Buenas tardes a todas y a todos. Ruego ponerse de pie. En nombre de Dios y la Patria, se abre la sesión. El acta de la sesión 148 queda reglamentariamente aprobada y ahora la señora secretaria dará lectura a la cuenta. Aquí le ofrezco la palabra. Gracias, Presidenta.
Se han recibido los siguientes documentos: Comunicación del jefe del Comité de Diputados de Sede Independiente, por la que informa que el diputado Felipe Camaño será reemplazado en esta sesión por el diputado Héctor Barría; y comunicación del jefe del Comité Mixto Radical Liberal, a través del cual informa que el diputado Luis Maya será reemplazado en esta sesión por el diputado Sebastián Videla. Esto a la cuenta, Presidenta.
Muchas gracias, señora Secretaria. Quiero tomarme la palabra brevemente para comentar algo que ocurrió el día de ayer. Lamentablemente no se encuentra el diputado Cornejo, pero el día de ayer tuvimos una discusión y yo quiero disculparme por el tono en el que la sostuvimos. No corresponde, y me quiero hacer cargo de ello, pero sí quiero decir que exaspera, que es muy difícil trabajar cuando hay maniobras dilatorias en el trabajo de esta comisión, cuando no se puede avanzar, y a mí eso sí me da vergüenza. Eso es todo. Ahora, de conformidad con el artículo 211 del Reglamento de esta Corporación, corresponde pronunciarse inmediatamente respecto de la reclamación de conducta de la presidenta de la comisión, en este caso yo. Adelante, señora secretaria.
Presidenta, el reglamento dispone que hay 20 minutos para discutir la censura: 10 para cada una de las posiciones, o sea, 10 minutos para cada una de ellas. ¿Quién pide la palabra primero? ¿Quién quiere partir, desde la defensa o desde la posición de la diputada Ovadía? Tiene la palabra.
Presidenta, estamos haciendo uso de las herramientas que el reglamento nos ofrece y, por cierto, el reglamento nos permite censurar cuando diputados integrantes de una comisión como esta sienten que sus derechos están siendo vulnerados y que la presidencia de la comisión está procediendo incorrectamente. Una cuestión básica para conducir una comisión, y más bien para todas las comisiones de la Cámara, es ser ecuánime. Cuando se asume la presidencia se deben dar facilidades a todos y cada uno de los diputados y a todos y cada uno de los sectores políticos representados en dicha comisión. Eso, lamentablemente, bajo su conducción no ha ocurrido siempre. Y pongo de ejemplo algunas situaciones que se vienen dando. Da la impresión que en muchas intervenciones nuestras, cuando le consultamos al Ejecutivo y éste no tiene respuesta, cuestión...
Quien contesta es la presidenta. Y la presidenta no está elegida para ser la vocera del Ejecutivo. Por eso, presidenta, creo que su conducción no ha estado a la altura de lo que realmente debe ser, y por ello no solo presenté la censura por su conducción, sino que hoy la vengo a ratificar. Sabemos que la mayoría que tiene el Ejecutivo aquí probablemente la confirmará en el cargo de Presidenta, pero yo le hago un llamado, presidenta: si eso ocurre, cambie su comportamiento y dénos facilidades a todos y cada uno de los sectores que representamos en esta comisión. Asimismo, le pido encarecidamente que, cuando se le consulte al Ejecutivo, sea el propio Ejecutivo quien conteste. Ahora bien, si el Ejecutivo no está en condiciones o no está capacitado para dar respuestas a los requerimientos que les hacemos los diputados, que lo admitan; así entenderemos que usted se ha convertido en la vocera del Ejecutivo, situación que a mí me parece inaceptable. Por ello, presidenta, vengo a ratificar la censura, porque considero que a esta comisión, en particular, una conducción como la que hemos tenido no le hace bien. Aquí estamos tratando temas trascendentes para el futuro de la educación en nuestro país y no es posible que, por una cuestión ideológica que el gobierno intenta imponer, usted se transforme, reitero, en una vocera del Ejecutivo, papel que no le corresponde. He dicho.
Muchas gracias, diputado Vadilla.
Por el tiempo restante, el diputado Schubert.
Muchas gracias por su intermedio. Saludo a los presentes.
A ver, aquí hay varias situaciones que hemos señalado a lo largo de la conducción de esta presidencia y que, a mi parecer, la semana pasada ya se hicieron patente. Yo no estuve el lunes, lamentablemente, así que desconozco lo ocurrido el día de ayer; sin embargo, hay aspectos vinculados a lo que señaló el diputado sobre otorgar la palabra con ecuanimidad, lo cual es relevante y que no siempre se ha cumplido. No afirmo que nunca ocurra, pero se han detectado casos en que se cierra la palabra y queda la sensación de que únicamente el sector oficialista tuvo la mayor oportunidad de intervenir, impidiendo que, por ejemplo, el gobierno o el Ministerio respondan a las preguntas. Esto atenta contra el buen desarrollo del trabajo y, en consecuencia, contra las votaciones. Cuando se pide una explicación, en ocasiones hasta se da la impresión de que el Ministerio estaría dispuesto a explicarla, pero la presidenta ha señalado que no, ya que se había anunciado que íbamos a votar; y, de ese modo, se sugiere que se manda por ser Presidenta, lo cual me parece innecesario y perjudicial para la discusión.
