Ponemos de pie entonces. Siendo las 5:32 en nombre de Dios y de la Patria se abre la sesión. Muy buenas tardes a todos y a todas.
El acta de la sesión 83 se da por aprobada por no haber sido objeto de observaciones. El acta de la sesión 84 queda a disposición de las señoras.
Y señores diputados, antes de entrar a la cuenta, damos también la bienvenida a quien concurra en representación de la Junta Nacional del Cuerpo de Bomberos, el abogado asesor jurídico, el señor Fernando Recio.
Pasamos a la cuenta, señora secretaria. Presidenta, se han recibido los siguientes documentos: una carta del presidente de la Junta Nacional de Cuerpos de Bomberos de Chile, señor Juan Carlos Phil, de fecha 20 de marzo, mediante el cual envía agradecimiento por las condolencias recibidas; y una nota del jefe de la bancada socialista, de fecha 25 de marzo, por el cual se comunica que la diputada Daniela Cicardini reemplazará al diputado Nelson Venegas durante la sesión de hoy. Esto es la cuenta. Muchísimas gracias.
Entonces, ¿se ofrece la palabra sobre la cuenta? No hay. Pasamos entonces a la orden del día.
— Dígame, al final, diputado, es que usted siempre lo olvida. No olviden, no olviden, no, quédense, quédense. Muy importante su presencia, diputado Varilla.
Esta sesión tiene por objeto tratar la siguiente tabla: en primer lugar, recibir al alcalde de la comuna de Licantén para que se refiera a las continuas inundaciones que afectan dicha comuna. Así que damos la bienvenida al señor Claudio Reyes Fuenzalida, con quien puede conversar previamente, en atención a la solicitud del diputado Celedón, de su distrito, que pidió, por supuesto, que usted pudiese comparecer.
Le doy la palabra, estimado alcalde.
Primero que todo, saludo y agradezco la posibilidad de estar en esta comisión, señora presidenta, señores diputados, porque para nosotros, como comuna pequeña y tan afectada durante el tiempo por distintas circunstancias, es importante que ustedes conozcan la gravedad en la que estamos viviendo. También es fundamental que se entienda el desamparo en el que se encuentran nuestros vecinos, al constatar que durante el año 2023 nuestra comuna —pequeña, turística y agrícola— sufrió dos grandes inundaciones que afectaron un porcentaje muy importante de nuestra población y viviendas, generando diversas dificultades.
Nuestra comuna ha sido inundada en varias oportunidades: partiendo por el año 72, luego el año 85, el año 2008 y, en el 2023, en dos ocasiones (el 29 de junio y el 2 de agosto). Ambas inundaciones han producido un impacto tremendo en las viviendas, en la gente y en una parte importante de nuestro suelo agrícola. Como mencioné, somos una comuna muy agrícola y sufrimos una pérdida de suelo importante en algunos sectores, en particular en el sector de Hidahue, parcelas de Hidahue, donde la pérdida es irreversible. Eso debemos decirlo.
Asimismo, en otros sectores como Licantén, Kelmen, Lora, Fundolora y Guapi, se han visto afectados por la crecida del río Mataquito, situación que podría replicarse en condiciones similares a las del sector de Hidahue, con la consiguiente pérdida de terreno agrícola, de suma importancia para la subsistencia de nuestra gente.
Cuando afirmé que la gente de nuestra comuna, a la que represento, se siente hoy en desamparo, es porque es muy fácil que las autoridades —tanto de gobierno como parlamentarias— y los jefes de servicio aparezcan durante la emergencia para tomarse la mejor foto, pero, posteriormente, nuestra gente queda sola y las acciones comprometidas no se realizan. Además, ante la necesidad urgente que enfrentamos al borde de entrar en invierno, no se ha hecho nada respecto del verdadero problema de Licantén, cuyo núcleo es el río Mataquito, cuya cuenca y lecho, al recibir el traspaso del suelo desde Curicó hacia la costa, se elevan y reducen su caudal, provocando las inundaciones.
Durante las inundaciones de 2023, en algunos sectores de la plaza pública tuvimos sobre dos metros de agua. Inundamos el municipio, el hospital y todos los servicios públicos: Carabineros, Fiscalía, juzgado y, sobre todo, un alto porcentaje de nuestra población.
