalla la metodología para medir la incidencia de facturas falsas, seguida de otra para medir la evasión por manipulación de la proporcionalidad del IVA –fenómeno que se da en los contribuyentes que registran simultáneamente ventas grabadas y exentas de IVA.
Finalmente, se muestran lo que hemos denominado mapas de brechas.
En este caso, se presenta un mapa de IVA, que actúa como síntesis de lo que podemos decir sobre cómo se distribuye la evasión. Luego, el capítulo 3 se enfoca en el impuesto de primera categoría y parte describiendo el método de estimación general, que es el de cuentas nacionales, con el máximo detalle posible. A continuación, se describen y se muestran los resultados de la medición de informalidad. Seguidamente, se ofrece una estimación de brechas de origen común con el IVA, es decir, se explica cuánto de la evasión del IVA se traslada a primera categoría. En cuarto lugar, se expone una metodología diseñada para detectar inconsistencias entre los registros administrativos y los registros contables de la empresa, lo que evidencia una cierta brecha. Finalmente, se presentan mapas de brechas del impuesto de primera categoría.
En el capítulo 6 se aborda el impuesto a la renta personal, que incluye el global complementario y la segunda categoría, es decir, los impuestos que pagan las personas naturales. Se describen dos metodologías: la primera para medir la evasión en el sector formal, basada en ajustes a las declaraciones de impuestos a la renta considerando antecedentes de las cuentas nacionales; y la segunda para medir la informalidad, refiriéndose a la evasión del impuesto personal por este concepto. Además, se muestran nuevamente mapas de brechas en el impuesto a la renta personal. Por último, se incluye un capítulo de resumen y conclusiones.
En la página 3 se presentan definiciones fundamentales para lo que se va a conversar. Se mide la evasión en el sector formal e informal, por lo que primero se define qué se entiende por informalidad en este contexto. Así, en el caso de IVA y primera categoría se consideran informales aquellas personas que realizan actividades económicas gravadas con IVA y con primera categoría —o únicamente con primera categoría—, pero que, según la encuesta utilizada para medir informalidad, reportan no estar registradas en el Servicio de Impuestos Internos. En el caso del impuesto a la renta personal, se definen como informales dos grupos de contribuyentes: primero, a las personas que realizan actividades por cuenta propia o como empleadores y que reportan no estar registradas en el Servicio de Impuestos Internos; y segundo, a aquellas que declaran recibir rentas del trabajo dependiente, pero cuyos empleadores no pagan las cotizaciones previsionales, por lo que tampoco se retiene el impuesto de segunda categoría.
Asimismo, se abordan algunas brechas utilizando un lenguaje más coloquial. Se menciona la “brecha por venta sin boleta”, término que se utiliza para referirse a cualquier subdeclaración de las ventas al consumidor final, donde lo esencial es la venta sin boleta. Por otro lado, cuando se habla de “brecha por facturas falsas”, se hace referencia al uso de créditos de IVA sin que exista una contraparte que declare los débitos correspondientes.
A continuación, en la página 4 se presenta el título y se inicia la discusión sobre las brechas de cumplimiento de IVA, para lo cual en la página 5 aparece un gráfico. Cabe destacar que, en general, el estudio se realizó para cuatro años, de 2018 a 2021; sin embargo, para el IVA se utilizó una segunda metodología denominada “IVA no deducible”, la cual permite contar con cifras preliminares o provisorias hasta años más recientes, en este caso hasta 2023. Así, se observa que para el IVA se mide una tasa de incumplimiento del 20,8% en 2018, que desciende hasta un 17,1% en 2020, experimenta luego una importante baja al 13% y retoma cifras en torno al 17–18% en los dos últimos años. Es importante destacar que, en todos los métodos para medir la evasión, se observa una reducción considerable en el año 2021; sin embargo, estos datos deben interpretarse con precaución, ya que los años 2020 y 2021 corresponden a periodos de pandemia, lo que podría explicar una reducción efectiva de la evasión, posiblemente debido a los recursos inyectados en la economía y al mayor gasto en comercios, que suelen ser más formales y de mayor escala.