Sumado a ello, la semana pasada se presentó una indicación que a la presidenta no le agradó, y se permitió llamar la atención a quienes la presentamos, insistiendo en ello. En realidad, se trata de un asunto de votación democrática, en el que cada diputado expone por qué presentó determinada indicación, para luego votarla y aprobarla o rechazarla. El hecho de llamar la atención sobre cómo es posible que alguien presente una indicación en ciertos términos resulta inapropiado para quien debe garantizar la ecuanimidad de la discusión y permitir que circulen ideas diversas, las cuales son debatidas y sometidas a votación. Es más, al presidir desde el sector oficialista, se tiene la mayoría para ganar todas las indicaciones si se decide. Entonces, presidenta, de eso se trata esta mesa.
Por último, esto tiene que ver con la citación del lunes. Se cita para votar un proyecto de ley importante, y se convoca para el día lunes, sabiendo desde la presidencia que tenemos varias comisiones en paralelo en el mismo horario. Hemos pedido en varias oportunidades que no se convoque para el lunes, y la presidencia lo sabe. Si bien es cierto que es una facultad de la Presidencia, no cuesta nada consultarlo o haberlo conversado; el martes anterior tuvimos sesión y no se dijo nada respecto a citarnos para el lunes. Luego, aparece el día viernes en la tarde una situación para el lunes en la mañana, lo que dificulta nuestra asistencia. No sé si era esa la intención, pero esa decisión dificulta nuestro trabajo, ya que muchos no pudimos asistir.
Y haber conversado y creo que eso es precisamente parte de lo que estamos votando ahora. Muchas gracias, diputado Schubert.
Estamos en el tiempo por parte de los acusadores, no sé cómo se dice, los censuradores. Ahora le damos la palabra a la defensa, que estará a cargo de la diputada Moni Carse. Muchas gracias, presidenta.
Bueno, el pasado martes 18, un diputado de esta comisión reclamó la conducta de la presidencia de la diputada Emilia Schneider, de manera verbal, durante el desarrollo de la sesión ordinaria número 148 de esta comisión, aludiendo textualmente que la presidenta no estaba dando las facilidades para que las autoridades del Ministerio de Educación contesten. Esto se llevó a cabo en el minuto 53 del registro de la sesión, con lo cual no estaría actuando conforme a lo indicado en sus atribuciones, según el reglamento de la corporación.
Respecto de la justificación dada por el diputado que interpuso la censura y de la reclamación del artículo 211, cabe señalar que no es efectiva señalar que esta presidenta no brinde facilidades para el diálogo con representantes del Poder Ejecutivo. Tanto en dicha sesión como en todas las celebradas bajo su presidencia, como es de costumbre, se han extendido invitaciones a autoridades de gobierno en cada sesión de la comisión en la que se han discutido proyectos de ley, y se les ha otorgado siempre la palabra para responder a consultas, dudas o desacuerdos de las y los diputados.
De hecho, durante la misma sesión, el intercambio de palabras entre el subsecretario y el diputado que interpuso la censura fue permanente, y también se estableció un diálogo constante con otros diputados, tanto del oficialismo como de oposición. A mayor abundamiento, el mismo diputado, quien presenta la acusación, es quien mayormente hace uso de la palabra en cada sesión a la que ha asistido; por lo que, haciendo uso de su legítimo derecho como parlamentario, malamente podría reclamar falta de facilidades por parte de la presidenta para que desde el Ministerio se contesten sus intervenciones.
Sin embargo, el fundamento de la reclamación queda aún más desacreditado al observar que los esfuerzos para establecer diálogos transversales han sido reconocidos como acuerdos unánimes de la comisión al levantar instancias especiales, por ejemplo, las dos jornadas temáticas y las tres mesas de trabajo técnicas de asesores para los proyectos de ley sobre la regulación del uso de dispositivos digitales en los celulares, de convivencia educativa y el que se encuentra actualmente en tramitación, que reorganiza la deuda educativa y crea un nuevo sistema de financiamiento.
Sobre la ecuanimidad de la presidencia me quiero referir: cabe mencionar que la presidencia ha mantenido un comportamiento ecuánime en la regulación del debate durante las sesiones, otorgando siempre la palabra a cada parlamentario que la solicita dentro de las oportunidades anunciadas, y coordinando la disponibilidad horaria de las y los diputados para asegurar su asistencia a las sesiones especiales y temáticas, gestionadas tanto de manera telemática como presencial, según constan en actas y registros.
Otra señal de ecuanimidad se advierte en los esfuerzos por equilibrar las preferencias de quienes componen la comisión con las urgencias del Ejecutivo, particularmente a la hora de fijar los puntos en tabla que han estado a su cargo. Sin ir más lejos, en la sesión ordinaria de la sala del día de hoy se encontraba en tabla el proyecto de ley de autoridad de la diputada Marcia Rafael, de la oposición, que se tramitó completamente durante esta presidencia, con indicaciones redactadas entre la autora y, precisamente, la presidenta.
