Buenas tardes. Abrimos la sesión procediéndose a tramitar el orden del día, celebración de las siguientes comparecencias de la directora general de la Entidad Pública Empresarial de Suelo, SEPES, para dar cuenta de su gestión y del proceso de transformación de la entidad en la nueva empresa pública de vivienda (autor: el Gobierno); para explicar las actuaciones que va a llevar a cabo SEPES en las políticas de vivienda del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana (autor: Grupo Parlamentario Popular en el Congreso).
Sin más, tiene la palabra la señora directora general de la Entidad Pública Empresarial de Suelo, Leire Iglesias, a quien agradecemos su presencia y su disposición para informar en esta comisión y para informar sobre el objeto de las comparecencias acumuladas.
Le recuerdo que tras la intervención de la señora Iglesias tienen la palabra, por un tiempo de diez minutos, los grupos parlamentarios y luego habrá también una réplica por tiempo de cinco minutos.
Señora Iglesias, tiene usted la palabra.
Muchas gracias, presidenta.
Señorías, hacía mucho tiempo que no me dirigía a una sala como señorías, pero en cualquier caso quisiera comenzar mi intervención por ser esta la primera vez que comparezco en esta Cámara en calidad de directora general de la Entidad Pública Empresarial de Suelo, SEPES, no la primera vez que comparezco en esta Cámara, pero sí la primera vez que lo hago como miembro del Gobierno, mostrando la máxima voluntad de colaboración con todos ustedes, tanto en el control como en la transparencia, como en el rendimiento de cuentas, por supuesto, y también en la capacidad de impulso que le compete a la actividad del Legislativo, la capacidad de impulso de distintas iniciativas. Y por tanto, y dado las horas y lo largo de la jornada y lo que se ha extendido...
…el Pleno también, y agradeciendo la atención que ustedes vayan a poder mostrar después de una sesión tan larga, pues procuraré ser concreta en mi exposición inicial al menos y atender sus aportaciones al debate, por supuesto durante la sesión y también a continuación en lo que pueda quedar pendiente de resolver, de no dar tiempo a responder o que no tenga la información a mano y se la pueda hacer llegar. Actividad o disposición que, por supuesto, no limito a la comparecencia del día de hoy, sino al respeto de la actividad parlamentaria y, por tanto, a su disposición en cada uno de los momentos que puedan estimar pertinente.
Luego, con el más absoluto respeto de quien hace algún tiempo —y alguno lo sabe invirtiéndonos los papeles— fue portavoz de su grupo en esta misma comisión. Bueno, en esta misma exactamente no, sino en una comisión parecida. En aquel momento ya la vivienda era un asunto de debate intenso y, pese a que se vivía no solo una crisis, sino lo que se llamaba el drama de los desahucios, no había una comisión específica, tampoco un ministerio específico ni herramientas como las que en este momento les quiero trasladar y contar, específicas para abordar esta situación como las que estamos impulsando y que se volcaran en dar respuesta a una justa demanda de un acceso a una vivienda digna, de calidad, que dice la Constitución, y asequible, pensando en aquel entonces, y pensando también en el futuro. Porque buena parte de la crisis que vivimos hoy tiene su origen también en decisiones tomadas en el pasado. Se dejó en aquel momento todo en manos de códigos de buenas prácticas —unos que funcionaron con más éxito, otros con menos— aplicados por los mismos que, en parte, fueron responsables también del origen de aquella crisis.
Y por coherencia también, no me queda otra que hacer esta intervención desde la absoluta convicción y compromiso, tras haber reclamado y defendido desde esta misma sala —o desde otras salas parecidas en este hemiciclo, en este Congreso— una y otra vez que se adoptaran medidas. Creo que fuimos muy propositivos en aquel entonces y, en una comisión diferente, dedicamos muchas horas a hablar de la vivienda y a proponer respuestas en materia de vivienda. En aquel momento SEPES, la entidad que ahora dirijo, tampoco fue especialmente activa a la hora de adoptar decisiones. Es más, la Entidad Pública Empresarial de Suelo del Estado vivió en aquel momento su propia crisis de desinversión y de recortes. Por otra parte, algo que le pasaba al conjunto del sector público. No es que le pasara exclusivamente a SEPES, sino que en el conjunto del sector público se adoptaron una serie de medidas de desinversión y de recortes que, en el caso de SEPES, supuso llegar a presentar un rendimiento neto negativo en el periodo 2012-2018. Pero lo que es más grave, siendo una entidad pública de suelo, tampoco tuvo un papel relevante a la hora de garantizar justamente eso: el suelo, la disponibilidad de ámbitos residenciales para el futuro, hacer políticas contracíclicas.