Tanto no hay evasión, o también la otra hipótesis es que, por las turbulencias de esos años, las cuentas nacionales pueden haber tenido menor calidad. Esa es una explicación que se plantea, ya que este fenómeno ocurre también, por ejemplo, en la Unión Europea, que realiza cada año una medición de evasión de IVA. Entonces, ellos sugieren que, probablemente, debido a las condiciones de la época, las cuentas nacionales no hayan podido reflejar de manera adecuada los efectos de la inyección de recursos, etcétera.
Bueno, lo que pasa es que es difícil saber con certeza lo que pudo haber ocurrido. Hay que pensar que, en esa época, la gente permaneció en su casa, lo que determinó que el tráfico se redujera, me imagino. Es una teoría, basada en lo que se observa en la Unión Europea, donde se comenta que esta situación pudo haber afectado el desempeño de quienes trabajan, ya que en condiciones normales es más fácil proyectar que en situaciones extraordinarias. También se argumenta que, quizá, no fue posible captar todos los efectos, aunque está la hipótesis de que realmente pudo haberse reducido la evasión, como se refleja en la elaboración de las cuentas nacionales por parte del Banco Central.
Disculpe, don Michelo. Ordenémonos un poquito. Diputado Bienqui tiene la palabra. – Sí, tiene que hablar. Gracias, presidente.
Punto importante. Primero, agradezco la exposición que se está realizando. Respecto a esta baja del 13%, se puede razonar que existió menor informalidad. Pero, ¿qué se dice en el resto del mundo? Yo quisiera, por su intermedio, presidente, que el señor Rolán nos informe, ya que esta conducta pudo haberse observado a nivel mundial. No tengo duda de que en el mundo entero se obtuvieron resultados similares, con una reducción en la informalidad. ¿Qué dicen algunos estudios comparativos sobre la baja del 13% en el ámbito de las informalidades en el año 2020 o 2021?
La verdad es que, si nos remitimos a lo que indica la Unión Europea —que es la mejor fuente que hemos encontrado—, en el informe del año 2022 (o del 2023) se evidencia que pudo haber ocurrido un fenómeno en el que las personas consumieron y pagaron, principalmente, con medios electrónicos, lo cual complica la evasión. A esto se suma el fenómeno de los apoyos, porque lo que se esperaría, y hay evidencia de ello, es que cuando hay recesión económica la evasión aumenta; sin embargo, aquí se observa lo contrario. Según ello, las ayudas del gobierno evitaron esas quiebras y, por lo tanto, reforzaron el cumplimiento tributario. Esa es la hipótesis que se plantea, en el contexto del análisis sobre la Unión Europea.
Además, al año siguiente se agrega otra hipótesis: que, producto de las turbulencias de la época, las cuentas nacionales pudieron haber perdido precisión estadística o calidad, no reflejando adecuadamente lo ocurrido. Eso es lo que se sabe, pero no existe certeza.
Ah, ya, perfecto. Entonces, ahora... ¿eso lo puedo cambiar yo? Ah, ya. La anterior... ah, pero eso no se ve muy bien. Mejor revisemos aquí. Bueno, después, se presenta una tabla que llamamos mapa de brecha de cumplimiento. Gracias, presidente.
Lo que sucede es que, al observar el cuadro que se encuentra debajo de la gráfica, en el que se distinguen un indicador teórico, uno efectivo y la brecha, resulta curioso que, después del año 2021, se produzca un gran cambio en esa brecha.
Hay un salto tan significativo, digamos, en torno a la brecha. Se observa una disminución de la brecha desde el año 2020 hasta el 2021, pero un aumento muy significativo desde el año 2021 al 2022. Por ello, me gustaría que se aclarara en qué consiste el teórico, el efectivo y por qué la brecha se mueve tanto en esta comparación. Gracias, Presidente.