Hace un rato le comentaba a la diputada Riquelme que, además de lo trágico que era la inundación en sí, en un sector cercano a Alicante –a 8 kilómetros– se registraron dos fallecidos. Fueron dos vidas perdidas de forma tragicómica, ya que no era posible llegar a Alicante para buscar una urna que les permitiera recibir una sepultura digna. Esto fue posible gracias a los pescadores que, manifestándose afuera de este Congreso, con sus embarcaciones tuvieron la gallardía de internarse en el río Mataquito para trasladar la urna al cementerio; sin ellos, esa gente no habría podido recibir el último adiós.
Hago este relato por la importancia que tiene para ustedes ayudarnos a visibilizar nuestra problemática y para exigir al Estado de Chile –no al gobierno, pues los gobiernos pasan– medidas que permitan mejorar nuestra situación.
El río Mataquito no solo afecta a la comuna de Alicante, sino también a varias comunas de la cuenca, entre ellas Gualañé, Curepto y Sagrada Familia; sin embargo, la comuna más afectada es la nuestra, Licantén. Hemos sufrido una gran pérdida de suelo agrícola, una seriedad afectación en nuestras viviendas y, por qué no decirlo, en la viabilidad local.
Por ello, apelo a la Comisión de Bomberos de Emergencia para que nos ayuden a enfrentar esta crisis. Hoy, como alcalde, soy el encargado de brindar alguna palabra de calma a nuestros vecinos y les pido que trabajemos juntos para evitar que se repitan estos escenarios; en particular, espero que este no sea un año lluvioso, porque de lo contrario volveríamos a tener sobre dos metros de agua en la plaza pública, situación que ya ha provocado en la comuna de Alicante una migración de nuestra gente. Además, luego de las inundaciones del 23, se cerró la gran fuente laboral que contaba la comuna –la planta celulosa Arauco de Alicante–, afectándose así tanto el empleo como el comercio.
En las imágenes que observan del río Mataquito se puede apreciar cómo se desbanca el cauce. Aunque tales imágenes no permiten dimensionar la totalidad de la realidad, se evidencia la presencia de islotes llenos de árboles, sauces y aromos que impiden el adecuado paso del agua. Por ello, considero necesario intervenir en el río Mataquito, convenciendo al Ministerio de Obras Públicas y a las demás autoridades del Estado de Chile para llevar a cabo una acción a gran escala. Tengo claro que se trata de una intervención costosa y que no se podrá efectuar de un día para otro, pero es fundamental generar conciencia entre ustedes y lograr que esa conciencia se extienda para evitar que esta situación se repita, permitiendo que nuestro río pueda comenzar a ser limpiado y gestionado adecuadamente.
Ojo: No quiero decir que, si realizamos esa limpieza, Alicante no sufra inundaciones.
Se va a inundar. Debo ser claro en ello, pero la afectación va a ser mucho menor. Si este año, el 2023, tuvimos 2,20 metros de altura en la plaza pública por tres días, que tengamos un metro por un día va a ser mucho más fácil limpiar, secar y volver a recomponernos. Porque, si no, nuestra comuna, la verdad, va a seguir muriendo.
Es por eso que me he tomado el atrevimiento de llegar acá, de mirarles a ustedes a la cara y decirles: por favor, ayúdennos. De la diputada me venían a decir que soy un alcalde llorón.
Pero la verdad es que este llanto que yo genero con ustedes... miren las viviendas. Ahí había más de dos metros de agua, cuando ya estaba bajando el río Mataquito. Eso es al frente del hospital. ¿Se fijan? Miren la fiscalía. A eso es a lo que nos exponemos cada invierno, a eso es a lo que nos exponemos cada año que no se hace ninguna mejora, ninguna limpieza del río Mataquito. Ese es el liceo. Y qué bueno que está esa imagen.
Porque, a pesar de todas estas dificultades, la comuna de Licantén en el año 2024 ha tenido unos tremendos resultados en la prueba PAES y también en el CIMSE. Comentarles que, en la prueba PAES, la comuna de Licantén –y por eso debo felicitar, primero a los estudiantes y también a los profesores– estamos en el ranking nacional siendo número 28, segundos en la región del Maule, incluso sobre colegios emblemáticos como la Batemolina. Pensar que tuvimos niños que estudiaron en plena pandemia, que atravesamos esta situación del río Mataquito y, sin importar ello, hemos obtenido resultados extraordinarios.