Las inversiones del periodo 2019-2024 son ya dos veces y media superiores —teniendo un año menos— a las del periodo 2012-2018. Y es que la crisis de la vivienda de 2011, tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, no solo expulsó a miles de personas de sus casas —probablemente la cara más dura en aquel momento de aquella crisis—, como hoy lo pueda ser la falta de oportunidades de algún sector de la población, especialmente de la gente más joven, sino que también destruyó cientos de empresas y más de un millón de puestos de trabajo. También hizo que se dejaran de urbanizar los espacios residenciales que hoy deberían estar listos para acelerar la promoción de viviendas que se necesitan para cubrir la falta de stock. Las viviendas no se construyen rápidamente sobre cualquier sitio. Tenemos que tener espacios urbanizados que lo permitan. Y las políticas contracíclicas son justamente las que posibilitan que se puedan acelerar esos tiempos de construcción.
He de decir, si me lo permiten, presidenta, que la negativa…
Directora General de SEPES:
Presidenta, de esta Cámara en el Pleno para modificar la ley del suelo tampoco es que lo ponga fácil a la hora de acelerar los procesos necesarios para disponer de suelo sobre el que construir vivienda, y ya estamos bien metidos en el Pleno 2025.
Hoy puedo traer a esta comparecencia los resultados de una empresa pública saneada que no presenta resultados negativos; al contrario, el resultado de pérdidas y ganancias del pasado año fue un 3.810 % mejor que el del año anterior, lo que refleja el magnífico momento de la economía española.
Bolsas de suelo que estaban, podríamos decir, en barbecho y sobre las que nadie ponía atención, están siendo hoy demandadas y comercializadas en cada uno de los lugares en los que SEPES tenía una actividad fundamentalmente industrial.
Pero buena parte de ese sano resultado económico de la entidad —puesto que esta comparecencia aborda dos temas, tanto la gestión como el proceso de transformación, a petición propia y del Grupo Parlamentario Popular— tiene que ver también con el encargo del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana a SEPES para atender lo que no se hizo en el pasado: cubrir la escasez de suelos residenciales a través del plan de vivienda de alquiler asequible, que inicialmente —y esto fue un proceso que se inició ya la legislatura pasada, no con el nacimiento del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana— pretendía movilizar 292 hectáreas de suelo con capacidad para construir 15.000 viviendas.
En ese momento, SEPES se encargó de la adquisición, de la aprobación de instrumentos de planificación y de la adaptación urbanística, de la dotación de servicios y de la ejecución de obras para, a continuación, comercializar o enajenar estos terrenos, como habitualmente se ha venido haciendo también en suelos industriales.
Aclaro esto que acabo de contar, que puede ser difícil de entender pensando en el ámbito de la vivienda, porque no tengo muy claro si esta es la primera comparecencia de una directora general de SEPES ante la Comisión de Vivienda o ante la comisión similar que hubo en su día en el Parlamento. Pero, por si acaso, con respeto al diario de sesiones y a su historia, lo explico: durante más de 65 años SEPES ha contribuido al progreso socioeconómico con el desarrollo y venta de suelo para actividades económicas y urbanísticas, principalmente polígonos industriales, aunque también con cierta experiencia en suelos residenciales para vivienda protegida, especialmente cuando existieron los ministerios de vivienda en las distintas etapas.
Sobre esa base de conocimiento y capacidad, hoy queremos ir mucho más allá: ser uno de los instrumentos que contribuyan al cambio de paradigma de la inversión pública en materia de vivienda, atendiendo a la creciente demanda de vivienda asequible.
En España no se ha invertido menos que en otros países de nuestro entorno en vivienda, aunque pueda parecerlo. En los últimos 47 años se han financiado cerca de 2,7 millones de viviendas protegidas; se han concedido bonificaciones fiscales de más de 7.000 millones de euros; se han movilizado decenas de miles de millones en distintos planes de vivienda desde 1983 y, como con los polígonos que antes relataba, con la vivienda, toda esa inversión se liberalizó, impidiendo que hoy contemos con un parque protegido que, más allá de la regulación —también necesaria, por cierto— contribuya a moderar los precios de la vivienda que asfixian a buena parte de la sociedad y haga que el calificativo de “digna” que contempla la Constitución lleve implícito, sin que tengamos que recordarlo, el calificativo de “asequible”.