Sí, bueno, efectivamente. Primero, el IVA teórico o recaudación teórica es lo que se habría recaudado con un 100% de cumplimiento, y el IVA efectivo es lo que realmente se recauda; la brecha es la diferencia. Se observa un salto en 2021 y en 2022, no solo en la brecha, sino también en la recaudación teórica y en la efectiva.
Lo primero es que estos datos están en pesos nominales. Además, se produjo un aumento importante en el consumo de los hogares en el año 2021, el cual se mantuvo posteriormente, y a ello se sumó la inflación de esos años, ya que las cifras se expresan en millones de pesos nominales cada año. Esos dos fenómenos explican el aumento: el incremento en el consumo de los hogares y la inflación.
Aparte de esta estimación global, también medimos las brechas o el incumplimiento en función de la formalidad, la informalidad y las diferentes formas de incumplir el IVA. En la página 6 se presenta un cuadro titulado “Brecha de cumplimiento en el IVA por año y tipo de incumplimiento”, en el que se expresa la evasión total en porcentajes. Se observa que, de una evasión total del 100%, un 84,2% proviene de la economía formal, mientras que el 15,8% restante corresponde a la economía informal.
Dentro de la economía formal nos referimos a aquellas empresas que han iniciado actividades; sin embargo, esto no implica que cumplan al 100%. Por ejemplo, cuando una empresa formal no emite la boleta 190, está incurriendo en evasión, o cuando incorpora una factura falsa, se realiza una maniobra de evasión. Por otro lado, en el sector informal se encuentran las personas que no han iniciado actividades, como, por ejemplo, quienes venden en la calle y otras que, al no estar registradas en el Servicio de Impuestos Internos, no pagan impuestos.
Nos guiamos, generalmente, por datos del año 2018. Actualmente, estamos fiscalizando a las mafias y colaborando en esa tarea, habiendo descubierto que, incluso, las mafias más importantes han iniciado actividades y presentan declaraciones de impuestos. Lo que sucede es que sólo un porcentaje pequeño de sus operaciones se registra formalmente, mientras que la mayor parte se realiza en negro. No obstante, por alguna razón, buscan aparecer correctamente ante el Servicio de Impuestos Internos; por ejemplo, al operar un camión, requieren contar con guía de despacho. Es decir, incluso las mafias tratan de estar formalizadas de acuerdo a la definición de Vicente.
Pongámosle nombre a la mafia: en su gran mayoría, el comercio chino. He insistido de forma permanente, tanto al propio director como, en esta oportunidad, a Carolina presente, para que se nos haga notar cuál es la fiscalización que se realiza a este comercio chino. Y, si bien se han clausurado algunos comercios en diversos lugares del territorio, aún no existe un análisis claro. Por ello, solicito, por este intermedio, al Director del Servicio de Impuestos Internos que nos presente un análisis de cómo se fiscaliza el comercio chino.
Hay acá un análisis efectivamente de todo ese comercio que está establecido a lo largo de Chile, con los efectos que ha traído también para el comercio que sí entrega boletas. Con quienes hemos conversado, todos señalan el alto nivel de evasión en el pago del IVA de las boletas. Entonces, yo no sé si se ha hecho algún análisis más profundo de la mera inspección que se realizó cuando solicitamos aquello, porque ahí sí que hay una evasión altamente significativa: quieren mostrarse bien, pero a la postre están vendiendo en negro.
Efectivamente, estamos fiscalizando a todos los comercios, según indica el diputado, pero explicar todo lo que estamos haciendo nos llevaría, tal vez, otra ocasión. En todo caso, en la segunda parte de esta exposición la subdirectora va a detallar todas las acciones en curso. Le puedo decir al diputado que sí estamos trabajando intensamente tanto con contribuyentes como con no contribuyentes, según a lo que se refiere.
Bueno, volviendo a este cuadro: si nos guiamos por los datos de 2018, el 84% de la evasión se encuentra en el sector informal y alrededor del 15% en el sector formal. Dentro de la formalidad, las ventas finales sin comprobante o sin boleta explicarían casi el 30% de la evasión de IVA, considerando que se separa por producto o actividad —un 13% en el comercio, un 5,8% en construcción, etc.