El rendimiento de la comisión durante la presidencia ha sido notable: contando dicho proyecto, la comisión ha logrado tramitar completamente un total de ocho proyectos de ley durante el año en que la diputada Emilia Schneider ha sido presidenta. A saber:
1. La recién mencionada moción que modifica normas legales para mejorar la fiscalización y procedimientos en materia de acoso sexual, violencia y discriminación en la educación superior.
2. El proyecto de ley que modifica la Ley General de Educación, con el objetivo de prohibir y regular el uso de dispositivos digitales en establecimientos educacionales, mencionado anteriormente.
3. La moción que establece normas sobre convivencia, buen trato y bienestar en la educación superior, y protege los derechos de los estudiantes que requieren cuidados específicos en su salud mental.
4. Otro proyecto, el cuarto, mensaje que modifica la oferta.
En la educación parvularia, que hoy día pasó a mixta. Cinco, mensaje que incorpora a la provincia de Chiloé entre las beneficiarias del programa especial de becas, estableciendo el artículo 56 de la Ley 18.681. También el proyecto de ley sobre convivencia, buen trato y bienestar de las comunidades educativas, con el objetivo de prevenir y erradicar el acoso escolar, la discriminación y todo tipo de violencia en los establecimientos educacionales. También la moción senatorial que modifica la Ley General de Educación, con el objeto de complementar el sistema de evaluación correspondiente al nivel de educación básica, especialmente los cursos de primero a cuarto básico, y que actualmente ya ha iniciado su tercer trámite constitucional. Y también el mensaje que otorga un aporte único a los profesionales de la educación, que se indica en el boletín 172.69-04, más conocido por atender la llamada deuda histórica. El conteo anterior da cuenta de manera empírica de la labor concreta que ha llevado adelante esta presidencia en términos de despacho de legislación.
Por último, también hemos enviado 225 oficios durante su presidencia, en conjunto y con el apoyo de la Secretaría y de los funcionarios que colaboran en esta comisión. Lo dicho anteriormente demuestra que esta presidencia, durante todo este período, ha mantenido una actitud de respeto, de apertura a la discusión y, por sobre todo, la intención de que logremos nuestro cometido y responsabilidad dentro de esta corporación: legislar materias de total interés para la sociedad de manera transversal.
Teniendo en consideración los puntos señalados, me gustaría finalizar comentando que, cuando la diputada Mille Schneider asumió la presidencia el 19 de marzo del año recién pasado, durante la sesión número 96, con 7 votos a favor, en dicha oportunidad mi voto fue abstención. Y, pese a ello, hoy puedo reconocer que, con los hechos recientemente expuestos, ha quedado demostrado que la presidencia de la diputada se ha desarrollado con un estricto respeto al reglamento de la Cámara y a las facultades que éste le otorga, permitiendo una discusión entre todos los sectores que integran esta comisión junto al Ejecutivo. Por todo lo anterior, invito a los miembros de esta comisión a rechazar la reclamación del diputado que interpuso la censura, dado que carece de argumentos objetivos para censurar a esta presidencia.
Gracias, Presidenta.
Muchas gracias, diputada Mónica Arce.
Quedan alrededor de tres minutos y le ofrezco la palabra a la diputada Camila Rojas.
Gracias, Presidenta.
Una vez más, me hago presente en una ocasión relevante en la Comisión de Educación. Ya había participado en esta votación, pero hoy hemos sido convocados por esta censura que legítimamente ha presentado el diputado Bobadilla en el ejercicio de sus atribuciones. Me parece importante relevar el rol que usted ha tenido en esta comisión, rol que he podido apreciar de manera presencial cuando he venido, pero que además hemos estado siguiendo. Esta es una comisión que sesiona regularmente, de hecho, es la tercera que más sesiona dentro de la Cámara de Diputadas y Diputados, por lo que quien la preside tiene una gran responsabilidad sobre sus hombros. Usted ha cumplido ya casi un año en esta función y creo que lo ha desempeñado de manera impecable.
Quisiera sumar a lo ya señalado por la diputada Arce, a quien también agradezco su intervención, que es muy importante que usemos correctamente las herramientas que nos entrega la Cámara. En ese sentido, nos corresponde legislar en tiempo y forma. Creo, como señalaba por su intermedio el diputado Schubert, que es fundamental que se entreguen las palabras cuando son solicitadas, que se respeten los tiempos y que el Ejecutivo disponga del tiempo debidamente asignado para responder. Estos son elementos esenciales sobre los cuales podemos conversar y enfatizar la necesidad de que la presidencia tome en cuenta todas esas consideraciones; sin embargo, considero que ninguno de esos comentarios amerita terminar censurando, sobre todo en la discusión de un proyecto complejo en donde existen diferencias políticas. Cuando hay diferencias políticas, no es necesario que se utilice la atribución de censurar a una presidencia que no lo ejecuta de manera correcta, pues se corre el riesgo de que esa herramienta se use para dilatar la discusión. Me preocupa que, en un futuro, la presidenta pueda ser usted o cualquier otra diputada, y no podemos estar constantemente bajo esa amenaza. Por ello, hago un llamado a utilizar adecuadamente esta herramienta y, de nuevo, destaco la labor que usted ha cumplido en esta comisión.