Por eso, de la suma de ambas cuestiones —la capacidad demostrada de SEPES para transformar suelo bruto en suelo finalista y la necesidad de cambiar el paradigma de las políticas de vivienda— queremos avanzar decididamente.
que impida que privaticemos toda la inversión pública, se justifica este cometido, esta transformación que estamos ya abordando. Lo que se consigue con el esfuerzo y los recursos de todos debe garantizar su función social siempre, insisto, siempre, de forma permanente.
En consecuencia, hemos comenzado ya a dar ese paso más, incrementando el número de actuaciones y de funciones de SEPES y poniendo en el centro la vivienda asequible para la ciudadanía, que ya establece por ley la ley por el derecho a la vivienda.
La nueva entidad se enmarca en una prioridad del Gobierno de España, la de garantizar un derecho básico contemplado en la Constitución, por el que debemos velar todos los poderes públicos, cada uno en el marco de nuestras competencias, el legislativo, el ejecutivo y los distintos ejecutivos que hay y que componen el Estado compuesto, que es el Estado español.
Se pasará de planificar y urbanizar los suelos para después enajenarlos a un tercero, a planear, urbanizar, edificar vivienda y gestionar un parque estatal de vivienda asequible del que hoy carecemos.
Con esto, además, demostraremos que gestionar vivienda asequible es viable y que lo que excede del precio que los ciudadanos pueden asumir para el pago de sus rentas de alojamiento, limitado al 30% de sus ingresos, de su esfuerzo financiero, es un mayor beneficio de quienes hoy se dedican al mercado residencial.
Llevamos años de desventaja con otros países. Lo decimos con mucha frecuencia. Nuestro parque social, aunque se está incrementando como consecuencia de las inversiones de estos últimos años, aún no converge con la media europea del 8%. Y más llevaremos si no emprendemos este camino desde ya. En algún momento hay que empezarlo. Y digo desde ya porque en el mismo momento en el que se hizo el anuncio de este nuevo cometido de la entidad pública empresarial de suelo, este nuevo cometido de SEPES, hemos asumido ya esa conversión e iniciado los trabajos en paralelo a reforzar los instrumentos que permitan esa transformación. No queremos perder ni un minuto.
Llego a esta comisión unos meses después, pocos meses después de este anuncio, contando con una nueva clasificación de la entidad, con la creación de una estructura para una dirección para la gestión del parque de vivienda, que no existía, con la creación de una dirección para la colaboración público-privada y público-social, con la elaboración de un plan estratégico que determine los medios y el impacto necesario para poder alcanzar estos objetivos, también con el calendario que deba establecerse, con el análisis de los inmuebles de la Administración General del Estado, la fijación del perímetro a transmitir desde Sareb y su planificación, la licitación de la redacción de los proyectos para la construcción de más de 1.600 viviendas sobre suelos que anteriormente y mayoritariamente pertenecían a Defensa, con un incremento de un 350% en el número de actuaciones urbanísticas que estamos abordando.
Con el inicio de las obras de urbanización del Regimiento de Artillería de Sevilla, con la práctica finalización de las obras del Cuartel de Ingenieros de Valencia, con la ejecución de las obras en Encán Escandel, en Ibiza, con la presentación para su aprobación del proyecto de urbanización que esperamos sea aprobado lo antes posible, a ser posible en breve, en Buenavista, en Málaga, con la adquisición de casi una treintena de viviendas en Valencia o, entre otras, con la aprobación inicial del proyecto de urbanización de lo que será, por fin, el nuevo barrio de Campamento en Madrid, tras la aprobación de la iniciativa urbanística y las bases y estatutos de la Junta de Compensación, una actuación de la que se lleva hablando décadas en este país.
Por su importancia, déjenme que me detenga a explicar, sin detenerme demasiado, tanto el plan estratégico como la definición de los perímetros de suelos y vivienda que comenzarán a incorporarse al patrimonio de SEPES para su puesta a disposición como vivienda asequible. No les voy a dar todos los detalles que seguramente algunos esperan y que ha levantado alguna curiosidad hasta esta comparecencia, pero los iremos dando a lo largo de los próximos días.
Como les he indicado anteriormente, no se trata solo de pasar de gestionar suelos a cubrir el ciclo completo de la vivienda.
Desde el planeamiento hasta la entrega de llaves, ni tampoco de contribuir exclusivamente a la creación de un parque de vivienda asequible para siempre, que son dos objetivos bastante importantes. Se trata, además, de demostrar que la vivienda asequible es sostenible. Para ello, el modelo económico de la entidad debe tener en cuenta tanto el número de inmuebles capaces de incorporar como el precio, así como los recursos necesarios para su gestión.