Luego, se identifica un 17% de evasión detectada a partir de facturas falsas. A continuación, un 20% de la evasión se da por la manipulación de la proporcionalidad del IVA en el caso de contribuyentes que tienen ventas grabadas y exentas de forma simultánea, es decir, ingeniando para aprovechar una mayor parte del crédito de IVA, ya que cuando alguien vende grabado y exento solo tiene derecho a crédito en proporción a sus ventas grabadas o en relación a las compras que están vinculadas exclusivamente a la actividad grabada. Así, hay empresas que vulneran esta norma, lo que se detalla por actividad.
Finalmente, en la última fila, correspondiente al residuo, no hay una estimación directa, sino que se asocia un residuo del 17% de evasión a la imputación de compras no acreditables o a compras personales a nombre de una empresa —una forma típica también de pagar menos IVA— y a ventas intermedias sin factura. En general, aunque al comprador le interesa solicitar la factura porque representa un crédito, existen situaciones en que no lo hace; por ejemplo, muchas empresas formales pueden estar abasteciendo al comercio informal, y al comerciante informal no le interesa pedir la factura, lo que genera ventas sin comprobante.
En lo que ustedes presentan se evidencia una fuerte disminución de las ventas finales sin comprobante, ya que, comparando los años 2018, 2019 y 2020, se observó una bajada del 21% al 9,8% en 2021. Esto indica, en parte, un incremento del comercio formal, aunque persisten altos índices de evasión. ¿Cómo se explica esta baja tan marcada?
Es, precisamente, lo que comentábamos al comienzo: el año 2021 presenta múltiples problemas. Es un año especial que no debe analizarse de forma aislada, pues la estimación de informalidad aumenta considerablemente, mientras la evasión de IVA decrece notablemente. Existe algo inusual que ocurre también en otros países, por lo que no usaríamos estos datos para sacar conclusiones sin mostrar el trabajo completo realizado.
En la página siguiente —la página 7— se encuentra la sección de informalidad, que en 2018 representó un 15,8% y se detalla por actividades.
Económicas. Esta estimación de informalidad se hace en base a la encuesta suplementaria de ingresos y permite concluir que hay un 4,9% de la brecha de IVA que se produce en el comercio informal, un 4% en la construcción informal y un 2,8% en la agricultura informal, etc. Pero esas son las tres principales.
Si vamos a la página 8… ah, bueno, ahí está. Esto lo vamos a pasar rápido porque es lo mismo, pero en miles de millones de pesos nominales. Ahí, si después le llama la atención algo, por ahora podemos ir a la página 11. La 10 no es cierto; aquí vamos a hablar ahora de la brecha del impuesto de primera categoría. ¿Ya lo hablamos? Ah, perdón. Presidente, perdón.
Lo que pasa es que sí o sí tenemos que hacer un análisis; no puede llegar y pasar el 2021. Es fuertemente el sector informal, es demasiado en plata, es fuerte. Entonces, tiene que haberse hecho un análisis más profundo del 2021 de lo que pasó ahí, producto de demasiado, con respecto a los otros años, digamos. O sea, el otro año era más o menos parejito, ¿cierto? Y pegó un salto el 2021, muy fuerte, muy fuerte. Entonces, tiene que haber un análisis de algo ahí, una explicación.
A ver, sí, es que nuevamente, como decíamos, el año 2021 tiene en general problemas, ¿no es cierto?, que se han relevado también en otros países del mundo. Entonces, por un lado, lo que es la economía en total, aparentemente las cuentas nacionales subestiman y por eso es que la evasión global de IVA baja tanto, baja a un 13%, que es como algo que nadie espera. En la medida en que la evasión global baja, la informalidad tiende a aumentar en proporcionalidad. Eso por una parte. Yo sé que también en monto aumenta, que es lo que dice el diputado; entonces, por eso es que pasa a representar un 25%. Ahora, también aumenta en monto, y eso está medido a través de la encuesta suplementaria de ingresos. Se cree, ¿no es cierto?, que en ese año no hubo tanta informalidad y, por lo tanto, una hipótesis —pero que nosotros no podemos validarla— es que, así como también las cuentas nacionales pueden haber perdido calidad, probablemente el levantamiento de encuestas también. Hay que recordar que la encuesta suplementaria de ingresos se hace entre septiembre y noviembre de cada año y, bueno, en periodo de pandemia no sabemos mucho qué tan bueno fue ese levantamiento. Entonces, claro, efectivamente da para un análisis de qué es lo que refleja la economía informal en esa encuesta. Pero puede haber también problemas del levantamiento de información o problemas reales, ¿no es cierto?, de que efectivamente haya habido más informalidad. Hay que recordar siempre que este es un año muy especial también para el levantamiento de encuestas y para las cuentas nacionales.