Pero, para seguir alcanzando esos logros, necesito de ustedes. Para seguir teniendo buenos resultados, es imprescindible que colaboremos entre todos en la búsqueda de una solución. Tengo claro, como les decía hace unos minutos, que esta solución no llegará en el año 2025, tal vez ni siquiera en el 2026, pero necesitamos poner sobre la palestra esta problemática. No podemos seguir sufriendo inundaciones una tras otra, mientras el gobierno de turno nos ofrece solo un bono más para enseres o para que se recuperen los negocios, porque esta pérdida es irreparable. Nuestra historia se está perdiendo y con ella, parte de nuestra identidad.
Con mucha humildad, les pido que consideren esta terrible situación que vive nuestra comuna. Y no solo nuestra comuna, sino también abogo por las comunas vecinas, como Curepto, de mi amigo Fernando Alcántara (alcalde), y Gualañé, con Carolina Muñoz, que también enfrentan la misma problemática.
Creo necesario, creo necesario, que el gobierno, el Estado y todos los que estamos en esta mesa nos preocupemos de verdad, y no solo para las fotos. Como les decía al principio, es súper fácil llegar a Licantén cuando estamos con el agua hasta el cuello, es muy fácil tomarse una foto y decir “aquí estoy”, pero lo importante es seguir ayudando para encontrar la solución.
A mí, en forma personal, me tocó, con una retroexcavadora, abrir caminos durante 8 kilómetros para que los pescadores pudieran llegar con la ayuda. Con esa misma retroexcavadora, tuve que pasar unos botes por encima de un camino para que el agua siguiera fluyendo aguas arriba y poder ayudar. Y eso, la verdad, Licantén no lo soporta; nuestra gente no lo aguanta. Porque hoy, en el año 2024, llovería con terror. Cuando nuestra gente –especialmente el adulto mayor– escuchaba que iba a llover mucho de nuevo y que eventualmente se podía inundar Licantén, créanme que, si hubiesen visto esa imagen, estarían todos diciendo: “¡cómo ayudamos!”. La gente, al comenzar a llover, lloraba, desesperada, sin saber qué hacer.
Licantén, además de sufrir una pérdida material, padece una pérdida de historia, y tenemos a nuestra gente con un problema de salud mental. No estamos locos, pero la situación es tal que, al ver esas imágenes, nuestra gente llora.
Es por eso que hoy he recorrido tantos kilómetros y he estado tantas horas para poder visitarlos a ustedes, porque, adicionalmente, le entregaba una carpeta a nuestra diputada, a quien también le quiero pedir ayuda en eso, que desde la parte…
En este sur tenemos el río Mataquito. Licantén es un pueblo bien particular, que por un lado se caracteriza por el río Mataquito y, por el otro, por el cerro. El valle es bastante reducido, por lo que cuando el río se desborda, nos inundamos de manera inmediata y alcanzamos niveles de altura preocupantes.
Licitén es una comuna en la que, durante más de 20 años, no se ha construido una sola casa. ¿Por qué? Porque enfrentamos la problemática del río, al encontrarnos en una zona inundable, y a la vez tenemos el cerro, lo que ha imposibilitado el acceso a servicios básicos como luz, agua y alcantarillado. Entonces, ¿cómo crecemos? ¿Cómo le damos oportunidad a nuestra gente, a nuestros jóvenes y a nuestros profesionales, muchos de ellos en primera generación en la universidad?
Después de muchos años se pudo construir una población que se llama la Villa del Esfuerzo, un nombre que, por Dios, tiene un significado muy profundo. Es una población súper bonita, aunque además resulta muy cara, debido a que han debido ejecutarse todas las obras de mitigación teniendo en cuenta dónde está emplazada.