Muchas gracias, diputada Camila Rojas.
Con esto se da por finalizado el tiempo.
de discusión de la moción de censura y ahora corresponde entrar en tiempo de votaciones. Señora secretaria. En votación, entonces, la reclamación de la conducta de la presidenta. Diputada Arce, diputado Ovadilla. Presidenta, por todo lo anteriormente dicho por mi persona y el diputado Schubert, no puedo votar de otra forma sino aprobando esta censura porque creo que tiene mérito. Y aprovecho la oportunidad, Presidenta, si es confirmada en el cargo, porque van a hacer uso de las mayorías que tiene aquí el oficialismo, para invitarla a que cambie su conducta respecto a la conducción en el futuro de esta comisión. Nosotros estamos haciendo un planteamiento desde hace ya hartas semanas, a fin de que el Ejecutivo, representado por el ministro de Educación, señor Nicolás Cataldo Astorga, deje la arrogancia de lado y acoja lo que nosotros proponemos. Porque si eso no ocurre, nuestras votaciones serán similares a las que ya hemos tenido. En ese sentido, le reitero, Presidenta: mi llamado es a que usted no intervenga cuando se le consulta al Ejecutivo, ya que nos interesa conocer la opinión y los fundamentos que tiene para presentar este proyecto, el cual sin duda generará graves consecuencias en la educación superior y, lamentablemente, esas consecuencias no serán favorables, sino todo lo contrario. Por eso, Presidenta, reitero el llamado y voto a favor de la censura que he presentado.
Diputado Barría: Considero que siempre puede mejorar la disposición de ambas partes. La Presidenta, sin duda, partió esta sesión reconociendo algunas situaciones que podrían haber actuado de manera mejor, así como nuestro diputado y quien les hable. Yo creo que de eso se trata cuando uno llega a este tipo de instancias de representar a la comunidad. Creo que eliminar el CAE y reemplazarlo por un sistema mucho más efectivo y legitimado por la comunidad debería ser nuestro principal objetivo, en lugar de invertir tiempo en esto para nada. Estoy en contra de la censura.
Diputado Cornejo: Muchas gracias. Quiero, antes de emitir mi voto, señalar que en este espacio de discusión tenemos la responsabilidad no solo de representar a la ciudadanía, sino también de velar por el cumplimiento de las normas y leyes que rigen los distintos procesos tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado. Es un espacio democrático en el que debe primar el respeto y la posibilidad de escucharnos, aun en nuestras legítimas diferencias. Hemos sostenido, en más de una oportunidad durante este periodo parlamentario, diferencias con otras diputadas, con otros diputados y, por supuesto, con el Ejecutivo. Sin embargo, siempre han prevalecido la tranquilidad, el respeto y la capacidad de escucharnos. Podemos tener, insisto, diferencias en nuestras apreciaciones sobre el trabajo que desarrollamos en el debate de ideas en torno a algún determinado proyecto de ley, y a mí me parece que ese clima de debate respetuoso se ha visto mermado en el último tiempo. Por lo tanto, mi voto es a favor.
Diputado Videla: Muchas gracias. Comparto lo expresado por mi compañero Héctor Barría respecto a que la ciudadanía, presente en esta casa, espera que estas comisiones avancen y mantengan el diálogo. Hoy día, la fuerza de las redes sociales es tan importante que la gente no puede estar conectada 24/7. En ese sentido, creo firmemente en la democracia digital, y constantemente converso con la gente por redes sociales. A los diputados que han presentado esta propuesta les correspondería, quizás, dialogar fuera de esta acción, que es válida por disponer de la herramienta para censurar, pero considero importante que la ciudadanía vea que también nos ponemos de acuerdo. De lo contrario, en nuestro distrito se dirá que únicamente hay peleas y que no se avanza en un tema tan importante como la educación. Por ello, yo voy a rechazar esta censura, Presidenta.
Diputada Medina: Saludo a todos los presentes y lamento la situación. Llevamos ya media hora, en la que hubiese sido importante estar hablando de temas que realmente preocupan a la ciudadanía —que vive la ciudadanía— y que debiéramos estar discutiendo en esta comisión. Esta comisión, en su contenido, también encierra mucha ideología, lo que ha llevado a encrispar un poco los ambientes de discusión; por ello, nos vamos entrampando. Hoy día podríamos avanzar en soluciones tan importantes. De hecho, en varios puntos solicito el proyecto de convivencia, que hemos discutido tanto acá y que costó llegar a acuerdos comunes para avanzar y ofrecer herramientas a las comunidades educativas para mejorar los ambientes escolares. Considero que ese debería ser nuestro norte y, a pesar de que esta herramienta es muy válida para los diputados, tampoco debe abusarse de ella únicamente para hacer puntos políticos. No estoy de acuerdo. Creo que la Presidenta ha conducido esta comisión de muy buena manera; todos tenemos espacios para hablar y discutir, e incluso hay personas que hablan sin cesar sin que se les niegue la palabra. Por ello, no entiendo que se presenten instrumentos de este tipo para perder el tiempo. Así que mi voto es en contra, Presidenta.