Gracias, presidente. Es que sabe que está mirando lo que no me cuadra. Mire, director, perdón: en la página 5, cuando nosotros vemos la tasa de incumplimiento completa, vemos que en 2018 era de 20,8 y en 2021 baja a un 13, tal como usted lo explicó claramente. Pero cuando vemos la última página, que se mencionó bastante rápido, con los montos en peso, no me cuadra que baje tanto el IVA, o sea, baje en el fondo esta tasa de incumplimiento. Sin embargo, cuando uno empieza a mirar los factores en cada uno –ventas finales, facturas falsas, manipulación de proporcionalidad (en 2018 fue 933 y en 2021 sube), la imputación de compras no acreditadas, ventas sin factura (en 2018 fue 800 y en 2021 sube a 810)– entonces a mí no me cuadra; ¿no debería mantenerse toda una misma tendencia? ¿Por qué hay tendencias que no mantienen la misma proporcionalidad? ¿Hay alguna explicación que le llamó la atención a ese fenómeno?
Usted dice que baja, ¿está mirando este cuadro? ¿La página 8 o 6? ¿La 8 empezó?
A ver, lo que pasa es que aquí hay una mezcla de metodologías, pues son distintas para cada cosa. Entonces, existe una metodología base, que son las cuentas nacionales, y dicha metodología—como ya hemos explicado dos o tres veces—arroja una tasa de evasión muy baja en ese año que presenta problemas.
Allá voy. En cambio, la metodología que se utilizó para medir la evasión por proporcionalidad en el IVA no utiliza las cuentas nacionales, sino que se basa principalmente en información efectiva y mezcla algunos factores de las cuentas nacionales. Esa es, fundamentalmente, la explicación de por qué esa tasa puede subir y la otra no, ya que no está ligada a las cuentas nacionales, que es justamente lo que presenta el problema.
Ahora, recuerde que, cuando la economía crece, las bases tienden a expandirse en general, pues son mayores. Básicamente, ese es el problema. De hecho, insisto que el año 21, ¿no es cierto?, tiene muchos inconvenientes. Habíamos pensado asignarle un color especial, pero se nos olvidó.
Entonces, ¿dónde estábamos? Vamos a hablar de la evasión en primera categoría. La página 11 muestra un ejercicio fundamental para entender las tasas de evasión de primera categoría, en el que se analiza qué tasa de incumplimiento de este impuesto es compatible con un IVA del 20%. Este ejercicio corresponde a una empresa promedio, que no es inventada, sino que representa la estructura de ingresos y costos según lo reflejado en las cuentas nacionales.
Si observan, aparece primero una columna que dice “sin incumplimiento”. En esa situación, la empresa promedio podría vender 100; de esos 100, se registran compras por 58, según las estadísticas de las cuentas nacionales, lo que deja un valor agregado—base para el IVA—de 42. Luego, además de las compras, la empresa incurre en otros gastos, como el pago de remuneraciones, depreciaciones, etc., que ascienden a 24, dejando una utilidad de 18.
Así, si se calcula lo que debería recaudar la empresa en IVA e impuesto de primera categoría, el IVA equivale al 19% del valor agregado, es decir, el 19% de 42, lo que suma 8; y, de primera categoría, si se aplicara un 27% sobre la utilidad, el monto a pagar sería 4,9.