Sin embargo, ocurrió un desastre: el municipio, en la administración anterior, otorgó una subvención al Club Deportivo Huracán de 42 millones de pesos para realizar movimiento de tierra, con la intención de emplazar un centro deportivo que comprendiera también una cancha de fútbol, camarines y otros espacios relacionados. Lamentablemente –y diputado, créanme, digo lo mismo y más– ese proyecto, o mejor dicho, esa subvención, se otorgó sin contar con un proyecto real; el alcalde de ese entonces aseguró que sí lo había, pero a la postre se realizó un movimiento de tierra, tal como se evidencia en la imagen: se formó un relleno brutal que, adicionalmente, nunca se compactó. Únicamente se compactó la última capa con un rodillo grande, que logró comprimir entre 20 y 30 centímetros, no más que eso.
Se trata de un suelo franco arcilloso –y hablo desde mi formación de agrónomo–, caracterizado por tener poca capacidad de absorción de agua y, además, ser un suelo muy pesado. En la parte oriente deslinda con el estero El Buche, y la verdad es que, hoy día, créanme, estamos a puerta de que, si llegamos a recibir 20 milímetros de lluvia en un día, Licantén enfrente una verdadera liudión. No solo corre peligro la población de Villa del Esfuerzo, sino que, agua abajo, se encuentra el puente del estero El Buche, que ya está en mal estado, pudiendo incluso caer, lo que adicionalmente inundaría dos poblaciones más.
Por ello, les pido que realicen el siguiente ejercicio: imagínense un invierno lluvioso, una tarde cualquiera en la que caigan entre 30 y 40 milímetros de lluvia durante el día. Con toda la lluvia acumulada, se nos viene saliendo el río Mataquito y, pongámonos en el peor de los escenarios, un aluvión se desate al salir el río de sur a norte, dejando a nuestra gente sin siquiera un lugar donde arrancar.
He conversado con todas las autoridades de la región: el delegado regional, la DOH, el Seremi de Obras Públicas, la DGA, Senapred –con quienes ya contamos con un informe de Cernajomín–, además de la Dirección de Planeamiento y Arquitectura; he estado con todos. Pero necesito recursos, y la única forma es poder sacarle peso a ese relleno, para que ese suelo, que es súper pesado y que hoy día se encuentra literalmente blando, no colapse y permita que el estero no desborde, evitando asimismo que se genere una luz que, eventualmente, hasta pudiese cobrar vida.
Y ahí volveremos a salir en la televisión, nuevamente por las inundaciones y por esa "luz". Los invito a todos ustedes a acompañarme para que, en sus respectivas salas, puedan ver lo que les comenté hace unos días. Tal vez es crudo como lo planteo, pero creo que es la única forma de que puedan comprender mi preocupación, y que hoy día también quiero…
Esa es mi preocupación. Porque la gente de Alicante, la gente de la Villa del Esfuerzo, no solo necesita de este alcalde, sino que también precisa la ayuda de ustedes: de los parlamentarios de la región, de los parlamentarios de esta comisión y del Estado de Chile, para lograr soluciones que permitan que las viviendas que aún no se pueden entregar, se entreguen de forma segura, no solo para la vivienda en sí, sino también para las personas.
Así, humildemente, les pido a ustedes la ayuda, tanto con el río Mataquito como con esta tremenda situación. Les solicito que intercedan ante el Estado, ante Obras Públicas, para que empecemos a elaborar un plan de trabajo respecto al río Mataquito y seamos capaces, de una vez por todas, de iniciar su limpieza. Creo que, si limpiamos y retiramos los islotes del río Mataquito, lo que se generará —aunque puedo estar equivocado y existan mejores alternativas— es darle mayor velocidad al caudal. Cuando se incrementa la velocidad, pasa mucho más caudal por minuto que cuando fluye lentamente, lo que podría significar que la inundación no resulte tan grave como hasta ahora.
Pero quien dicta las leyes, quien asigna el presupuesto, no soy yo, son ustedes. Por ello, les he venido a pedir ayuda y a contarles esta triste realidad de Alicante, una situación que podemos mejorar, pero que también podría agravarse. No quiero que se agrave, y es por eso que los miro a ustedes, a la cara, y les digo: por favor, ayuden, por favor, preocupense por nuestra comuna. He expresado lo mismo a nuestros parlamentarios, al delegado y al gobernador; sin embargo, siento que, a pesar de las reuniones, la gente reclama que, como alcalde, no se está haciendo nada, porque se requieren soluciones concretas.