Respecto a la creación del parque, SEPES dispone ya de 39 ámbitos programados con capacidad para la promoción de casi 20 000 viviendas y otros 13 de próxima adquisición. Además, se ha estimado la posible incorporación de aproximadamente 2 500 solares, unido a la de las viviendas ya finalizadas, lo que da un horizonte para poder ofertar lo antes posible suelo en zonas prioritarias.
Estos suelos serán desarrollados mediante distintas fórmulas: bien sea mediante colaboración público-privada, incluyendo la colaboración público-social por parte de empresas de economía social o de otro tipo de entidades; mediante la promoción y gestión directa con nuestros propios medios; mediante la colaboración público-pública, con la cesión a otras administraciones públicas, manteniendo así los compromisos adquiridos en el pasado; o mediante la enajenación en forma de vivienda protegida, siempre que esa protección se pueda hacer para siempre.
En caso de aplicarse fórmulas de colaboración público-privada o público-social a través de determinadas empresas, bien sea con las que ya se están desarrollando a partir del mecanismo del Plan de Recuperación Europeo, lo haremos a través de derechos superficiarios o mediante concesiones de obra. Se establecerán precios máximos de arrendamiento de entre 5 y 11 euros por metro cuadrado en función de las rentas de la zona, compensándose mediante incentivos económicos estas promociones, que en cualquier caso tendrán limitada su rentabilidad.
Déjenme que haga un pequeño paréntesis en este punto. El pasado 22 de mayo, el Grupo Parlamentario Socialista registró una proposición de ley que, entre otros aspectos, incluye una modificación de la Ley de Patrimonio, estableciendo que en la enajenación de viviendas de titularidad de SEPES, o promovidas en solares de uso residencial enajenados por la entidad, el precio de venta no podrá superar nunca el que en ese momento esté establecido por la comunidad autónoma para el módulo de vivienda protegida, afectando a las sucesivas transmisiones e incorporándose a las escrituras públicas.
Además de agradecer esta iniciativa del Grupo Socialista, me gustaría hacer una reflexión. Hace tiempo que escucho a algunos grupos pedir que, por ejemplo, se garantice que todas las viviendas que se construyan en ese nuevo barrio de Campamento, o los nuevos barrios de Campamento que hay repartidos por otras zonas de España —porque son actuaciones de grandes bolsas de suelo de las que les he remitido anteriormente—, sean asequibles para siempre. Esa es nuestra voluntad y así se ha comprometido a hacerlo la ministra de Vivienda y Agenda Urbana. Creo que la iniciativa del Grupo Parlamentario Socialista es una buena forma de evitar que en el futuro alguien tenga la tentación de vender el patrimonio de todos a fondos o entidades que especulen con los precios. Es una buena oportunidad para aprobar la tramitación de esta iniciativa, dar esas garantías y, si es posible, mejorarla.
Esta misma proposición de ley —esta misma PPL, por cierto— facilita, aunque no sea el único medio, la incorporación de inmuebles de otros organismos del Estado a SEPES con el objeto de disponer cuanto antes, no solo del compromiso y la voluntad política que llevamos repitiendo desde hace tiempo, sino también materialmente de la disponibilidad efectiva tanto de los suelos como de las viviendas. En este capítulo se incluyen los suelos y las viviendas de la SAREB. Intuyo, creo…
que me van a preguntar mucho por esto. No lo sé. No saben lo importante que es para mí, personalmente, pero más allá de lo personal también, que tanto reclamé en el pasado que un rescate bancario no podía dejar de lado un rescate ciudadano, mientras veía cómo a los bancos se les establecía una acción en pago y a las familias no se les daba una segunda oportunidad para no perder su vivienda, que hoy, por fin, podamos reparar esa situación.
El patrimonio de todos, a disposición de todos y para siempre.
En cuanto a la administración de estas viviendas, cabe su gestión tanto directa como por vía de acuerdos de colaboración, mediante la cesión del usufructo con otras empresas públicas de vivienda, que las hay en el territorio, autonómicas o locales, sin que se pierdan las condiciones del Parque Estatal de Vivienda Asequible, entre ellas la primera y más importante: la que corresponde a la fijación de precios.
Estas viviendas se ofrecerán por debajo del precio de mercado, es decir, por debajo del indicador que ya reflejan los datos públicos ofrecidos por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, entre ellos, mediante el Sistema Estatal de Referencia de Alquiler de Vivienda. A la vez, se aplicará un doble factor sobre la política de precios, fijando una tasa de esfuerzo que no supere el 30 % sobre la renta estimada de la unidad tipo de convivencia en la zona en la que se ubique la vivienda: el menor de los indicadores de precio, ya sea el que esté por debajo del precio del mercado o el que indique el indicador del 30 % de la tasa de esfuerzo financiero que determina la ley de vivienda.