En la columna siguiente se muestra qué sucede si la empresa promedio subdeclara el 1% del IVA (haciendo referencia, en el caso del impuesto de primera categoría, a la fila E por 27, y en el IVA, a la fila C por 19). Así, en lugar de declarar 100, declara 99, manteniéndose constantes los demás valores. Por ende, el pago de IVA bajaría de 8 a 7,8 y el de primera categoría de 4,9 a 4,6. Esta brecha en la tasa de incumplimiento se traduce en una evasión del 2,4% en IVA y del 5,6% en primera categoría, es decir, el mismo peso que no se declaró en las ventas genera tasas de evasión de 2,4% en IVA y de 5,6% en primera categoría.
En la lámina siguiente, en la página 12, se presenta el mismo ejemplo, pero ahora suponiendo que la empresa subdeclara el 8% de sus ventas; es decir, en lugar de declarar 100 pesos, declara 92, mientras que, por lo demás, 8 no da boleta, por ejemplo. Esto conduce a que el IVA, que en la situación sin incumplimiento era de 8, pase a ser 6,5, representando así una tasa de evasión de 19%, más o menos como la que se está midiendo. Sin embargo, en primera categoría, de un impuesto...
Sin incumplimiento de 4,9, pasamos a 2,7 y eso representa una tasa de evasión de 44,4%. Esto es, hay un efecto aritmético que hace que, para la misma cantidad de ingresos evadidos en el IVA, la tasa de evasión en primera categoría sea más del doble que la que se mide en el IVA. Otro ejemplo interesante es que, a veces, uno puede pensar que cuando se dice que la empresa evade un 40% no se está indicando que no declara el 40% de sus ventas. Para lograr una evasión del 40% –44%, como se menciona acá– sería suficiente con subdeclarar el 4% de los ingresos y sobre declarar el 4% de los gastos, lo que arroja una tasa de evasión del 44% en primera categoría.
Con ese antecedente, en la página 13 se encuentra el resumen de la estimación general del incumplimiento de primera categoría, basado en el método de cuentas nacionales, que arroja los siguientes resultados: en 2018 se mide una tasa de 44,9%, que pasa a 45,4% en 2019, sube a 48,9% en 2020 y en el año 2021, nuevamente, la tasa cae a 28%. No se sabe cómo se comportará después, pues aún no se cuentan con los datos para estimar los años 2022-2023; sin embargo, si se piensa en lo que ocurre en el IVA, esto tenderá a acercarse a las cifras anteriores a 2021.
En el gráfico se observan dos números: la parte celeste refleja la evasión de primera categoría con un origen común al IVA. Es decir, de la tasa del 44,9% hay 30,3 puntos que se explican exclusivamente por el traslado de las mismas formas de evadir el IVA, y la otra diferencia de 14,7 puntos corresponde a formas de evasión no asociadas al IVA. Esto significa que, al menos en 2018 y 2019, más de dos tercios de la evasión de primera categoría se derivan de las mismas prácticas de evasión del IVA.
Respecto al impuesto a la renta, la evasión puede ser mayor por dos razones: una, porque las empresas tienen gastos que no forman parte de la base del IVA –como remuneraciones, honorarios, ganancias, pérdidas de capital, entre otros–; y dos, porque no todas las actividades que pagan primera categoría están afectas al IVA. Muchas actividades, como las exportaciones, tienen tasa cero en el IVA, pero forman parte de la base imponible de primera categoría.
Se preguntó, asimismo, si en primera categoría se distingue entre grandes empresas o según el tamaño de las mismas, o si la estimación es general, y si en la base calculada existe algún componente que no sea tributario, como ciertos gastos o deducciones (por ejemplo, descuentos por gastos, amortizaciones u otros conceptos no tributables).
Gracias, presidente.
En respuesta, se aclara que el método consiste en construir la base imponible sobre la cual se aplica el impuesto, descontando todos los gastos a que tiene derecho la empresa, tales como depreciaciones, amortizaciones deducibles, utilidades acumuladas y pérdidas acumuladas. El informe detalla, línea por línea, este proceso. Cabe señalar que las cuentas nacionales no permiten distinguir por tamaño de empresa; sin embargo, más adelante se menciona algo sobre los sectores institucionales, tema que se abordará a continuación.