Hoy en día, el municipio de Alicante no tiene los recursos para invertir 100 o 150 millones de pesos en retirar esa tierra, tal como lo indica el informe de CENAPRED, que señala la necesidad de eliminar el peso y evitar el escurrimiento. Para ello, se precisa un proyecto que cuantifique el costo y permita, de algún modo, conseguir los fondos necesarios. Ustedes saben mejor que yo que, lamentablemente, por ejemplo, CENAPRED dispone de recursos para atender emergencias, pero no para prevenirlas, lo cual es inaceptable. Prevenir una emergencia puede costar 100 millones de pesos –es decir, un millón por cada una de 100 casas–, pero si se produce un derrumbe o un escurrimiento mayor, ese costo podría subir a mil millones.
Entonces, ¿cómo avanzamos? ¿Cómo podemos proyectar una mejora y una solución? Repito: son ustedes quienes pueden ayudar.
Muchas gracias. Muchas gracias a usted, alcalde, por venir desde Licantén a contarnos esta realidad.
Diputado Ramírez:
Estupendo, muchas gracias, presidenta. En primer lugar, agradezco al alcalde por venir y explicarnos la situación en Alicante. Creo que podríamos solicitar varios oficios y proponer distintas iniciativas. Me sumo a todas las propuestas que aquí se formulen.
Propongo que iniciemos con una petición formal de la comisión a la DIPRES, para asegurar los recursos necesarios que permitan retirar esta tierra y evitar un aluvión. Además, sugiero que los miembros de esta comisión firmemos, de manera transversal, un proyecto de acuerdo que incluya una petición al Gobierno para que se haga cargo de esta problemática y se someta a votación en sala. Esto le daría mayor entidad a nuestra solicitud, en lugar de limitarla a un oficio dirigido a las autoridades correspondientes.
Estas son mis dos ideas, y si existen otras propuestas, con gusto me sumaré a ellas.
Todas. Al final vamos a tomar los acuerdos de los oficios. Lo estoy anotando, diputado Ramírez. Diputado Bahía.
Presidenta: Lo primero, solidarizar con el alcalde. La exposición que nos ha hecho y, con la pasión que él nos da a conocer esta situación, sin duda, que aparte las imágenes, su relato da cuenta realmente de la tragedia que vivieron y de la tragedia que pueden vivir en el futuro.
Y también, yo tengo muy claro, alcalde, que la primera autoridad, la primera puerta que los vecinos tocan es el municipio. Y el municipio se encuentra sin recursos y, muchas veces, sin las atribuciones legales que le permitan enfrentar una situación como esta.
Yo, Presidenta, sugiero lo siguiente. Yo creo que nosotros debiéramos invitar… Más que oficiar, comparto lo planteado por el diputado Ramírez en el sentido de oficiar a la DIPRES, pero invitar y convocar a esta comisión a la ministra de Obras Públicas. Y, por cierto, también invitar al ministro de Vivienda, para que se nos dé cuenta de lo que han hecho para prevenir estas situaciones y, no sólo prevenir, sino corregir las consecuencias que han tenido muchos vecinos producto de estas inundaciones.
Presidenta: En esa línea, creo que la ministra de Obras Públicas y el ministro de Vivienda deben saber claramente a qué vienen, porque si van a venir a escucharnos, creo que vamos a perder el tiempo. Yo creo que deben venir ya a informarnos respecto de las medidas correctivas que han establecido frente a esta situación.
Como también sugiero, Presidenta, que a esa sesión de esta comisión, en la que concurran los ministros, invitemos al señor alcalde, porque nadie mejor que él podrá transmitir la situación que está viviendo. Así que esa es mi sugerencia, Presidenta. Muchas gracias.
Como digo, vamos a tomar al final los acuerdos en conjunto, diputados y fuentes. Quiero saludar al alcalde nuevamente y agradecerle la presentación tan sentida. Yo quería preguntarle: ¿tienen estimaciones o algún proyecto, especialmente para el desembarcar el río en la sección correspondiente, que parece ser lo más urgente y por donde empezar? Independientemente de que esa cancha que está ahí —solo al mirarla da miedo—, normalmente el Ministerio de Obras Públicas, a través de la DOH o la DGA, solicitará un proyecto para desembarcar, una cuantificación, en fin, y que eso además ingrese al Sistema Nacional de Proyectos. Entonces, no sé si han realizado acciones en esa materia y cómo les ha ido; esa es la pregunta, Presidenta.