Diputada Molina: Gracias, Presidenta. Yo creo que, dado que ya llevamos más de media hora, no vale la pena que repita argumentos que me parecen válidos, y a los que, además, respeto de la oposición. Sin embargo, es fundamental ser claros. También se han recibido muchas palabras insultantes de algunos diputados de derecha hacia el Ejecutivo, hacia el Ministro, hacia el Subsecretario y hacia la Presidenta. Considero que debemos meditar, como diputados, sobre cuál debe ser nuestro comportamiento en una democracia, donde los improperios y los insultos no tienen cabida. Por ello, voy a votar en contra y no deseo seguir hablando.
Diputada Rafael: A favor.
Diputado Rey: A favor.
Diputado Santana: En contra, Presidenta; señora secretaria, ¿quién me está hablando? Disculpe, señora secretaria. En contra, y ¿sabe qué quería decir? Dos cosas. Primero, se han imputado hechos respecto a la conducción de la Presidenta de la comisión, y se me han venido a la cabeza dos aspectos, en particular en lo referente a la tramitación de este proyecto, que debe ser uno de los más importantes de esta administración por el impacto que tiene en una gran cantidad de personas. Es preocupante que, en medio de una comisión en la que se observa mucha tensión, se gasten 30 o 40 minutos en una discusión meramente política. Se presentaron indicaciones por parte de la oposición que buscaban suprimir un artículo o determinados artículos en su totalidad, repitiéndose la misma votación al momento de aprobar algún artículo. Es decir, lo que se pretendía hacer indirectamente era dilatar la discusión mediante un subterfugio jurídico.
En segundo lugar, de forma constante, cada vez que se argumenta se abordan temas que no tienen relación con la discusión. Por ejemplo, el diputado Bobadilla, a través de la comisión, hizo, en una especie de pulsión la semana pasada, el anuncio de esta censura, que en ningún caso fue premeditada; por ello, me extraña que, a partir de lo expuesto por el diputado Schubert —a quien considero, pese a las diferencias ideológicas, un diputado serio que siempre argumenta en función del contenido que se discute— se haya sumado a una censura completamente improvisada por el diputado Bobadilla, que insisto, fue una pulsión expresada sin fundamento. Esto, a mi juicio, perjudica a la comisión y al debate, que debería centrarse en la discusión del pago de la deuda educativa. Es, en definitiva, un círculo vicioso que se repite cada vez que se debate un tema relevante.
Quisiera agregar que me correspondió presidir la comisión de trabajo cuando se tramitó la reforma de pensiones y se presentó exactamente la misma situación: censuras y métodos de diverso tipo para dilatar una discusión que es de interés de la población. Por ello, voto en contra, por supuesto, Presidenta. Considero que la conducción ha sido correcta y apegada a las normas del reglamento. Espero, asimismo, que si alguno de mis colegas tiene una posición en contra del pago de la deuda educativa, lo exprese de manera transparente, en lugar de dilatar una discusión que verdaderamente interesa al país, y que declare con claridad su intención de mantener a los bancos dentro de este sistema.
¿Qué no quieren? Que el proyecto de ley presentado por el Gobierno se apruebe. (Diputada Serrano)
Bueno, primero, señora Secretaria, yo voy a votar en contra de esta censura, y creo que ya lo expuso muy bien el diputado Santana. Acá estamos ante una estrategia que se ha venido implementando en muchas sesiones, al menos para dilatar el debate, y se ha hecho también a punta de malos tratos. Gran parte de las conductas que a usted se le imputan, Presidenta, están realmente materializadas por parte de la oposición. O sea, hemos intentado llevar un diálogo basado en las indicaciones, pero son justamente aquellos diputados los que van repitiendo una vez más una serie de argumentos reiterativos, argumentos que en realidad son falaces y falsos, y que han tenido como principal blanco al Ejecutivo y a los diputados del oficialismo.
En ese sentido, se le imputa incluso a usted, Presidenta, el no diálogo con el Ejecutivo, como si eso dependiera exclusivamente de su accionar, cuando ya ha quedado demostrado en esta comisión que quienes no asisten regularmente a los diálogos son principalmente la oposición.
Yo, realmente –y lo digo a modo de reflexión personal– me cansé de esta actitud pasiva y agresiva que se vive en esta comisión, en la que parece haber satisfacción en dilatar cada vez más el debate. Por ello, me reservo mi derecho a votar, ya que considero que el diálogo con algunos de los diputados de esta mesa ha dejado de ser constructivo. Lo expreso, con todo el respeto, en particular con el diputado Bobadilla y con la diputada Marcia Rafael, quien ayer, de manera reiterativa, intentó interrumpir cada vez que yo hablaba cuando únicamente estábamos argumentando el articulado.
(Diputado Schubert interrumpe: “Iba a otra comisión a votar” – “Ah, ahí está, no lo había visto”). Muchas gracias, diputado Schubert. Mi voto es a favor. Gracias, señora Secretaria.