Muchas gracias, presidente.
Se ha tratado de instalar muchas veces la opinión pública de que el gran empresariado no pague impuestos. No, no, no, es que eso es sin tal fundamento. Aquí hemos tenido horas discutiendo reformas y hemos hablado de este tema. Entonces, yo escucho respetuosamente a mis contrapartes, y sin enteder que se pretenda que el gran empresariado sea el que no pague impuestos. Para mí, no es menor esa distinción, presidente. Gracias.
¿Se podría explicar bien lo siguiente? El impuesto teórico: ¿de dónde lo sacan? ¿Cómo colocan el impuesto teórico? Según usted, ¿significa que todas las empresas deberán tributar de acuerdo a las ventas que tienen? Porque el director Etcheberry ha manifestado que la evasión de impuestos corporativos no proviene de las grandes empresas; eso lo dijo públicamente, digamos. Además, las empresas pymes aquí solo representan un 13% de las ventas, según el impuesto interno. Entonces, uno tiene que saber cómo explican ustedes una evasión del cuarenta y tantos por ciento que se presentó en 2020, equivalente a un total del 4,7% del PIB, a pesar de tres reformas tributarias, de mayores atribuciones del Servicio de Impuestos Internos y del aumento de la evasión. No me cuadra, y parto de la base de cómo se extrae el impuesto teórico y, de acuerdo a otras explicaciones, se entiende que con más distribuidores hay más opciones.
Presidente, por su intermedio, cuando uno habla de las grandes empresas, pongamos los bancos, la sociedad anónima abierta, la compañía de agua o de gas, prácticamente no evaden impuestos. Sin embargo, y esto es lo que se sabe y lo que sale en el mismo informe, hay sectores en que existen empresas, que si bien no son "pequeñas", evaden en gran medida. Por ejemplo, sectores intermediarios en el agro; hay sectores de insumos y de intermediarios en la minería. También lo hemos visto nosotros, y quiero decirlo, que a veces las personas con altos patrimonios, que son dueñas de estas grandes empresas como accionistas, tienen sus propios mecanismos para tratar de traspasar recursos a sus descendientes, o cuentan con dinero en el exterior y tratan de no tributar por esos recursos, o realizan, entre sus propias empresas o acciones, asimaciones de ventas y compras. Muchas veces lo conocemos con la subdirectora, pues la ley nos obliga a fiscalizar y podemos accionar, y de hecho hemos accionado por elusión. O sea, los grandes no solo son las empresas de gran tamaño, sino que también hay dueños de empresas que recurren a una serie de figuras. Asimismo, existen otros sectores muy grandes y que están al margen, auténticas, no sé si bien o mal la palabra mafia, pero son empresas grandes también, que transportan numerosos productos, cuyas guías de despacho son falsas o irregulares. Por ello, no es adecuado generalizar diciendo "empresa grande", al igual que banco o sociedad anónima abierta, ya que hay muchos otros sectores de gran envergadura que están evadiendo. De hecho, el informe analiza sector por sector y estima cuáles son esos intermediarios que están incumpliendo.
Gracias, presidente.
Sí, respondiendo a la pregunta del diputado, el impuesto teórico abarca todo; está muy explicado cómo se calcula, partiendo de un dato de las cuentas nacionales, que es el excedente de explotación. Pero eso comprende a todas las empresas, incluyendo las individuales, las sociedades y todos los tipos de sociedades. Hay que recordar que en Chile existen más o menos un millón y medio de empresas, de las cuales las sociedades anónimas abiertas, que son las que uno asocia a las grandes, no suman más de 400 o 500. Entonces, digamos que está todo incluido. Sin embargo, en el análisis sectorial se pueden identificar actividades económicas en las que predominan las empresas muy grandes, por ejemplo, el sector eléctrico, y en esos casos el método no arroja evasión.