Alcalde, por favor.
Sí, diputado, efectivamente hemos hecho muchas gestiones desde el año 23 en adelante, cuando el Estado —yo siempre hablo más del gobierno del Estado— se hizo presente en la comuna. Se generó —o, más exactamente, se ha estado generando— un estudio de factibilidad para ver qué es lo que se debe realizar. Se me decía, hace 15 días atrás, cuando estuve con el director regional de la DOH, que ese estudio pudiese salir a final de año. El estudio, recién, el estudio… no, el estudio lo están realizando. Pero, como yo les decía, cuesta que Licantén pueda seguir esperando. Después de haber hecho un relato mucho…
Lo que expongo en esta comisión no es lo mismo que lo hago en mi oficina de Obras Públicas; allí, cuando uno se siente en casa, su mensaje es mucho más potente, ya que ustedes pueden abrir la puerta y decir: “vaya, en cambio allá yo estoy en mi casa.”
Fue un relato difícil, pero se llegó al acuerdo de que la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) disponga algunas horas máquina para extraer ciertos islotes, no estos, sino los que se encuentran aguas arriba, en la zona de una pasarela que tenemos bien diseñada para iniciar labores de limpieza. Al parecer, Vialidad iba a transferir algunas horas máquina a la DOH para sus maquinarias, pero hasta la fecha no se ha concretado. Por ello, me comprometí a que, si se aportaban algunas horas máquina, por mínima que fuera, serviría; además, podría gestionar que particulares, con la autorización correspondiente, aporten máquinas para ayudar a limpiar esos islotes, los cuales se observan en la imagen de fondo.
En dicha imagen, en la curvatura que fue compartida hace un rato por algunos integrantes del municipio, se evidenció un reclamo respecto a la pasarela: en esa misma curvatura transita la J60 y se está hundiendo una parte de la calzada, en la ruta que conecta Curicó con Doao. Además, contamos con una pasarela peatonal en la que solicité una inspección inmediata por parte de la Dirección de Obras, y nuestra directora informó que toda la base se ha socavado, posiblemente debido a que, en esa curvatura, el río Vegaí está carcomiendo la estructura. Al final del día, no solo se vería comprometida la pasarela peatonal, sino también parte de la J60, lo que nos dejaría completamente aislados.
Cuando hablo, no me refiero únicamente al problema del río Mataquito, sino también a la situación del cerro y de los caminos que, en algún momento, pueden salvar nuestras vidas. Vialidad, así como la Dirección de Obras, debe actuar de forma decidida: nuestra comuna cuenta, creo, con tres caminos de tierra, mientras que el resto está pavimentado. Actualmente, se observa que solo se cuida la ruta J60, y los caminos alternativos por el cerro —que podrían conectar la costa con Santiago evitando zonas inundables— se han vuelto intransitables por el tránsito de camiones y la falta de mantenimiento. En verano, ante un incendio similar a los ocurridos en años anteriores, los bomberos no podrían acceder, y en invierno, el mal estado impide el tránsito. Esta alternativa podría ser nuestra salvación.
Por ello, debemos implementar una solución integral que, junto con las medidas en el río Mataquito, incluya la mejora de los caminos secundarios. Nuestra comuna, siendo pequeña y de escasos recursos —además de terminar en el Océano Pacífico— no cuenta ni siquiera hoy con un hospital funcional, ya que el anterior se inundó, como ustedes vieron en las imágenes. Actualmente, el Ministerio de Salud está trabajando en un hospital modular; sin embargo, la obra aún no se ha terminado, tratándose de una inversión cercana a los 4.000 millones de pesos que proveerá únicamente seis camas de hospitalización, reduciendo la capacidad anterior de 20 camas. Además, se ha iniciado una licitación para un hospital definitivo en una zona segura, con una inversión que podría oscilar entre 28.000 y 30.000 millones de pesos, y que ojalá se licite en el año 2026.