Por lo visto, esta censura se ha rechazado claramente y de forma contundente, no solamente con votos del oficialismo, sino también con diputados independientes y de la Democracia Cristiana. Esto demuestra que, en la conducción que hemos tenido en la Comisión de Educación, se han respetado las garantías para que todos los sectores puedan colaborar, levantar sus propuestas, tramitar sus proyectos y sacar adelante sus oficios, conforme al Reglamento de la Cámara.
Sin embargo, estoy convencida de que los fundamentos de esta censura no son los que se han expuesto aquí. Me llama la atención que esta censura surja justamente en el momento en que estamos discutiendo uno de los proyectos más importantes del Gobierno del Presidente Gabriel Boric, uno de los proyectos más esperados por la ciudadanía. No me sorprende, y estoy convencida de que se me censura por intentar sacar adelante, de forma rápida, un proyecto tan necesario como lo es terminar con las deudas educativas; por estar en contra del mercado educativo, en contra de la deuda educativa y por querer defender el derecho a la educación. Lo afirmo, tal como evidenció la excelente defensa de la diputada Mónica Arce.
Por eso, mi voto es en contra y hago un llamado serio a la oposición para que colaboremos, para que cortemos esta situación y mantengamos un buen ánimo que nos permita avanzar con este proyecto. Para eso nos pagan, para sacar adelante proyectos, y para eso la ciudadanía nos eligió, no para intrigas parlamentarias, puntos políticos o peleas pequeñas. Espero que ese ánimo primen a partir de ahora y, tal como decía la diputada Medina, podamos trabajar en los proyectos que realmente le importan a la gente, y no en esta chimuchina que poco aporta.
Mi voto es en contra, señora Secretaria.
La Presidenta: Afirmativa, cinco votos; en contra, ocho votos. Se rechaza la moción de censura. Muchas gracias a todas y a todos.
Antes de pasar a puntos varios, quiero hacer un anuncio: en este momento se ha cumplido mi período a cargo de la Comisión de Educación y, de acuerdo con el acuerdo administrativo de esta Corporación, renuncio como Presidenta de esta instancia. Quiero agradecer profundamente a la Secretaría y a los equipos, porque hemos sacado adelante un trabajo serio, hemos logrado establecer instancias de discusión con distintos actores y con la comunidad, y hemos avanzado en nuestra labor legislativa.
De trabajo con el Ejecutivo, de las que lamentablemente algunos se han restado. Algunos se han restado, algunos no han querido ser parte de la discusión. Lamentablemente, en el período que me ha tocado ser presidenta, hemos tenido que luchar contra las iniciativas dilatorias de algunos diputados de esta comisión. Algunos diputados que no quieren avanzar, que quieren votar coma por coma de las indicaciones, porque no sienten la urgencia de responderle a la gente, porque no sienten la urgencia de las y los estudiantes endeudados y sus familias, porque no sienten la urgencia de garantizar el derecho a la educación. ¿Por qué? Probablemente porque son defensores del lucro y del mercado educativo.
Por este acto hago efectiva mi renuncia a la Comisión de Educación como presidenta. Por supuesto, seguiré siendo integrante de ella y defendiendo las convicciones y los principios que me trajeron a ser representante de este Congreso Nacional. Espero que la próxima presidenta de esta comisión, que será la diputada Mónica Arce, desempeñe un excelente trabajo, cuente con todo mi apoyo y, por cierto, con el respeto de los acuerdos que hemos honrado en esta Cámara y que espero se honren también para la mesa de la Cámara de Diputadas y Diputados, y logremos sacar adelante los proyectos que la ciudadanía espera. Quiero pedirle a la Comisión la unanimidad para aceptar mi renuncia, y me parecería poco coherente que quienes me censuraron hoy y buscaban que yo saliera de esta Comisión no la dieran. ¿Habría unanimidad para mi renuncia?
Diputado Abadía.
Presidenta, yo no voy a aceptar. Usted nos diga que nosotros estamos a favor del lucro, que lo queremos reponer. Lo que queremos, presidenta, es que el Estado no lucre, porque le van a prestar 10 y le van a devolver... Estamos hablando sobre la renuncia de la Presidencia, que se está metiendo al fondo. Yo estoy en contra de que el Estado lucre a costa de los estudiantes más vulnerables de nuestro país. Dale, unanimidad para la renuncia de la Comisión. Sí, presidenta, porque si logramos cambiar esto, es para mejor. Supongo que ¿quién va a conducir? Nos dará garantías a todos y a cada uno de los integrantes de esta comisión.
Se acepta la renuncia, entonces, a la presidencia de la Comisión. Esta será mi última sesión presidiendo. Nos corresponde votar, en la próxima sesión, la presidencia de la Comisión. Muchas gracias a todas y a todos. Veo que había mucha gente interesada en esto, así que ahora entramos en puntos varios.
Diputado Vadilla.
Eso. Quiere hablar.
Diputado Badía, hable.
Sí, presidenta. Para la próxima administración, porque ya no va a ser bajo su presidencia, quiero hacer una sugerencia. Nos podemos dar cuenta de que el Ejecutivo hoy está con un ejército de asesores y la sala, creo, no da abasto. Quiero sugerir, presidenta, que para las próximas sesiones… ¿Cenemos? O sea, ¿cesionemos? Sí, también podemos cenar. Presidenta, ¿cesionemos en la biblioteca o en la sala de plenario? Porque esta concurrencia realmente da cuenta de que esta sala no es la más apropiada. Gracias, diputado Badía.