Se trata, por tanto, de dirigirse a una mayoría social, facilitando el acceso a la vivienda que tantas cosas condiciona. No se trata de los típicos alojamientos conocidos o las viviendas VPP que conocemos todos, dirigidos a sectores de población en situación menos favorable y que precisan, además de la intervención en la construcción o habilitación de la vivienda, la seguridad que da un acompañamiento social, que también debe seguir incrementándose desde las administraciones competentes para mantener ese parque social de vivienda.
Este proceso de adscripción y promoción de inmuebles, tanto de viviendas como de suelos, priorizará las zonas declaradas tensionadas o en trámites de hacerlo. Además de Valencia, por la fundamental razón de que el Gobierno se comprometió a estar todo el tiempo que fuera necesario y así lo vamos a hacer. Esta priorización se hace en coherencia con la responsabilidad que el Gobierno de España asume con medidas extraordinarias dirigidas a revertir esa tensión residencial cuando así se declara y se pide un esfuerzo que debe contar con el acompañamiento y con la inversión pública.
Así se ha establecido un primer perímetro como prioritario que incluye Cataluña, Navarra, Asturias, Euskadi, Galicia y Valencia porque comenzará tanto la adquisición de viviendas como el desarrollo de suelos.
Para llevar a buen término este propósito será imprescindible la cooperación y la colaboración tanto con el sector, incluyendo a las emergentes organizaciones gestoras de vivienda, como, por supuesto, con las comunidades autónomas.
Me he referido a ello varias veces, pero también será necesario el redimensionamiento de SEPES, un cambio estructural de la organización necesario para desarrollar la tarea encomendada, tanto en recursos humanos como económicos y materiales, dirigidos a prestar un servicio a la ciudadanía que hasta ahora no se prestaba.
Lo expresé al comienzo de mi intervención. El periodo 2012-2019 fue un tiempo en el que se redujo notablemente la plantilla de la entidad —insisto, de esta y de otras entidades públicas— además de registrar pérdidas económicas y falta de inversión. En estos años hemos recuperado un 25 % del personal y contamos con una tesorería que nos posibilita comenzar ya las inversiones que permitan la conformación del Parque Estatal de Vivienda.
No será sencillo; requerirá una inversión estable y continua a lo largo de varios años. Pero estamos hablando de cambiar el paradigma de las políticas de vivienda, priorizando para siempre su función social sobre otras funciones de mercado que muchas veces se le ha asociado.
Iglesias:
al valor de la vivienda, abordando la demanda de miles de ciudadanos hoy, pero también procurando evitar nuevas incertidumbres en el pasado, asumiendo un nuevo papel activo y con impacto social desde el Estado, no solo como regulador o financiador, sino como parte de la planificación, promoción y gestión. La dificultad de acceso a la vivienda puede tener muchas causas. Veía algún diputado sonreír por aquello de recordar las causas del pasado. Puede tener muchas, estas que he citado y algunas más. No es mi voluntad vivir en el pasado para nada. Pero sobre todo, y en eso seguro que estamos todos de acuerdo, tiene importantes consecuencias. Hablamos de certezas, de seguridad, de futuro. Hablamos de vidas personales. Esta apuesta no es solo un cambio de modelo. Es un giro para construir un modelo duradero, estructural y justo en el que tengan cabida esos proyectos de vida. Y seguro, estoy convencida de que esas son las cosas que merecen la pena. Y a partir de ahora queda a su disposición.
Presidenta:
Muchas gracias, señora Iglesias, por su exposición. A continuación, tienen la palabra los grupos parlamentarios; como les he dicho, el turno es de diez minutos. Por el Grupo Parlamentario Vasco tiene la palabra la señora Vaquero.
Vaquero:
Buenas tardes. Yo pensaba que iba a concretar cuál iba a ser el plan que nos iba a presentar, el plan de actuación de esta nueva entidad pública de vivienda, y la verdad es que, aparte de lo que he podido mirar y ver en las diferentes páginas web, no me ha aclarado mucho más. Tengo algunas preguntas, pero no sé si me van a ser contestadas o no.
Usted ha dicho, y voy a empezar por el final, que tienen tesorería suficiente para comenzar, pero no nos ha dicho cuál es la tesorería que tienen, de cuánto dinero disponen. Porque, como bien ha dicho y hemos repetido en numerosas ocasiones, para hacer una política de vivienda se necesita invertir recursos públicos y que estos sean continuados en el tiempo. Para lograr ese cambio de paradigma de las políticas de vivienda, invertir no solo cuando hay fondos extraordinarios europeos, sino con fondos estructurales que estén todos los años en los presupuestos, en este caso de vivienda.