Asimismo, debemos atender la situación de las personas que requieren diálisis: nos vemos obligados a trasladar pacientes desde el extremo de Alicante, desde Doao a Curicó, en furgones municipales; en algunos casos, particulares de Santiago han tenido que evacuar a dichos pacientes en helicóptero para evitar un desenlace fatal. Si contáramos con caminos alternativos en buen estado, estas emergencias podrían ser atendidas sin mayores complicaciones. Por eso, la comuna de Alicante tiene tantas necesidades, y lamento que quienes me precedieron no hayan tenido la posibilidad de solicitar una audiencia con ustedes para exponer lo que requerimos. Necesitamos de su ayuda, y yo creo que…
No es malo que uno pueda decirles, mirando a la cara, “necesito que me ayuden”. Es la única forma de que nuestra comuna siga viviendo y de que nuestra gente no se siga yendo de ahí. Porque es una comuna linda, que tiene muchos atractivos, pero tenemos que poder valorarla. Y para eso ustedes son súper importantes.
Muchas gracias, alcalde, por sus sentidas palabras. En realidad, esto le da sentido a lo que hacemos aquí en la Cámara de Diputados. Nuestra labor no solo es legislativa, sino que también es de fiscalizar. Estuvimos en 2023, en Gualañé, a propósito de las inundaciones. Pudimos ver lo devastador que fue el efecto; aquellos que nos acompañaron en ese entonces, y los parlamentarios de la zona, pudieron apreciar el impacto del río Mataquito, con la presencia del diputado Hugo Rey y del diputado Pulgar, entre otros.
Yo quisiera transmitirles que nuestra intención, como comisión, es prevenir estas circunstancias que amenazan con convertirse en un desastre evidente, como lo evidencian las fotografías que usted nos muestra. Y vamos a tomar varios acuerdos. Comenzaremos con el oficio Adiprés que solicitó el diputado… Permítanme, me pidió la palabra, perdón, diputada Karen Medina. Le doy la palabra.
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Diputada Karen Medina:
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No se preocupe, Presidenta. Buenas tardes a todos los presentes, alcaldes, y un saludo especial. Quisiera comentarles que soy de la región del Biobío, donde también hemos experimentado situaciones similares en distintas comunas. Curanilagua fue una comuna emblemática respecto a las inundaciones que sufrieron Arauco, Los Ángeles y Nacimiento. Hoy en día, personalmente he visitado, durante el verano, a las empresas licitadas para trabajar con la Dirección General de Agua y Obras Hidráulicas, encargadas de hacer dragados en los ríos y de implementar todas las medidas preventivas, que consideramos, en muchos casos, insuficientes de cara al invierno. La forma de prepararse en el fondo para enfrentar esta temporada es muy valorada en la región, aunque siempre han quedado pendientes algunas acciones por falta de recursos. La empresa que inició trabajos en diciembre tenía planificado operar hasta abril de este año para abastecer los puntos más críticos, lo cual se ha materializado en nuestra región.
Por ello, me complació que se le haya preguntado, porque entiendo que también se están haciendo algunas reparaciones mínimas. No obstante, es importante conocer cuál es la programación a corto y a largo plazo que tiene la región. Por eso, me sumo a solicitar que se convoque, al menos, al Ceremias de Obras Públicas de la región y a Vialidad, para que nos expliquen sus proyecciones de mejora para esta ciudad y, quizás, para otras en su zona. Esta es la manera que tenemos de fiscalizar y de agilizar los procesos, atendiendo a lo que usted expone sobre la importancia de abordar preventivamente estos problemas, evitando lamentaciones posteriores y mayores gastos. Esa no es la idea, y por ello agradecemos su presencia, pues nosotros debemos fiscalizar, aunque sea una tarea ingrata. Así me sumo a los oficios y propongo, a través de una sesión especial, realizar un seguimiento para su región, incluyendo a su comuna, alcalde.
Muchas gracias.
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Muchas gracias, diputada Medina.
Continuamos entonces con algunos acuerdos. A mí me gustaría también solicitar la presencia de la Directora de Incidencia y Desarrollo de la Fundación Ronda Chile y de la directora de Senapred sobre esta materia, así como oficiar –ilústeme, estimado Fernando– para conocer la situación de los cuarteles de bomberos de la comuna de Licantén. ¿A quién tendríamos que preguntarle? ¿Al superintendente?
Por favor, Fernando.