Diputado Rey.
Ruego a las personas que no sean de los equipos, ni del gobierno, ni de los equipos parlamentarios, salgan de la sala, por favor.
Diputado Rey.
No, no son solo del gobierno. Adelante, diputado Rey, tiene la palabra. Estamos haciendo el llamado, diputado. Le pido, por favor, que haga uso de su palabra. Vamos a hacernos cargo, diputado. Acabamos de rechazar una censura precisamente con varios argumentos en contra de la dilación. Le pido que pueda hacer cargo de su palabra. ¿Siendo que cumple el reglamento, presidenta? Vamos a hacer cumplir el reglamento. Gracias. Le pido a usted que tome la palabra.
Diputado Rey.
Gracias, presidenta.
Diputado Rey.
Bueno, lo primero que quiero señalar, no sé si el diputado Lompton venía por lo mismo, por la suspensión de clase, diputado, que se había hecho hace poco acá en la provincia de Valparaíso. Diputado Lompton, ¿por la suspensión de clase? ¿Es por eso? ¿Por la suspensión de clase que se hizo? Bueno, entonces, diputado, lo que pasa es que la semana pasada se suspendieron, el día martes, acá en Valparaíso, las clases por una plaga de ratones en cocina y comedor. Nosotros hemos recibido innumerables críticas...
Durante mucho tiempo se ha denunciado el estado de los establecimientos educacionales acá en la Región de Valparaíso. Funcionarios del Liceo Alfredo Nazar de Valparaíso emitieron un comunicado el lunes pasado para manifestar su preocupación por la plaga ratónica que afecta al establecimiento desde la semana anterior, situación que obligó a la suspensión de clases. Por ello, solicito al Ministerio de Educación que agilice esta situación y que, a través de la Superintendencia, se fiscalice el resto de los establecimientos educacionales para que este tipo de hechos no se repitan.
Es preciso recordar que en la Región de Valparaíso, que presenta una de las tasas de asentía más altas del país, muchos estudiantes reciben como único alimento el que se entrega en su colegio, de buena calidad y de buen estándar. No recibirlo durante varios días representa un perjuicio enorme para ellos y para sus familias, por lo que pido, por favor, que se evite de una vez por todas este tipo de situaciones.
Otra situación que quiero señalar, Presidenta, es que en innumerables ocasiones se ha hablado sobre la salud financiera de las instituciones de educación superior, de acuerdo al informe o estudio realizado por la Superintendencia de Educación Superior. Lo que deseo enfatizar es que dicho estudio, que afirma que la situación financiera ha mejorado y que la gratuidad tuvo efecto sobre ella, realmente sostiene que no tuvo efecto. Esto es lo que dice el gobierno y lo han manifestado ustedes a lo largo de todo el debate sostenido durante varias semanas. Lamentablemente, este estudio presenta serios defectos, siendo el principal que no se toma en cuenta la inflación, ya que se comparan los pesos del año anterior con el año siguiente sin considerar dicho factor. ¿Quién compara los datos de esa manera? Por ello, solicito mayor prolijidad al realizar estos estudios y, a través de esta comisión, enviamos un comunicado a la Superintendencia de Educación para que se reúna con Hacienda y aclare qué es la inflación y cuál es su impacto, puesto que parece no tenerse claro.
Presidenta, esto es algo muy, muy complejo, ya que afecta los ingresos reales de las universidades, los cuales, a pesar de afirmarse que no han caído, en realidad sí lo han hecho. Creo que este no es un tema menor, y disculpe que me extienda unos segunditos, pero es un punto que se ha reiterado en numerosas ocasiones.
Y lo último, seré más breve. Se ha dicho, por parte del diputado Santana, por su intermedio, que como usted misma lo ha manifestado, la derecha quiere mantener los bancos y condenar a los estudiantes y a las familias. A ver, existe un proyecto del expresidente Piñera, de hace años, que termina con la banca y la educación. Ustedes, la izquierda, son los responsables de que no se haya avanzado en ese tema; son quienes, durante muchos años, han condenado a los estudiantes a adquirir la deuda que hoy poseen. Háganse responsables, diputado Santana, por su temerario; háganse responsables usted y su partido, que ha rechazado del CEDAW el avance que se proyectó en su momento para mejorar las condiciones de los estudiantes. Basta ya de mentirle a la gente, Presidenta. Muchas gracias.
Muchas gracias, diputado Rey. Ruego, por favor, a las y los presentes tomar en cuenta que tenemos poco tiempo y hay muchas palabras tomadas. Tengo a la diputada Rafael, al diputado Barría, a la diputada Molina, al diputado Schubert, a la diputada Medina, al diputado Teago, al diputado Lonton y al diputado Santana. Ya están cerradas las palabras porque son muchas.