Yo pertenezco al Partido Nacionalista Vasco y, por lo tanto, tengo que hablar también del ámbito competencial. La función que va a cumplir esta entidad pública: ¿cómo va a colaborar con las comunidades autónomas? Sobre todo en aquellas que ya tenemos entidades públicas de vivienda y que están desarrollando un trabajo, y en aquellas en las que incluso la vivienda protegida sigue siendo protegida y no pierde esa condición con el paso de los años. No sé cómo vamos a poder compatibilizar las funciones que usted ha señalado para esta entidad pública con las de las comunidades autónomas que ya gestionan vivienda pública.
Ha hablado de colaboración y de convenios. He oído que ha citado a Euskadi, una de las comunidades en las que se va a intervenir. Me gustaría conocer con mayor profundidad cómo se va a intervenir, aunque difícilmente si no conocemos cuál es el plan. Usted ha expuesto un histórico de la escasa inversión del Estado en vivienda y las carencias que han existido, pero nos gustaría saber cuál es el planteamiento de futuro, porque nos han dicho que esta va a ser verdaderamente la entidad pública de vivienda más importante para gestionar suelo público y para desarrollar todo el ciclo. Sin embargo, el ciclo completo, en cuanto a competencias autonómicas, ya lo administramos.
Tal vez otro tipo de colaboración arrojaría mejores resultados. Igualmente, podría decir que, claro, en Euskadi ya tienen un modelo, entonces vamos a copiar el modelo vasco. Otra cosa que usted ha dicho, y que a nuestro entender es importante, es que vamos a colaborar con el resto de los gobiernos de las comunidades autónomas. Pero no quiero que se olviden de que esas comunidades tienen parlamentos elegidos por los ciudadanos y son, en última instancia, quienes tienen que aprobar las leyes. Leyes que nosotros también presentamos junto con el Partido Socialista, con quien gobernamos en Euskadi.
Coincido con usted en que es una pena que no se haya aprobado la ley del suelo o no se le haya dado salida, porque había modificaciones muy interesantes para disponer de suelo y para edificar vivienda protegida.
Sra. Madrenas:
No sé si nos va a poder contestar a estas preguntas, pero, mirando al futuro, ¿cuáles son los planes de esta empresa para poder cumplir el objetivo de conseguir vivienda asequible para la ciudadanía, que es lo que todos y todas necesitamos?
Sí, muchas gracias. Efectivamente, quizás esperábamos un poco más de esta comparecencia, con un poco más de detalle y concreción sobre lo que tienen previsto hacer, ni que sea en los dos próximos años. Espero que ahora, en la segunda intervención, nos lo concreten un poco, porque eso es lo que han trasladado los medios de comunicación. Por tanto, esperaba algo más de concreción.
Entonces, tengo algunas dudas, algunas de las cuales usted ya ha empezado a responder, y por tanto también estaremos atentos a su respuesta, al igual que la compañera del PNV. Ha hablado de una empresa saneada, con superávit. Hombre, una empresa que se dedica a facilitar vivienda asequible no debería generar superávit; eso sería una mala noticia. Lo que queremos es que todo se destine e invierta en el fin último, que es aumentar la oferta de vivienda asequible.
No nos ha concretado cuántas viviendas asequibles se han puesto a disposición en los últimos cinco años, ni cuántas tienen disponibles hoy. Tampoco hemos conocido el presupuesto anual que prevén para invertir en vivienda. Le pediría que nos lo aclare. Asimismo, me gustaría que concretara el personal del que disponen: si planean, o tienen previsto, hacer decenas de miles de viviendas, con lo que he visto en la prensa parece materialmente imposible sin refuerzo de plantilla. ¿Cuánto personal dedican a la gestión de estos inmuebles y cuánto prevén destinar en el futuro?
Porque no se puede acometer promociones de vivienda que supongan un gran esfuerzo de todos los ciudadanos —a través de impuestos— y que después acaben convirtiéndose en guetos insostenibles. Eso no lo quiere nadie, y ustedes tampoco. La administración de estos inmuebles es fundamental desde el primer minuto. Por tanto, ¿cuánto personal tienen ahora, y cuánto piensan incorporar, bien por inmueble o por vivienda?
Respecto a los precios que han mencionado, siempre ocurre lo mismo en Cataluña: todo es más caro. Por tanto, viviendas a 11 euros el metro cuadrado no serán viables. Les pedimos que reflexionen al respecto, porque no habrá oferta suficiente; y si pretenden colaboración con el sector privado, tampoco funcionará. Tendrán que buscar otras soluciones. Por favor, piensen en esta cuestión, porque si no volveremos a estar como siempre en Cataluña: los últimos y los menos partícipes.