Fernando:
Directamente al presidente regional, al señor Álvaro Garrido, presidente del Consejo Regional de Bomberos.
Bien. Entonces partimos con el oficio solicitado por el diputado Ramírez a DIPRES para conocer cuántos recursos se han invertido y qué recursos se están destinando a la recuperación de la comuna de Licantén, debido a las inundaciones del año 2023. ¿Estamos de acuerdo con ese oficio?
– Sí.
¿Pero a DIPRES?
– Ah, claro, también. Además, en lo que respecta a DIPRES, se verificará si existen recursos para la movilización de maquinaria con miras a una eventual remoción masiva, dada la construcción de la cancha al lado de la población.
[Fin de la transcripción]
La villa, el esfuerzo. También vamos a oficiar entonces al presidente regional del Consejo de Bomberos, don Álvaro Garrido, para que nos indique la condición en la que se encuentran los distintos cuarteles de bomberos de la comuna de Licantén. ¿De acuerdo?
Y vamos a pedir la presencia de la ministra de Obras Públicas, acompañada de la directora de la DOH, del ministro de Vivienda y de la directora del Senapred, respecto de, primero, los planes de tratamiento y mitigación a propósito del río Mataquito para prevenir futuras inundaciones, y los trabajos que se están realizando en la actualidad en el río, así como los trabajos y estudios a futuro.
También, respecto del ministro de Vivienda, para que tengan claridad en el motivo de la citación, específicamente las medidas de mitigación tomadas para la villa El Esfuerzo, atendida la contingencia de la construcción de una multicancha en el costado norte de dicha villa, que amenazaría una remoción en masa con el consiguiente daño para las 100 viviendas de esa villa.
De la misma forma, a la directora del Senapred, para que nos indique cuáles son los planes de prevención de desastres ante las dos situaciones: tanto la crecida del río Mataquito este año, de cara a la temporada 2025, como la eventual remoción en masa de la construcción ya referida.
Finalmente, ¿les parece esas citaciones? Tendrían que ser para el día 8 de abril. Si usted desea, alcalde, puede conectarse por internet. Si no es posible asistir a dicha sesión, los facultamos desde ya, si están de acuerdo, a conectarse por internet para que pueda presenciarla. Me lo imaginé. Aquí lo esperaremos.
Bueno, finalmente, el diputado Ramírez, vamos a sostener dicho acuerdo, y el diputado Ramírez propuso un proyecto de acuerdo firmado por la Comisión. Estamos todos de acuerdo y le vamos a encargar, al mismo diputado Ramírez, la redacción de dicho proyecto de acuerdo, para que lo firmemos los miembros de la Comisión. ¿Estamos de acuerdo en ello? ¿Pedirle, al mismo diputado o a usted como presidenta, que en la próxima sesión de los comités se acuerde de darle discusión inmediata a esa resolución? Perfecto, perfecta, toda la razón, toda la razón. Vamos también a acordar aquello. Entonces, una vez que esté redactado y firmado por nosotros, pediremos a los comités que lo pongan en tabla, con preferencia, acordado aquello. Perfecto.
Entonces, alcalde, nuevamente agradecemos su presencia y estamos más que comprometidos con usted y con todos los habitantes de la comuna de Licantén. En todas nuestras comunas existe una comuna como Licantén que ha sufrido estas eventualidades; solidarizamos, como bien dijo el diputado Adilla, con aquella situación. Muchas gracias por su presencia y lo dejamos liberado.
Solo agradecerle la buena acogida. Creo que la comuna de Licantén hoy día se lleva una buena noticia: saber que ustedes, al escucharme, han tomado nota de nuestras preocupaciones y que también van a ayudarnos a lograr soluciones para la comuna de Licantén. Así que, a todos ustedes, señores diputados, se los agradezco. Gracias a usted. Muchas gracias a usted. Así esperamos hacerlo.
Muy bien. Sí, diputada. Sí, presidenta, antes de pasar al segundo punto de la orden del día, quería proponerle, si usted lo tiene bien y el resto de los miembros de la Comisión, si pudiésemos, porque vamos a iniciar una discusión, entonces, adelantar el punto 3 y escuchar a la organización que está presente acá, la Fundación Ronda, que tiene una exposición que va a durar 10 meses.