Sobre el punto, diputada Serrano: Presidenta, respecto al segundo tema que exponía el diputado Rey, si él solicita el acuerdo a esta comisión, debo manifestar que no lo brindaré, pues consideramos que ya tuvimos al superintendente de Educación exponiendo todo lo concerniente. Además, creo que el diputado Rey ni siquiera abrió la presentación en la que estábamos hablando justamente de esta temática. Diputado Rey, por favor, mantenga el respeto en la comisión.
Diputada Rafael tiene la palabra.
Gracias, Presidenta. En Magallanes, más de 12.000 escolares no han entrado a clases debido a un nuevo conflicto en la educación pública.
Familias preocupadas porque sus hijos aún no parten con su año escolar, empezando incluso el mes de abril. Claramente, la transferencia de deuda es uno de los importantes problemas a los SLEP, y sé que este tema, Presidenta, viene en parte con la solución en el proyecto que modifica la Ley 21.040, que está en el Senado. Por eso, espero que este proyecto mejore el traspaso financiero de las municipalidades a la educación pública.
En el caso de Magallanes, las dificultades se centran en el déficit ante el traspaso a los SLEP. Además, existe una solicitud de aumento de sueldo por parte de los profesores, ya que los estudiantes lograron un aumento de sueldo ante dicho traspaso. Para agravar la situación, el director regional del SLEP se encuentra con licencia desde el 3 de marzo, cuando se inició el paro.
Aprovechando esto, Presidenta, quiero también comentarle al Ministro la especial realidad de la zona extrema, donde se requiere una alta dotación de profesores y asistentes de la educación en las escuelas, a pesar de la baja cantidad de alumnos, hecho que lamentablemente no se reconoce a nivel central. Por ejemplo, en una comuna de 560 habitantes, sin conectividad, existe un alumno con discapacidad que necesita un kinesiólogo, pero no hay ninguna subvención que reconozca estos casos especiales para nuestros alumnos.
Por eso, Presidenta, yo quisiera solicitar al Ministerio de Educación que busque una solución a la brevedad a la situación de Magallanes, para que estos 12.000 alumnos puedan comenzar su año escolar, y también oficie al Ministerio de Educación para darle celeridad al proyecto de ley que modifica la Ley 21.040.
Gracias, Presidenta.
Muchas gracias, Diputada Rafael.
El Ministro de Educación me ha pedido la palabra sobre el punto.
Muchas gracias, Presidenta, y primero que todo saludarla y agradecer este período en que hemos colaborado estrechamente en el trabajo de la Agenda de Educación, siempre dispuesta a colaborar y avanzar en el resguardo del derecho a la educación de nuestros jóvenes y estudiantes.
Sobre el punto señalado por la Diputada Rafael por su intermedio, quiero señalar que efectivamente estamos en presencia de una movilización, una paralización de actividades, producto de un aumento de remuneraciones solicitado por el Magisterio, que simplemente no es sostenible ni posible. Ese es un servicio local que, previo al traspaso, arrastraba años de deudas previsionales, sueldos impagos y déficits mensuales que afectaron a los alcaldes de las comunas más importantes, como Punta Arenas y Natales. He tenido la experiencia de verlo en ambos lados: primero en Subdere, solicitando apoyo, ayuda y recursos, y luego en el Ministerio de Educación, en negociaciones que califico abiertamente de irresponsables.
Es más, en esta misma comisión aprobamos una norma de inoponibilidad de los derechos adquiridos por los trabajadores, para que estos no sean oponibles al servicio local. La estimación de la deuda es de cerca de 25.000 millones de pesos anuales que se deben suplementar para pagar las remuneraciones, con salarios que, en el caso de los asistentes de la educación –quienes tenían derecho a negociar colectivamente– en algunos casos alcanzan más de 7 millones de pesos. Una cuestión es la brecha remuneracional de arrastre, ya que, cuando llega el servicio local, comienzan a pagarse los sueldos como corresponde y aparece esa brecha, que antes era teórica por no haberse pagado sueldos completos.
Todo el año pasado se normalizó el servicio, efectivamente, cuando el servicio local se hizo cargo por primera vez, y hoy surge esta demanda de aumento de salario, que simplemente no es sostenible. Estamos hablando de más de 5.000 millones de pesos que implicaría el aumento del valor hora, lo que se solicita por parte de los docentes, con efectos nacionales; lo que ocurra en un lado, ocurrirá en el resto de Chile, naturalmente. Y, además, aunque fuese posible, no contamos con los recursos. De hecho, se sumarían 5.000 millones a una deuda que ya es de 25.000 millones. O sea, hoy la lógica es que deberíamos ir generando el cierre de la brecha del déficit en lugar de aumentarlo.
Quiero señalar también, Presidenta, que si uno hace un estudio comparativo de las remuneraciones de los docentes a nivel nacional, tanto en Punta Arenas como en Magallanes en general –teniendo en cuenta las diferencias, al igual que en Aysén, entre comunas y porcentajes de asignaciones–, se evidencia que son los salarios más altos del magisterio. Por lo tanto, Presidenta, estamos haciendo todos los esfuerzos por buscar caminos, alternativas y soluciones a este conflicto. Sin embargo, yo tengo que señalar claramente que acá no se trata de...