¿Cómo se relacionará esta empresa con las diversas comunidades autónomas? Me parece insuficiente la colaboración cuando las competencias en vivienda son totales en las autonomías. ¿Cómo se interrelacionará con el gobierno de la Generalitat de Cataluña? ¿Y qué tienen previsto en cuanto a la colaboración con los ayuntamientos? A veces una administración autonómica no dispone de recursos suficientes para desarrollar conjuntamente algunas promociones, y los ayuntamientos también son decisivos. ¿Qué relación establecen con ellos?
Marta Madrenas i Mir (GJxCAT):
Con estas servidumbres, con estos condicionantes que están expulsando ustedes, ¿qué relación tienen con la Sareb? ¿Qué pasará con los inmuebles de la Sareb? ¿Qué están haciendo con los inmuebles de la Sareb y SEPES? Porque siempre que hemos pedido que se traspasen todas las titularidades de los inmuebles de la Sareb nos dicen que esto va hacia SEPES. ¿Ya está hecho? ¿Ya han pasado todos los habitatges, todo el suelo? No, exactamente.
Usted ha hablado de una medida que propuso el Grupo Socialista y que le parece muy adecuada. Le he de decir que Junts per Catalunya también la defendemos y que nos parece bien que se establezca un límite temporal indefinido de esta protección, de hecho lo decimos. Pero quiero recordar que cuando, al menos en Cataluña, se intentó hacer algo similar —hablo de los años 80 y 90— fueron precisamente los sindicatos y el Partido Socialista los que se opusieron. No por nada, no por mala fe, sino porque decían que esto creaba ciudadanos de segunda que compraban con servidumbres y que en ningún caso la gente con menos recursos debía verse sometida a tener una propiedad con condicionantes, algo que consideraban tremendamente injusto.
Lo digo porque me ha parecido que daba por sentado lo que pensábamos algunos y, pues no; pero ya le digo quién defendió lo contrario en Cataluña. Le rogaría más concreción y, finalmente, que sus fórmulas de difusión de lo que hacen sean más transparentes. Seguro que usted también lo conoce un poco, y si ha entrado en la Sareb no entiendes nada: no sabes qué inmuebles hay en tu ciudad, en qué estado están, si están ocupados o no, si están alquilados o no, si se están gestionando o no… no se entiende nada. Yo le ruego, porque de momento no es así, que hagan un ejercicio de transparencia y que efectivamente informen de forma pública y transparente —como es necesario en una empresa pública— toda la información que sea necesaria y que al menos nosotros, para realizar este control parlamentario que es imprescindible, podamos disponer de garantías.
Gracias.
Etna Estréms Fayos (GR):
Muchas gracias, presidenta. Muchas gracias por su comparecencia. Yo, como supongo que se espera —y ahora lo iré explicando—, creo que es importante decir que, en comisiones en las que las comunidades autónomas tenemos las competencias transferidas, y siguiendo un poco el hilo de lo que hizo el compañero del PNB en Sanidad esta misma semana, esperamos que se impliquen lo mínimo posible y realicen el trabajo que corresponde desde aquí, sin entorpecer la labor que podemos hacer desde las comunidades autónomas.
La compañera de Junts per Catalunya hablaba de competencias absolutas en materia de vivienda, pero, en cambio, cuando desde el Gobierno Republicano intentamos impulsar la Ley de Vivienda, el Tribunal Constitucional la elevó con la connivencia del Partido Socialista. Tuvimos que regular la materia desde aquí porque la emergencia obligaba a hacerlo, quedaban vacíos que todavía intentamos solucionar, pero creemos que claramente se debería actuar desde donde corresponde, que es desde Cataluña, donde existen las competencias absolutas.
Dicho esto, estoy segura de que usted sigue la actividad parlamentaria y sabía perfectamente que le hablaríamos de los inmuebles de la Sareb, porque, aunque puedan estar muy bien todos los planes que expone, requerirían más concreción —en muchos nos pondríamos de acuerdo—, pero los inmuebles de la Sareb no están a disposición de la gente. Me sorprende infinitamente que, siendo la parte progresista y la parte nacionalista las que estamos de acuerdo en que deben traspasarse —usted lo ha dicho con tanta emoción que pensé “¡a ver si ahora sí será!”—, de momento no lo estén. Para nosotros esto es grave, y, como el resto de partidos nacionalistas, exigimos que estos inmuebles se gestionen desde las comunidades autónomas, que son las que mejor conocen su territorio.
En el territorio. Son las administraciones más locales, incluso los ayuntamientos, los que saben las necesidades de las personas que viven en sus territorios.
Y en las últimas conversaciones que hemos tenido con el Gobierno la excusa es justamente que hay algunas comunidades autónomas que no garantizan el derecho del habitación público a perpetuidad y, con esa excusa, el Ministerio no traspasa a las comunidades, a los países, dentro del Estado, que sí que lo hacen. En Cataluña garantimos la perpetuidad; trabajamos en este sentido.
Dicho esto, también quería poner sobre la mesa que el habitación público debería ser de alquiler. Es decir, aquí hemos hablado de compra-venta y tal, pero, para nosotros, para Esquerra Republicana, el habitación público debe ser intrínsecamente de alquiler, porque el bien público no puede ser de propiedad privada en ningún caso, ni a preu asequible ni sin preu asequible. Veo que Alberto dice que sí con la cabeza: si es público, es de alquiler, porque tú estás disfrutando de aquel bien en el momento en que lo necesitas.
Una mica… para poner un ejemplo muy extraño, pero que a mí me funciona: la escuela pública, a la que vamos todos y todas, la utilizamos cuando estamos en periodo escolar; no la utilizamos toda la vida. La utilizamos cuando la necesitamos. Pues el habitación público ha de ser exactamente lo mismo: lo tenemos que utilizar siempre que lo necesitemos, pero nuestra situación puede cambiar y, en algún momento, nos podemos comprar una vivienda. De hecho, aspiramos a que la gente se pueda comprar una vivienda para vivir, porque eso también debería ser un derecho o una opción.
En mi zona, más del 50 % de los viviendas las compran extranjeros, y no extranjeros extracomunitarios, que son los que el Gobierno quiere limitar, sino los franceses. Aquí hablamos mucho de ocupaciones, pero el problema en mi pueblo y en mi zona no son las ocupaciones, porque la gente no puede encontrar una vivienda; por tanto, creo que tenemos que reflexionar en este sentido y hablar de cómo hacemos este traspaso. No tiene ningún sentido que no lo hagamos.
Los inmuebles de la Sareb, como decía, muchos de los que estaban en mejor estado se han ido vendiendo y ya no los tenemos; ahora la excusa es que están en mal estado los que nos quedan, que están en zonas donde no quiere vivir nadie. Nosotros discrepamos de esto y estamos seguros de que muchísima gente querría vivir en una de esas casas, y que se podrían desarrollar esos solares que están en lugares del país o del Estado; estoy segura de que muchísima gente querría encontrar un lugar donde vivir.
No puede ser que solo nos enfoquemos en las grandes ciudades. Es que no hay inmuebles de la Sareb en Barcelona, o al menos eso dicen ustedes, pero, como decía Marta, no lo sabemos; incluso hemos hecho preguntas parlamentarias, porque los grupos municipales de Esquerra Republicana están desesperados, ya que no saben si en Girona hay inmuebles de la Sareb, y nos dicen “miren en la web”, y en la web no hay nada.
A mí me gustaría saber si, ahora que los inmuebles de la Sareb se gestionarán desde SEPES, este ejercicio de transparencia lo cambiaremos. ¿Qué podemos esperar de esta modificación? Porque si el funcionamiento es simplemente un cambio de nombre, nosotros no lo creemos.
Le pondré un ejemplo: en Riudoms, es un municipio del Camp de Tarragona, hay un edificio de la Sareb que está inacabado desde hace 15 años. Con piscina comunitaria, era un edificio chulísimo; el bloque y los pisos estaban acabados, pero no las tres calles adyacentes, que quedaron a medio hacer cuando llegó la crisis inmobiliaria de 2010. Ahora toda la zona está vallada, incluido un edificio que está acabado y las tres calles del entorno. Esto se ha convertido en un caos de porquería: los pisos han estado saqueados; entran a robar; hubo un tiempo en que había ocupas, ahora no; y hay que reformarlos. Esto es de la Sareb, esos pisos están acabados y ustedes han permitido que estén en mal estado.
Por ello, creo que tenemos que hacer una reflexión muy importante. Quisiera hacer una última referencia: es un tema que llevamos al Senado y que le comentamos a la ministra de Vivienda, y que finalmente hemos registrado una iniciativa parlamentaria para intentar conseguir la información que son los contratos que tiene la Sareb con los fondos de inversión KKR y Blackstone. Estos fondos, que además nos consta que tienen tratos con empresas israelíes, tienen…